Brasilia, noviembre 13 - El presidente electo de Brasil, el ultraderechista Jair Bolsonaro, reculó una vez más en sus declaraciones y afirmó este martes que no prescindirá del Ministerio de Trabajo, pero que lo fusionará con otra dependencia.
'El orden de los factores, no afecta el producto', dijo Bolsonaro a la prensa, tras explicar que ese ministerio no será una secretaría, pero sí se agrupará con otra cartera sin someterse a otra instancia.
Una vez más el excapitán del Ejército comunicó que ampliará la cantidad de ministerios, como prometió durante su campaña electoral, y especificó que serán unas 17 o 18, y no las 15 anunciadas.
En horas matutinas, el político de extrema derecha designó al general Fernando Azevedo e Silva, quien hasta julio fungió como jefe de Estado Mayor del Ejército, como ministro de Defensa de su administración y remarcó que no adelantaría ningún otro nombre para liderar las otras direcciones.
Se espera que de un momento a otro el mandatario electo anuncie los nuevos titulares para las carteras de Medio Ambiente, Salud y Relaciones Exteriores, quienes, según el propio exmilitar, estarán vinculados al sector que encabezan.
Acerca de la invitación realizada por el jefe de Estado Michel Temer de acompañarlo a Argentina para participar en la cumbre del G-20 (finales de noviembre), alegó que no será posible por razones de salud.
De acuerdo con círculos cercanos al presidente electo, para mañana debe reunirse con gobernadores electos y en horas vespertinas regresar a Río de Janeiro.
El 7 noviembre Bolsonaro dialogó en el Palacio de Planalto, sede del Gobierno, con Temer. Por vez primera llegaba a Brasilia tras ganar las elecciones del 28 de octubre.
Luego de protagonizar su primera visita al Congreso, después de su victoria en las urnas con el 55 por ciento de los votos, afirmó que cumplirá su compromiso con la Constitución.
Por sus afirmaciones discriminatorias contra la mujer, los homosexuales, negros y pobres, Bolsonaro genera inseguridad y polémica en la sociedad brasileña.
