10-03-17.-Cinco médicos venezolanos, uno general, una psiquiatra, un fisiatra, una estetecista y una epidemióloga, relataron cómo hacen para lidiar con la crisis actual del país en insumos y medicamentos, conozca sus testimonios:

José Gómez:
“Con apoyo y la  medicina natural”
“A pesar de la crítica situación, la medicina la ejerzo brindando apoyo a la gente. A veces con el solo hecho de escuchar, conversar e indagar sobre el problema de salud con que vienen los pacientes logro solventar parte de la enfermedad. Ante la falta de medicamentos, muchas veces recurro a la medicina natural para el alivio de los síntomas”, afirma José Gómez, egresado de la Universidad del Zulia en 2011 y quien ejerce como director del ambulatorio Cuatro Vías, en el municipio Jesús Enrique Lossada.  Considera el médico, que acaba de concluir el postgrado a distancia de medicina general en el Instituto de Altos Estudios Doctor Arnoldo Gabaldón, en Maracay, que en estos tiempo aplica mucho también la promoción y la prevención, sobre todo informando sobre los factores de riesgo de los trastornos”.

Mónica Mosquera:
“Es una tarea titánica y de educación”
Mónica Mosquera se graduó en la Universidad del Zulia en 1985 y como psiquiatra en 1994. Dice que ejercer la profesión ante tantas dificultades es “una tarea titánica”. Afirma la consultante del Hospital Psiquiátrico y directora de Cuida tu mente que a veces se siente “atada de manos y pies”,  pero que gracias a la formación que recibió puede ofrecer orientación y ayuda a sus pacientes para la solución de sus problemas, así no esté en sus manos. “Estamos formados para dar salud y a veces por la situación sentimos impotencia, frustración, rabia, y hasta nos provoca ponernos a llorar con los pacientes, sobre todo cuando sabemos la romería que viven en la búsqueda de medicamentos, pero no podemos darles más problemas. Por eso, también tenemos la tarea de buscar alternativas, manejar su  emocionalidad y educarlos para evitar la enfermedad”.

 Adelis Hernández:
“Me coloco en el lugar del paciente”
“Le hago frente a esta crítica situación como médico colocándome en el lugar del paciente, escuchándole sus necesidades y carencias. Me causa mucha ansiedad y me genera frustración ver cómo no consigue medicamentos y no tiene dinero para pagarse una prótesis o un bastón, por ejemplo. Me toca  entenderlo y tratarlo como quiero que me traten a mí o a uno de mis familiares, y entonces les oriento y  les doy opciones para buscar ayuda en algunas instituciones”, expone Adelis Hernández.  Egresó de la Universidad del Zulia en 1998 y del postgrado de medicina física y rehabilitación (fisiatría) en 2006, del Centro Nacional de Rehabilitación Doctor Alejandro Rhode, en Caracas, del que es su subdirector médico desde el mes pasado. Además, preside la Sociedad Venezolana de Medicina Física y Rehabilitación desde hace dos años.

Andreína Valbuena:
“Nos toca  correr buscando los insumos”
Andreína Valbuena recibió el título en la Universidad del Zulia en 2008. Cinco años más tarde egresó de esa alma mater  como magister en medicina ocupacional  y el año pasado  del Fundacion Centro de Estudios de Medicina Estética, en Caracas, como especialista en medicina antienvejecimiento, área en la que se desempeña en Maracaibo. “Me toca lidiar con muchas mujeres que acuden para mejor su cuerpo y embellecerse; pero, además, van también a desahogarse ante la crisis, y a quienes toca escucharlas”. Comenta que con la ayuda de su esposo, su colega, ayuda a sus pacientes a buscar medicamentos y “nos toca correr buscando los insumos, como inyectadoras, jeringas”. Le dice a sus pacientes que confíen en Dios y que sigan adelante. “Afortunadamente, los venezolanos somos luchadores y siempre encontramos soluciones”.

Mayra Carruyo:
“Con soluciones muy prácticas”
“Somos médicos y como tales seguimos luchando a pesar de todo y contra todo”, asevera Mayra Carrullo. Ante la crítica situación que vive el país, esta egresada de la Universidad del Zulia en 1998, quien labora como epidemióloga en el Hospital  Regulo Pachano, conocido como Sanipez, recurre a alternativas accesibles y fáciles de aplicar en casa para ayudar a sus pacientes, sobre todo a los más pequeños. “Si el niño tiene fiebre le insisto a la madre en que un baño se la bajará, si tiene diarrea que le dé de comer plátano verde, si está deshidratado que agua, azúcar y sal juntos  funcionan como un suero oral”, afirma. Se trata de “soluciones muy prácticas” de atención primaria. Dialogar con los pacientes y explicarles sobre lo que les afecta también, además de insistirles en la higuiene personal y familiar, es una herramienta que utiliza también Carrullo.