Sobre la lealtad centró sus palabras de presentación el Gobernador Edwin Rojas; la lealtad que Diosdado Cabello ha tenido con nuestro Presidente Nicolás Maduro Moros en su difícil trayecto como Presidente de la República.
En verdad, hemos visto a Diosdado curtirse como revolucionario. Cuando las "acciones" están bajas, cuando los ánimos están caídos, hemos visto salir a Diosdado a recorrer el País, con lo que tiene, y con voluntad, hecho un torbellino: "revuelve", convida, entusiasma, agita y moviliza al pueblo Chavista, haciendo que éste se reconozca en su valor, en su fibra, en su esencia revolucionaria y antimperialista. Une Diosdado, con mayor contenido cada vez más, producto de su aprendizaje, de su desarrollo.
Así lo vimos en Cumaná, desde que llegó a la Concentración en la Iglesia Virgen del Valle, para la salida de Marcha que culminaría con un acto en el Puente Gómez Rubio. Un pueblo, que no se sí sabía que Diosdado venía, pues la convocatoria fue de la noche para la mañana; allí estaba, como siempre volcado en las calles y, al sentir la presencia de nuestro primer vicepresidente, se transformó convirtiéndose en una muchedumbre alegre, expresiva, amorosa que entre pasos apresurados y empujones se tragó el corto trecho de la macha. Envuelto Diosdado de gente, pudo llegar a la tarima y entre cantos revolucionarios de niños y adultos, vino el reconocimiento a su lealtad y sus orientadoras y oportunas palabras.
Cosas buenas también hubo, previo a la salida: arengas y músicas desde varios camiones, los saludos de una gente que en su alma lleva el sentimiento profundo por la defensa de su Patria amenazada y acechada, y también, hay que decirlo: una buena marcha que levantó la "polvoreda" desde la Alcaldía Bolivariana del Municipio Sucre, con su Alcalde Luis Sifontes al frente, sus trabajadores y su pueblo, hasta el punto de salida oficial.
Diosdado, en su discurso recogido en cortas pero contundentes palabras puso en relieve la necesidad de seguir fortaleciendo nuestra unidad cívico-militar; la cual tiene en él, una representación ejemplar. En él se conjuga la mano amiga hacia el militar con la mano amiga y franca hacia el hombre y la mujer de nuestro pueblo llano. Habló de su lealtad a Maduro, de su acompañamiento y de su reconocimiento a un obrero que supo escoger Chávez para lidiar con el enemigo imperial en estos tiempos difíciles que Chávez veía venir. Pidió a los "habladores de paja", entendí yo, que se pusieran un tiempito aunque fuera en los pies de Nicolás Maduro Moros, en estos momentos de ataque intenso, para ver si pudieran obtener los resultados que este ha obtenido y las victorias que hoy le honran y engrandecen. Finalmente, pidió Unidad y confianza en la victoria que finalmente tendremos. En Cumaná brilló el primer anillo de la revolución bolivariana, ese que al calor de Chávez fue tomando cuerpo y librándose de la impurezas que comportaban elementos raros como el personificado en el traidor, corrupto y ladrón que oculto en Viena lanza pestes al proceso y a líder que a riesgo de su vida, lo conduce consecuentemente, con lealtad infinita a nuestro eterno Comandante.
Pienso, como Diosdado, que al final la victoria será nuestra y que Maduro, con su pueblo y con su equipo nacional e internacional, ya le va tomando el pulso a la guerra económica, ha impedido que rebasaran la frontera de menos de un dólar el Salario Mínimo y ha sido capaz de reponernos el Salario en tres oportunidades, cosa que ha venido complementando con protección social diversa y con bonos especiales. Todo esto mientras se desarrolla nuestro Plan Económico en el marco del Programa de Recuperación, Crecimiento y Desarrollo Económico y Social.
Como Diosdado, también pienso que el 23 de Enero los derrotaremos como sucedió el 10 y que para ello es vital que tomemos las calles y vayamos en "cambote" para Caracas.
¡ EL IMPERIO GENOCIDA Y SUS LACAYOS, NO PASARÁN!
