El gobierno de Estados Unidos, no ha dejado un solo segundo de monitorear la situación política de Venezuela en su afán por tratar de destruir el chavismo en América Latina, tratando de aniquilar así su núcleo más duro. Sencillamente porque éste, su plan de guerra contra nosotros, constituye, además, una cuestión de Estado, del llamado Estado profundo gringo. La estrategia sigue sosteniéndose en principio, en el mismo plan de guerra mediática mundial, que es lo típico, y ahora con lo de la PANDEMIA, centrado en el hecho de que la “dictadura de Maduro es incapaz de darle seguridad sanitaria de ningún tipo a un pueblo, por lo cual se hará imprescindible acudir en su protección… para cubrir sus básicas necesidades…”.
OJO: no importa que EE UU pase en pocas horas a ser el país con más muertos e infectados de coronavirus del planeta. No importa que ellos no puedan contener este mal. No importa que sus principales ciudades se llenen de muertos, lo clave en su estructura militar geopolítica es persistir de manera invariable y decidida, determinante y formal en el principio de que lo imprescindible para su subsistencia es darle curso a la AMENAZA INUSUAL QUE VENEZUELA PRESENTA PARA SU SEGURIDAD NACIONAL.
Porque esta “SEGURIDAD NACIONAL” representa la seguridad de sus intereses y de sus negocios en el mundo, sin los cuales el imperio no tendría sentido ni podría existir. Y en ese objetivo, véase como Trump persiste en llamar al coronavirus “VIRUS CHINO” con un estandarte de su guerra contra el gigante asiático, y que se entienda en el mundo. Es pues, esencialmente “su seguridad nacional”, un plan de guerra total, directa y declarada además contra aquellos socios de China y Rusia en el mundo, y todo, por su intereses geopolíticos y económicos.
Al declararse la PADEMIA MUNDIAL, el equipo de Trump (Pence, Pompeo, Abrams) que monitorea la situación de Venezuela-Cuba, Irán y Siria, comenzó a preparar su estrategia para imponer su maquinaria controladora geopolítica contra esto cuatro enemigos. El editorial del diario estadounidense The Washington Post del día 20 d marzo de 2020, titulado, «¿Por qué la propagación del covid-19 en Venezuela es una perspectiva particularmente aterradora?«, es muy elocuente en este sentido. En tal sentido, este editorial expone: “Algunos de los impactos más devastadores de la nueva pandemia de coronavirus podrían afectar a los principales adversarios extranjeros de la administración Trump. Irán ya está siendo devastado por el coronavirus, con más de 18,000 casos y 1,200 muertes a partir del jueves, incluida una docena de su élite política. Nadie cree que las afirmaciones de Corea del Norte hayan escapado de la epidemia. Un informe de Corea del Sur dice que cientos de sus soldados han sido asesinados por él y miles de personas están en cuarentena…”.
Véase la saña criminal de editorial, tendencioso, brutal y sádico, celebrando la muerte en estos “PAÍSES ADVERSARIOS DE ESTADOS UNIDOS”, y vean cómo el fin de este corto análisis es enfilar todas sus baterías contra nuestro país, porque añade: “Luego está Venezuela, cuyo régimen autoritario impuso un cierre nacional el lunes después de informar 33 casos confirmados, y cientos más pendientes. La propagación aparentemente rápida de la epidemia allí presenta una perspectiva particularmente aterradora, dado que el sistema de salud del país ya estaba en un estado de colapso, sus ciudadanos han huido a otros países latinoamericanos a razón de miles por día, y el gobierno ilegítimo y corrupto es completamente incapaz de enfrentar el nuevo desafío”.
