7 de agosto de 2020.- Este viernes continuaban las labores de rescate de cadáveres en Beirut, Líbano, tras la potente explosión no nuclear más potente de la historia después de Hiroshima, que se registró esta semana en el puerto de la ciudad que ha dejado 149 fallecidos y miles de heridos, así como la destrucción de galpones, silos y numerosas edificaciones.
Medios internacionales informaron que equipos de rescatistas de Francia y Rusia han encontrado en las últimas 24 horas a otros cuatro cuerpos. En las labores se ha incorporado a perros rastreadores.
De acuerdo a las autoridades libanesas, la explosión se produjo en un almacén del puerto donde estaban depositadas 2.750 toneladas de nitrato de amonio, desde hacía seis años.
Es por ello, que el gobierno de Líbano inició una investigación y ordenó la detención de 16 funcionarios del puerto.
Unas 300.000 personas, más del 12% de la población de Beirut, no pueden regresar a sus casas por la explosión, que arrancó puertas y ventanas en toda la ciudad y dejó muchos edificios inhabitables. Las autoridades estiman las pérdidas entre 10.000 y 15.000 millones de dólares, reseña la agencia AP.
