"Con 2 semanas de antelación
estábamos de acuerdo con el golpe (Henry Ramos Allup)
Entonces reunieron a su gente,
esa que siente odio por los que no piensan como ellos y que decidieron
acudir a un hombre de raiz pueblerina como su Presidente. Esa mañana
el sol era una arepota de maiz amarillo dejando caer sus brasas sobre
el suelo venezolano. Los golpista andaban reunidos, la alta cúpula,
entre ellos los militares que ofendieron el gentilicio de los guerreros
de Bolívar, eran un solo cuerpo, atiborrado de prejuicios y a
la vez de miedo, porque vamos a lo cierto y cero mojigatería. LOS FASCISTAS
VENEZOLANOS SON UNOS IMBÉCILES TARADOS Y COBARDES. Henry Ramos,
Borges y Teodoro no aguantarían una noche de acción en el 23 de Enero
como en los años sesenta y setenta. Mojarían su ropa interior, sin
duda alguna, porque los políticos cobardes son buenos es hablando paja,
mintiendo y huyendo: ellos tenian sus pasaportes listos para escapar,
gallinas y tembleques igual a Leopoldo López y Gerardo Blyde
El sistema radial y televisivo
esperaba la hora 0 para darle inicio al bombardeo de mierda al pueblo.
Un grupo de militares, el día anterior, bajo el mando de Carlos José
García, se llegaron hasta la casa del periodista Ovidio,
más conocido en el mundo de la mediocridad como Anopeleón Bravo y
desde allá, dirigidos por un comemierda cineasta y miserable comenzaron
a filmar y a grabar las más crueles mentiras con las cuales se
puede engañar a un pueblo.
El guión entregado por los
militares gringos que funcionaban desde Fuerte Tiuna, era anticipar
la masacre de varias personas en las cercanías de Miraflores, cosa
que harían sus franco tiradores, los cuales algunos funcionaron desde
el Ausonia y el Edén- Yo estuve al lado de uno de los que
recibió un tiro. ¿Por qué carajo todavía estos hoteles están en
Caracas? Como dijo uno de los golpistas: "Hay que cerrralos y meterlos
presos". Todos los canales prvados de televisión estaban de acuerdo
con la trama, pero fue VENEVISIÓN quien dispuso de su sistema de video
para trastocar la noticia que un traidor y vende patria reportero hacía
desde un lugar de puente Llaguno, debe estar preso y enviado al ostracismo,
este manipulador, como igualmente el locutor que llamaba a la gente
para que dijera donde estaban los chavistas para irlos a buscar y eliminarlos)
En otro hotel, hoy llamada
Alba, Luis Miquilena y los que habían saltado la talanquera seguían
palmo a palmo la traición al pueblo y al Presidente, el cual una vez
dijo, lleno de humanidad que Luis Miquilena era como un padre para él,
empero el viejo corrupto con rostro de vendedor de joyas, no lo pensó
así y traicionó a quien le dio la mano y el poder, a este miserable
esqueleto caminante, el infierno ha de darte una ración de la que le
suministró al pueblo venezolano , alguna vez vez diablo maloliente.
Las periodista de El Nacional,
Ibéyise Pacheco y otros, la de Venevisión, Ana Vacarella y otros,
se habían convertido en una especie de protagonistas del golpismo y
la irresposabilidad. Jamás se habían visto dos mujeres, perdón
3, con Marta Colomina, perdón 4 con Patricia Poleo, en una acción
donde se les perdía el amor y el cariño por los seres humanos, como
es la naturaleza de una mujer, porque creemos que ellas sabían que
en ese golpe la muerte rondaba por todos lados. Pueden estar seguras
que el pueblo , las excecró, las obvió para siempre de su amor. ¡Claro!
el otro pueblo, el androide, el robotizado, el que al igual que un muñeco
no tiene alma, pues para ese ellas serán las heroínas de la maldad.
La CIA ordenaba y todos los
partidos políticos AD, Copei,Unt, con sus jefes al mando, mostraban
sus afilados colmillos para penetrales el corazón a un
pueblo que no tenía porque pasar por ese cruel momento. Hoy muchos
no se explican porque Henry Ramos Allup, Leopoldo López, Capriles Radonski,
Julio Borges, Gerardo Blyde, Ravell, Antonio Ledezma, Fedecámaras,
el núcleo pederasta de la iglesia católica, y demás asesinos, andan
por ahí con sus caras izadas sobre el tiempo. Hombres miserables, engendros
macabros, irresponsables gusanos de pacotilla, patanes y meretrices
del hogar, sin respeto, burlistas, sin alma ni amor, ofendiendo la casta
y el patriotismo del soberano que solamente lo que anhelaba era ir en
busca de su propio destino, eligiendo a uno de su extirpe
Alfredo Peña vendido al enemigo
del gobierno del pueblo, utilizó la infernales armas contra la inocencia
de puente Llaguno. No le importó que esos mismos seres a los cuales
ordenaba asesinar, lo habían llevado al poder de la alcaldía con sus
votos, así mismo actuaron los otros; los que después que saborearon
el triunfo de la mano de la revolución, traicionaron y mataron.
La hueste enferma, esa que marchó contra Miraflores sedienta de sangre,
buscando a quien masacrar por odio, la misma que traicionó al Libertador
y llenó de feca el uniforme de Páez, creyó que volvería a poner
su pestífero culo de "manos blancas" otra vez en los senderos
de la patria, pero pueblo mata complejos.
Ningún cobarde, ningún hombrecito
por fuera, ningún mediocre, ningún ignorante y avaro traidor, podrá
posee la riqueza del amor de un pueblo, porque no es digno, porque le
queda grande sentir ese calor, ese roce, esa maravilla que exhala el
alma del gigante de las miles de cabeza. Hoy a 9 años de esa experiencia
donde la maquinaria pueblo se detuvo entre la llanura de Caracas para
gritar, ¡vuelvan carajo! el mayor honor que se le puede hacer a la
patria venezolana, a los militantes del valor y la heroicidad, es apartar
para siempre a esa sarta de Calígulas, de criminales, de parásitos,
de semen del diablo, de la dirección de la patria. Honor a nuestro
militares patriotas y pueden contar que el pueblo jamás volverá a
permitir que la sifrinada enferma y mentirosa del este, la que roba
PDVSA, la que roba el Erario Nacional, la que se entrega al enemigo
y anhela que el foráneo se apodere de las riquezas del suelo venezolano
vuelva a tratar de maltratarlos y a mirarlos con ojos de mal brillo.
Hoy es un día digno para gritarle a los Borges, a los Allup, a los López, a los Capriles, a los que hablan de dictadura e ignoran que el pueblo estuvo bajo ella durante 150 años, que sus presencias dentro de la política venezolana, es un asco, una verdadera calamidad de orden ético, porque son peones del imperio y que si es verdad que en alguna parte de sus cuerpos queda una célula sana, pues que se vayan bien lejos, al mismo infierno a comer MC pato Donald, porque a este pueblo no volverán con sus miserias, con sus traciones, con sus macabras ansias de poder PARA MATAR.
PD en estos días la mano clueca,
gallínácea de Julio Borges intentó ensuciar el paltó del caballero
Soto Rojas