El plan como siempre va dirigido a la opinión pública mundial, al estilo del GRAN HERMANO de George Orwell, para presentar la situación interna de nuestro país como insostenible y proceder en consecuencia, tal cual como hizo en el modelo de Libia. La reelección de Almagro tiene que ver con la continuación de este terrorífico plan en el que se están incrementando fuertemente las llamadas “sanciones”. Sigue diciendo el editorial de The Washington Post: “Los hospitales en los Estados Unidos y otros países desarrollados temen que no tengan suficientes respiradores o camas de cuidados intensivos para hacer frente a los enfermos graves. Pero en Venezuela, según una encuesta, más del 30 por ciento de los hospitales carecen de electricidad y agua, y el 80 por ciento carece de suministros básicos o personal médico calificado, muchos de los cuales se encuentran entre los 4.8 millones de personas que han huido del país”. Un párrafo plagado de estupideces en el que se está reconociendo que los poderosos países capitalistas no pueden con la situación, pero se busca como ejemplo de desastre sanitario total a Venezuela.
Todos los poderosos medios del mundo de inmediato se hicieron eco de este editorial y se montaron mesas de debate sobre la situación sanitaria de Venezuela en las principales televisoras como FOX News, ABC, NBC, CNN, BLOOMBERG, TW, recalcando en todos los argumentos que “…las agencias humanitarias ya han estado luchando contra brotes de sarampión, difteria y malaria en Venezuela. Mientras tanto, una encuesta de personas mayores de 50 años en septiembre mostró que el 80 por ciento carecía de suministros adecuados de alimentos, lo que significa que la población más vulnerable al virus ya está debilitada”.
Seguidamente tratan de desconocer todos los esfuerzos que hace el gobierno nacional para enfrentar en nuestro territorio la PANDEMIA, recalcando el editorial de THE WASHINTON POST: “La respuesta del régimen a la crisis ha sido una mezcla familiar de represión y propaganda. Después de que el presidente Nicolás Maduro anunciara una cuarentena nacional el lunes, las mismas fuerzas de seguridad que han reprimido brutalmente las manifestaciones de la oposición fueron enviadas para mantener a las personas fuera de las calles de Caracas y establecer bloqueos en las carreteras”. Luego formaron una chirigota mundial los poderosos medios con la solicitud que hizo Venezuela de solicitar un préstamo de 5 mil millones de dólares al FMI, explicando: “…Efectivamente, el FMI emitió rápidamente una declaración diciendo que no podía considerar la solicitud, ya que no estaba claro si el régimen de Maduro es reconocido por la comunidad internacional. Más de 50 países han aceptado el reclamo del líder opositor Juan Guaidó de ser el presidente interino. Maduro ahora puede intentar culpar al FMI y al presidente Trump por la escasez médica, pero eso no evitará que la epidemia se intensifique”.
Entre los planes que tenían los gringos para este mes de marzo era un ataque combinado con Brasil y Colombia a Venezuela. Todo estaba casi listo cuando apareció la fulana PANDEMIA, pero no por ello los gringos se detendrán en plan criminal contra la patria de Bolívar. Un guiñapo de nombre Emmanuel Rincón que escribe para PanAm Post defeca un artículo con más o menos los mismo elementos que presenta The Washington Post en su editorial y cagarrutea de este modo: “Sin máscaras, sin guantes, con escasez de desinfectantes y alcohol y, lo que es peor, sin agua y sin electricidad en muchos hospitales, así deben enfrentarse los venezolanos al COVID-19 que ataca al mundo…. La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha dado una medida principal y sencilla para evitar el contagio del coronavirus: lávese las manos con jabón. ¿Fácil, cierto? Pues sí usted vive en cualquier país medianamente normal sí, pero si usted vive en un país devastado tras 21 años de socialismo, es muy probable que abra la llave del grifo y no salga agua. Al menos 70 % de los hospitales de Venezuela denunciaron tener problemas para el abastecimiento de agua, ¿entonces?
Todo lo anterior, queridos compatriotas significa, que a lo de la PANDEMIA no podemos dejar de atender por ningún motivo los malditos planes gringos se persistir en sus criminales actos de terrorismo contra nuestro pueblo. Son mil frentes, y tenemos que estar muy bien preparados, como lo dijo el propio Presidente Maduro en su alocución de ayer domingo… OJO AVIZOR.