Traducción desde el inglés por Sergio R. Anacona
Strategic Culture Foundation
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Europa, el Medio Oriente y Asia Pacífico no son los únicos teatros de operaciones militares. El Ártico es un área rivalidad geoestratégica. La situación ahí es mantenida indebidamente fuera del enfoque de los medios de comunicación de masas. El año que recién pasó marcó nuevos descensos en la extensión del hielo marino en la región.
Rusia ha presentado una reclamación territorial de 1,2 millones de millas cuadradas en el Ártico ante la Organización de Naciones Unidas, ONU.
Bajo la Convención de Naciones Unidas Sobre la Ley del Mar (UNCLOS sigla en inglés) un estado costero puede reclamar derechos sobre la plataforma continental más allá de las doscientas millas náuticas presentando pruebas científicas que se trata de una prolongación natural de su margen continental.
La zona económica exclusiva costera de Rusia puede ser extendida lo cual le daría al estado derechos exclusivos para explotar recursos naturales en el océano y en el lecho marino. En realidad Rusia descansa sobre unos 8,5 trillones de dólares en reservas petrolíferas.
Moscú considera que la Ruta del Mar del Norte (NSR sigla en inglés) ubicada el este de Novaya Zemla que corre específicamente a lo largo de la costa ártica de Rusia desde el Mar de Kara a lo largo de Siberia hasta el Estrecho de Bering como área marítima dentro del área económica exclusiva de Rusia (EEZ sigla en inglés) según el Artículo 234 de la Convención de Naciones Unidas Sobre la Ley del Mar. Este artículo garantiza a todos los estados ribereños el derecho dentro de sus exclusivas zonas económicas de doscientas millas náuticas y aplica leyes no discriminatorias y normas concernientes a la navegación en las capas de hielo. Estados Unidos es signatario pero el congreso no ha ratificado el documento. Washington no reconoce las reclamaciones de Rusia y trata de internacionalizar la región.
Estados Unidos, Canadá, Dinamarca y Noruega tienen sus propias reclamaciones. Se cree que el Ártico contiene reservas naturales bajo el hielo por valor de unos 22 trillones de dólares, incluyendo noventa mil millones de barriles de petróleo y 47 trillones de metros cúbicos de gas natural.
Resulta natural que los estados mantengan disputas en la medida que ellas sean dirigidas sobre la base del derecho internacional y a través de negociaciones. Pero, la gradual escalada de tensiones en el Ártico es un hecho.
Según el programa para la defensa 2018-2023 del gobierno de Dinamarca habrá un impresionante veinte por ciento de aumento en el gasto de la defensa en los próximos seis años. El Ártico es mencionado como un área de creciente presencia y actividad militar. Durante el verano, Noruega reconvino con el gasto pautado de la defensa de la OTAN en por lo menos dos por ciento del PIB con su nuevo plan de largo alcance 2021-2024 teniendo este compromiso como una premisa fundamental. Oslo se dispone a invertir en "potencialidades estratégicas" tales como el nuevo F-35 caza furtivo, submarinos y aviones de patrullaje marítimo P-8. Canadá a su vez se dispone a desplegar una flotilla naval ártica. El año pasado Ottawa reveló un plan para aumentar su gasto en la defensa en un 70 por ciento (es decir más de 20 mil millones de dólares) durante la próxima década –gran parte de lo cual irá para barcos de guerra y aviones de combate. La Dorsal de Lomonosov es el principal punto de disputa territorial entre Rusia y Canadá. Esta se extiende por 1800 kilómetros desde las Islas Nueva Siberia y cruza el Océano Ártico hasta la isla canadiense de Ellesmere. Canadá realiza ejercicios militares en el área.
Boinas verdes norteamericanos se están entrenando para combatir a Rusia en la región. Del mismo modo, submarinos de ataque norteamericanos también hacen ejercicios en el área. En el mes de marzo del año pasado 1500 soldados de Estados Unidos de más de veinte unidades militares participaron en las maniobras militares Frontera Ártica, 2018. La Guardia Costera de Estados Unidos está tratando de "armar" a los rompehielos que emplea para abrir vías a través de la capa de hielo. Estados Unidos ha estacionado en Alaska sus cazas furtivos F-22 y F-35. Este despliegue le brinda a Estados Unidos superioridad aérea a través del Hemisferio Norte completo.
Rusia está implementando su Política Estatal en el Ártico Hasta el 2020 y Hacia Perspectiva Futura. El Ártico es una fuente de amenazas para Rusia. Los proyectiles balísticos de Estados Unidos lanzados desde aguas cercanas a Noruega le dejarían a la defensa de Rusia menos de quince minutos para decidir si el objeto que se aproxima es o no una amenaza, de dónde viene y cómo responder. El Ártico es la única región que le permitiría a los misiles Tomahawk lanzados desde submarinos atacar las bases de los misiles balísticos intercontinentales (ICBM sigla en inglés) en las regiones de Orenburgo y Krasnoyarsk como también en los Urales.
La Flota del Norte de Rusia es una fuerza conjunta que comprende 38 grandes navíos de superficie, más de cuarenta submarinos y un Cuerpo de Ejército que incluye dos brigadas de infantería. La Brigada de Infantería Naval 61º está adscrita al Comando Estratégico Conjunto de la Flota de Norte. Siete de cada diez submarinos armados con misiles balísticos están destacados aquí. Alrededor del 60 por ciento del inventario operativo de la flota cuenta con nuevo armamento.
