La O.I.T El desempleo juvenil en latinoamerica

La OIT advirtió que el aumento del desempleo puede conllevar un nuevo crecimiento de la informalidad, en la que ya están 134 millones de latinoamericanos, además de descensos en los salarios y un incremento del trabajo por cuenta propia

Para los que sufren la agonía del desempleo, el problema va más allá de no encontrar una actividad física que le reporte dinero para vivir.

De acuerdo con datos de la OIT, unos 16,7 millones de jóvenes que han logrado encontrar trabajo en América Latina y el Caribe, todavía viven por debajo de la línea de la pobreza de un dólar diario.

Y lo que es más alarmante aún, estos representan el 36 por ciento de los jóvenes con empleo en la región, o uno de cada tres jóvenes trabajadores.

En pocas palabras, para los jóvenes que han logrado superar la dificultad de obtener un puesto de trabajo, éste no les alcanza para generar los ingresos necesarios a fin de enfrentar sus necesidades de alimento y vivienda

Por otra parte, las exiguas remuneraciones por desempleo, inexistentes en gran parte de las naciones latinoamericanas, no cubren las necesidades hasta el punto de evitar la más completa miseria para el desempleado y sus familiares.

La pobreza, la insalubridad y la desnutrición son endémicas en el campo y en los barrios marginales de Perú, Chile, El Salvador, Costa Rica, México y otros, cuyos indicadores económicos básicos son uno de los más críticos de la región.

Dada la coyuntura actual de guerra económica que atraviesa Venezuela, Según Eduardo Reginfo que se deberían hacer para minimizar el desempleo juvenil:

1.- Reducir el riesgo país, garantizando un marco jurídico que respete la inversión y la propiedad privada. En los últimos años, la expropiación de la empresa privada por parte del gobierno ha ahuyentado la inversión extranjera significativamente, empresas que cerraron y se fueron del país dejando a miles de trabajadores desempleados.

2.- Reactivar el aparato productivo nacional. Actualmente en Venezuela la capacidad instalada es mínima, lo que ha llevado a depender aún más de las importaciones y ha incrementado el desempleo.y la migración El Estado debe crear estrategias y proyectos que mejoren y potencien la actividad productiva en Venezuela, mientras más produzcamos y desarrollemos más fuentes de empleos surgirán para los jóvenes del país.

3.- Desarrollar una convergencia entre lo académico y las necesidades de desarrollo del país. Muchos de nuestros jóvenes se están graduando en carreras universitarias que difícilmente pueden encontrar un empleo para ejercerla, generalmente porque la carrera tiene mucha demanda y poca oferta en lo laboral, entonces o pasan un buen tiempo sin emplearse o se frustran en un empleo que no tiene nada que ver con la carrera que estudiaron.

El Estado venezolano debería de priorizar cupos en carreras universitarias que guarden relación con un plan de desarrollo económico de la nación; que nuestras universidades, estudiantes, el gobierno y el sector privado estén alineados en cuanto a las reales necesidades y converger en un plan educativo y de empleo direccionado a potenciar el desarrollo del país. Crear un balance de oportunidades de formación académica a las necesidades de empleo. De esta manera la inversión en la adquisición del conocimiento y desarrollo de habilidades en los espacios académicos se aplicarían de forma productiva en el parque industrial de la nación y nuestros jóvenes se sentirán incentivados en sus estudios y optimistas en que serían bastantes altas sus posibilidades de encontrar un empleo para ejercer su carrera.

4.- Apoyar e incentivar a los emprendedores: Apoyar e incentivar en materia técnica y crediticia a los jóvenes emprendedores de diversos sectores del país, especialmente aquel cuyo emprendimiento sea positivo para el desarrollo de la nación y genere fuentes de empleo.

la necesidad de "encender nuevos motores de crecimiento" para enfrentar con nuevas políticas los "múltiples retos que plantea este escenario para Venezuela"
"El mal desempeño en los mercados de trabajo de los últimos años no podrá ser revertido de manera fundamental sin grandes esfuerzos en materia de desarrollo productivo, innovación y talento humano"



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Antonio J. Rodríguez L.


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