Un fantasma recorre el mundo es el neofascismo, no es el comunismo. La democracia está en peligro y seriamente amenazada. Antes de explicar el neofascismo describamos muy brevemente el fascismo. El fascismo fue un movimento ultranacionalista político de extrema derecha fundado oficialmente en Italia en 1919 por Benito Mussolini que posteriormente se extendió con el nazismo (a los seguidores actuales se les llama neonazis) a la Alemania de Adolfo Hitler. Es una ideología totalitaria, peor que una dictadura, su expansión desencadenó la II Guerra Mundial. El fascismo no ha muerto, se convirtió en el nuevo fascismo, neo (nuevo) fascismo. Actualmente hay movimientos y representantes del neofascistas como la influyente ultraderechista Keiko Fuijimori en Perú, Jair Bolsonaro en Brasil, Marina Le Pen presidenta del partido Reagrupamento Nacional en Francia, Donald Trump, Alt-Right y los Proud Boys en EE.UU, el partido Vox en España, la primera ministra Giorgia Meloni de Italia, en El Salvador Nayib Bukele, en Hungría Viktor Orban, en el Reino Unido Boris Johnson, en Alemania los Ciudadanos de Reich, en Puerto Rico tiene algunos de sus portavoces dentro de las filas del Partido Nuevo Progresista y Partido Popular Democrático, solamente por mencionar algunos. Pueden parecer a simple vista pequeños grupos o pocos indivíduos, sin embargo son muy peligrosos. El neofascismo se manifiesta de diferentes maneras según la historia y la realidad distintiva de cada país.
A continuación algunas ideas que son parte de su ideología, que nos pueden ayudar a identificar los neofascistas y ver si estamos también contagiados por el coronavirus del neofascismo:
1. Culto a la tradición. No puede haber avances en el saber, ya todo está dicho y hecho. Por ejemplo en Puerto Rico algunos políticos y cristianos fundamentalistas de corte neofascista se oponen agresivamente a nuevos proyectos de ley que quieren a atender las necesidades particulares de las mujeres. Hablan de un concepto familia; como si existiera un solo concepto de familia. Los neofascistas suelen ser racistas, homofóbicos y misógenos. Los neofascistas por lo general no aceptan la evolución del pensamiento, el avance de las ciencias y de que vivimos en un mundo de constates y rápidos cambios.
2. Es común aceptar y defender las conspiraciones. De acuerdo a Ignacio Ramonet, en EE.UU. Michael T. Flynn, Republicano, general retirado y muy amigo del neofascista Trump, fue el destacado defensor de las teorias de la introducción de microchips en los cuerpos para supuestamente controlar la gente, que los amigos del ex-presidente de Venezuela Hugo Chávez estaban organizando un fraude electoral junto a los Demócratas para las elecciones presidenciales del 2020. Que los chinos presuntamente crearon el COVID-19 en un laboratório para atacar la economia de EE.UU. Sin pruebas, Trump declaró que las elecciones fueron un fraude, lo mismo Bolsonaro en Brasil.
3. Suelen ser selectivos en su versión de la historia. Los líderes neofascistas de Bolsonaro en Brasil halagan la dictadura brasileña (1964-1985). Según ellos la dictadura presuntamente los salvó del "comunismo". Para los dirigentes bolsonaristas no son importante las torturas, persecuciones, asesinatos, la censura e intimidación indiscriminada del régimen a que millones fueron sometidos. Como sabemos sectores bolsonaristas emulando el asalto al Capitolio de los EE.UU intentaron un golpe de Estado atacando los tres poderes el 8 de enero en la capital Brasilia.
4. El problema son los otros. El chivo expiatório del fascismo con Mussolini y el nazismo con Hitler fueron los judíos, personas con limitaciones físicas, homosexuales, comunistas, gitanos, izquierdistas. En la actualidad los causantes de los problemas son los refugiados que muchos gobernantes europeos se niegan a recibir en sus ciudades. También los negros, los árabes, los asiáticos y los migrantes latinos indocumentados en EE.UU.
5. El enemigo. Frecuentemente su blanco de odio son los independentistas, ambientalistas, movimientos populares, feministas, socialistas, comunistas, anarquistas, los defensores de los derechos humanos, izquierdistas, las y los teólogos de la liberación, iglesias comprometidas con la justicia social, las fuerzas progresistas son sus enemigos. A quienes hay que criminalizar, rediculizar, humillar, perseguir y a veces hasta matar.