El sistema Ratnik de combate de infantería pesa alrededor de 19 o 20 kilos. Está diseñado para operaciones en las condiciones climáticas del Ártico. Incluye un casco con visión nocturna, armadura corporal, equipo de comunicaciones y audífonos. En general, el conjunto comprende diez subsistemas y alrededor de unas sesenta unidades individuales. Pesa alrededor de 7,5. La armadura de la clase 6 protege casi el 90 por ciento del cuerpo del soldado de un impacto de una bala 7,62mm disparada a corta distancia. Cuenta con una protección especial contra detección por aparatos infrarrojos.
Construido a base de fibras de carbono de bajo peso, este exoesqueleto contiene un sistema músculo-esquelético que ayuda al soldado a cargar pesos de hasta cincuenta kilos durante marchas de larga distancia.
El sistema de comunicaciones de voz y video Strelet-2 incluye un módulo de navegación basado en el sistema GLONASS que le permite al comandante de escuadra ver la ubicación de cada soldado en su computador tamaño libro como también enviar videos y fotografías al centro de operaciones.
Por otra parte, cada soldado cuenta con un computador táctico del tamaño de un teléfono portátil.
El personal militar cuenta con el vehículo todo terreno Ruslan, con el vehículo todo terreno con orugas GAZ-3344-20 y con el transporte anfibio DT-10PM. Capacitado para defender el espacio aéreo dentro de un radio de por lo menos quince kilómetros el nuevo sistema misilístico de corto alcance único en su clase Tor-M2DT diseñado específicamente para las condiciones climáticas de la región ártica. Brinda protección contra anti radiación dirigida y contra misiles crucero, vehículos aéreos no tripulados, planeadores y aparatos aéreos de ala fija y rotatoria. Su plataforma DT30PH será utilizada con los sistemas misilísticos de lanzamiento múltiple Grad y Smerch.
La capacidad de la defensa antiaérea será incrementada con los sistemas autopropulsados de alcance medio tierra-tierra actualizados S-400 y Pantsir -1S.
El tanque modelo T-80BVM está perfectamente diseñado para las condiciones climáticas del Ártico. Se trata del primer tanque ruso operativo en ser dotado de un blindaje reactivo a las explosiones. Sus motores actualizados –turbina a gas—tienen un mejor funcionamiento en las condiciones del Ártico a temperaturas de 40 grados Celsius y estar listo para la acción en solo minutos. Los tanques convencionales dotados de motores diesel necesitan de unos 40 minutos para calentar en las condiciones del Ártico.
Este año Rusia develó el nuevo vehículo Chaborg M-3 desarrollado en su versión ártica. Se trata de un vehículo liviano multipropósito, todo terreno 4 x 2 diseñado para ser empleado en operaciones de Fuerzas Especiales en condiciones de cualquier terreno. Puede acelerar en la vía velocidades de hasta 130 kilómetros por hora.
Este año, el Ilya Muromets, primer rompehielos construido para la Marina Rusa en casi cuarenta años entró en servicio con el navío de apoyo logístico Elbrus, con la fragata Almirante Gorshkov (Proyecto 22350) equipada con el misil crucero de largo alcance Kalibr y el gran navío de desembarco Iván Gren (Proyecto 11711) primer navío de su clase. Bastiones para sistemas misilísticos de la defensa costera han sido instalados en la región de Murmansk.
El tanquero Académico Pashin (Proyecto 23130) está realizando pruebas navales. Dos rompehielos nucleares de doble casco de la clase Arktica de un grupo de seis han sido botados al agua. Los planes incluyen la construcción del Líder, súper rompehielos nuclear. El primer Iván Papanin (Proyecto 23550) de la clase multipropósito de patrulleros rompehielos, buque insignia de una serie de dos se espera que sea entregado a la Marina de Rusia en el 2021. El navío será destinado al monitoreo y protección en las aguas del Ártico, operaciones de búsqueda y rescate y escolta de navíos en aguas polares, transporte de equipos, remolque como también de mantenimiento y apoyo a navíos auxiliares. Puede brindar protección a navíos que operan en aguas polares contra amenazas desde el aire, mar y posiciones costeras.
Tres flotillas más de submarinos balísticos (Proyecto 955) y tres submarinos nucleares de ataque (Proyecto 885) como también dos fragatas más (Proyecto 22350) entrarán en servicio con la Flota Norte en el futuro cercano. El portaviones Almirante Kuznetsov volverá pronto a las filas luego de su actualización y ser equipado con la versión naval con el sistema de acercamiento de defensa antiaérea Pantsir. Los sistemas Bal de defensa de costa serán también desplegados.
La gradual militarización de la región es un hecho. Aquí habría dos opciones. Una sería convertir al Ártico en un caldo de cultivo donde una chispa podría encender una gran conflagración. La otra podría ser el lanzamiento de un diálogo en gran escala para tratar los problemas de seguridad relacionados con la región. Cinco de los ocho miembros del Consejo del Ártico son miembros de la OTAN con Suecia y Finlandia siendo los socios privilegiados de la alianza. Esto convierte al problema como parte de la relación Rusia-OTAN. Las actividades militares de Rusia en la región no tienen nada que ver con el ruido de sables, pero si tienen que proteger sus legítimos intereses.
Los eventos relacionados con la decisión de abandonar el Tratado INF, Siria, la guerra de sanciones y otros aspectos en conocimiento de la opinión pública no debieran eclipsar este problema que es de la mayor importancia. La cooperación mutua es la única manera para mantener la seguridad y el orden en la región helada. Un enfoque regional coordinado para la gobernabilidad en el Ártico dentro del marco de la Convención del Mar desarrollará la confianza e impedirá la militarización. Este es el momento adecuado para que el Consejo del Ártico se convierta en un foro enfocado en la seguridad.
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