De entrada,
vale una recapitulación. Desde el mismo día y año que se conoció
la agrupación criminal denominada “autodefensas…” con el sobrenombre
de los paramilitares, hemos debido deslindar de propiciadores de esos
grupos al ejército de los pueblos y de hombres forjadores de la libertad,
como es nuestro ejército libertador.
Claro que los
ejércitos de otros países donde utilizan a estos grupos asesinos como
avanzada y fachada del crimen, es porque todavía en sus comandos
tienen la mentalidad pinochetista de la extinta “Escuela de
las Américas”, hoy aupados por el brazo armado judío del Mossad,
entrenador de grupos paracriminales.
No solamente
en Colombia, donde algunos gorilas con voz de mando (con el perdón
de los amigables chimpancés) nos los envían por los “caminos verdes”.
También el imperio los amamanta en unos cuantos países donde ya
sus vasallos perdieron el poder del engaño.
Así las cosas,
acá en Venezuela, para abrirles cancha fronteriza a los malvados sin
el permiso de los pueblos venezolano y colombiano, están prestos los
pitiyanquis Manuel Rosales, para “bajar” la cadena fronteriza, y
Federico Ravell para ubicarlos estratégicamente distribuidos. Para
esto los subalternos Julio Borges, Ledezma y demás adecos, y el judío
Capriles Radonski en Miranda.
Fugitiva Patricia
Poleo y Gonzáles Gonzáles, el del obelisco de Altamira (dicen que
andan por ahí…), los fichadores de Globovisión abren el almacén
de la metralla, con lo que primero atemorizan, para luego rematar, previa
selección y por goteo, del fichero en donde aparecen las imágenes
tomadas por el fotógrafo del fascismo y copeyanisimo Planas, quien
se ganó un “reconócelo pueblo”.
Ahora bien,
antes de que pelen los dientes de la podadora, aclaramos que lo de judío
en prácticas asesinas de las aquí mencionadas, no involucran a todos
los seguidores de esa agrupación mundial. Es que en el espacio de una
columna de opinión no caben las decenas de denominaciones que utiliza
el judaísmo cuando se trata de arrojar la piedra y esconder la mano,
pero que cuando de victimizarse se trata, entonces sí son judíos.
En todo caso,
son los humanistas donde no caben los judíos Ravell y Mezzerhane, quienes
deben fijar posiciones. A propósito de crímenes atroces, sin alusiones
personales, ¿en que paró la búsqueda de los criminales intelectuales
del asesinato del fiscal de la dignidad, el valiente camarada Danilo
Anderson?.
Luego entonces,
son los hombres y mujeres judíos de buena voluntad; los gentiles judíos
a quienes sentencia de muerte el Talmud, quienes deben hacer un gran
esfuerzo de solidaridad, a pesar del chantaje y el terrorismo de opinión,
de manera de dar al traste y acabar con esa secta derechista, intrigante
y asesina, brazo armado de fariseos y avaros que, mediante el terrorismo
y el crimen, se han adueñado de casi todos los recursos pertenecientes
a la humanidad.
Sabemos de
unos pocos muchachos y muchachas israelíes que se arriesgaron a protestar
la masacre en Palestina, mientras acá en Venezuela el canal televisivo
Globovisión de los judíos Mezzerhane y Ravell, justifican la barbarie.
Esto nos dice que el poder del gobierno expansionista judío de Israel
es el verdadero dueño de la gran mayoría de los medios de comunicación
mundial y del gran capital que, hasta antier ostentaba el imperialismo
yanqui. Siendo así Obama, como el negro general que “brilló” como
el águila del desierto, tendrá que reconocer que sí estudió en la
cartilla del Dietz. También obedecerá el mandato de los fariseos.
Patria, Socialismo
o barbarie. Venceremos!.