6. El líder siempre está cierto. La filósofa alemana judía Hannah Arendt, comenta que generalmente los fascistas italianos y alemanes creían ciegamente que Mussolini y Hitler eran los dueños de la verdad. Y en la Alemania de Hitler el primer juramento de los miembros del partido nazista era "¡Hitler siempre está cierto!". Abunda el culto a la personalidad a quien convierten en un héroe o mito . En Brasil le llaman a Bolsonaro el mito.
7. Su objetivo principal es destruir la democracia. Los fascistas atacaban sus instituciones y para esto se valían, entre otras, de la propaganda y tecnología de su época, que usaban para la adoctrinación cargada de mentiras. Los neofascistas se valen hoy de la tecnología como las redes sociales e Internet para crear noticias falsas, difundir eslóganes simplistas, desinformar, decir medias verdades, promover mucho odio (del odio a la violencia es un paso) y explotar las emociones del público. A nuestro juicio, una sociedad que no usa el pensamiento crítico es presa fácil de los discursos de los neofascistas. Los que no le interesa la política, son las primeras víctimas del discurso neofascista. Muchos ciudadanos alemanes no sabían en sus comienzos que había campos de concentración y cámaras de gas.
8. Los líderes neofascistas suelen creerse ser escogidos por Dios para gobernar, como Trump, Bolsonaro y en Bolivia la golpista de extrema derecha Jeanine ñez quien levantó la Biblia frente a sus seguidores en la toma del poder en noviembre de 2019. Golpista que reprimió al pueblo. Fue condenada en junio de 2022 a 10 años de prisión. Entre los neofascistas es frecuente observar la presencia de dirigentes y grupos de católicos integristas y protestantes fundamentalistas que usan la religión para justificar el neonazismo y neofascismo.
Debido a la naturaleza de este artículo se quedan otras ideas en el tintero. Se podrá objetar que la izquierda también ha cometido actos fascistas, respondemos que de acuerdo a la historia la mayoría de los regímenes fascistas han sido de ultraderecha. Es importante señalar que no todos los seguidores del neofascismo son "malos", pero probablemente sí equivocados o víctimas de sus agitadores, líderes o políticos. Debemos confrontar el neofascismo o neonazismo, no responder odio con más odio, no legitimar su ideología con el silencio, analizar el contexto en que se produce, sembrar la duda e ironía de sus discursos y conocer mejor sus movimientos, para detalles en este punto ver Juan José Tamayo, 2020. Es deseable recordar que no suelen reconocerse como neofascistas. Si usted, me incluyo, tiene varias de esas ideas neofascistas tal vez podemos estar infectados por el coronavirus del neofascismo.
Referencias
Arendt, H. (2015). Los Orígenes del totalitarismo. Editorial Alianza: España.
Eco, U. (2022). O fascismo eterno. Editorial Record: Brasil.
Emcke, C. (2016). Contra el odio: ‘No quiero que el nuevo placer de odiar libremente se normalice’. Editorial Laurus: España.
Finchelstein, F. (2020). Uma breve história das mentiras fascistas. Editorial Vestígio: Brasil.
Ramonet. I. (2022). La era del conspiracionismo: Trump, el culto a la mentira y el asalto al capitólio. Editorial Siglo Veintiuno: Argentina.
Rodríguez, R. M. N. (Diciembre, 2022). Del fascismo clásico contemporáneo: apuntes históricos sobre la intensificación de opresiones. Portal: 80grados. Puerto Rico.
Paxton, O. R. (2004). Anatomía del fascismo. Editorial Península: Barcelona.
Stanley, J. (2018). Facha: cómo funciona el fascismo y cómo ha entrado en tu vida. Editorial Blackie Books: España.
Tamayo, J. J. (2020). La internacional del odio: ¿Cómo se construye? ¿Cómo se deconstruye? Editorial Icaria: España.
Torres, C. R. (Febrero, 2020). ¿Es Trump neofascista?. Portal: Aporrea: Venezuela.
Torres, C. R. (Febrero, 2020). ¿Es Bolsonaro neofascista?. Portal: Latinas y Latinos Por El Cambio Social. Estados Unidos.