Venezuela: ¿Una segunda Siria? ¿Quién gana? ¿Quién pierde?

Ya va para seis años que sobre Siria se ha lanzado un feroz, cruel y deshumanizado ataque bélico para derrocar a un Presidente y dominar a un pueblo heroico que se niega a arrodillarse a los intereses imperiales de todos los tiempos.

Nuevamente, el mundo "civilizado" mira la muerte y la destrucción de Siria, como si mirara a otra de las tantas películas de horror y de violencia productos del cine norteamericano, distribuidas a nivel mundial, especialmente a jóvenes y niños, con el fin de borrar en el mundo cualquier sentimiento de humano pavor hacia el crimen. Todavía guarda mi memoria la imagen televisada del cielo rojo infernal que estremeció a la capital de Irak, bombardeada igualmente sin tregua, en la que murieron un sin número de niños, mujeres y hombres que no tuvieron tiempo de resguardarse del súbito .espanto. Recuerdo que llegué al salón de clases y como pude tranquilicé a mis hombros para poder explicarle a los muchachos porqué lloraba tan compulsivamente. A mi mente volvieron los versos de un largo poema sobre Hiroshima, en el que una madre desesperada gritaba: "!Devolvedme mi niño, aunque sea de arena! ¡Devolvedme ni niño, aunque sean cenizas!" y otra que decía: "¿Dónde? ¿Dónde están…los hombres?: que habían desaparecido por el infernal bombardeo. No puedo explicarme cómo es que el hombre pueda desarrollar tanta capacidad de invención, tanta ciencia para la destrucción de los mismos humanos y de la Naturaleza. Esa atrocidad sobre Hiroshima pudo haberse evitado: en 1945, ya Japón, prácticamente, se había rendido. Era el capítulo final de la 2da. Guerra Mundial. Pero no se hizo, justamente para que ese espantoso hongo nuclear de la destrucción y del crimen quedara como símbolo del poder imperial. Esa fue la ganancia de Estados Unidos.

Lo curioso, lo paradójico es que el horror de esa guerra que culminó con Hiroshima en 1945, abrió para el mundo el telón que develaba otra tragedia espantosa: la Alemania nazi-fascista. ¿Cómo surgió esa otra locura? ¿Cómo logró penetrar en lo más profundo de la mente de millones de alemanes que serían seres normales antes de ese fenómeno socio-político? ¿Cómo pudieron contagiarse amplísimos sectores de la población sin tener consciencia de que esa locura los llevaría a la propia destrucción? La derrota de la 1ra. Guerra Mundial de 1914-1917, condujo a Alemania a encerrarse en un nacionalismo exacerbado. El sistema de partidos se dividió en numerosos grupos políticos calurosamente opuestos entre sí que reflejaban la falta de consenso en una sociedad resquebrajada por divisiones sociales, económicas y religiosas, que favorecían la difusión de ideologías antidemocráticas, que propagaban toscas versiones de nacionalismo y racismo, así como ideologías políticas y legales que glorificaban la acción sobre el pensamiento, la emoción frente a la razón, la guerra frente a la paz, la violencia frente a la hermandad. La clase media sintiéndose amenazada por la crisis económica post 1ra. guerra y por el temor a bajar su status social, fue fácilmente engañada por una doctrina que prometía salvarla de la lucha de clases y los inquietantes problemas del "comunismo amenazante". En esa campaña política "salvadora de la democracia" se escondía la fiera dictadura del Nacionalsocialismo, que fue la plataforma política de Hitler, desarrollando una descomunal capacidad de manipulación a través de los modernos medios de comunicación de masas y desarrollando técnicas psicoanalíticas para inducir en el inconsciente colectivo, por medio de la persuación , impulsos primarios como el odio, el miedo, el rencor, el resentimiento, la fobia, el racismo, unidos a la idea de superioridad social y racial. El resultado fue esa locura colectiva. Se perdió todo sentimiento de solidaridad hacia el otro que se percibiera diferente. Se persiguió de forma inaudita a los "perros comunistas", a los judíos, a los homosexuales que contradecían el machismo bélico, a los gitanos, a todos aquellos que no presentaran los mismos rasgos germanos: el blanco superior. El incendio se glorificó como arma de lucha política: se quemaban seres vivos,, se incendiaban edificios públicos para luego culpar a los comunistas. Se institucionalizó el crimen como política de Estado. Ya la Historia registró el exterminio de millones de judíos, de otras "razas" y de comunistas, hacinados en los campos de concentración, en extremada flacura, desnudos, con la cabeza rapada, y se vieron montones de cadáveres expuestos a la intemperie. La persecución fue implacable: se marcaban las puertas de las casas para luego sacarlos a la fuerza, hombres, mujeres y niños. En casi todas las sociedades la mujer resguarda su sentimiento maternal. En la Alemania nazi-fascista la mujer era otra fiera más capaz de cometer crímenes atroces. Una tal Fraule Hanna, ( para citar un ejemplo que me conmovió profundamente y que describe el grado de irracionalidad a la que puede llegar una sociedad alienada ) entró a la sala de un edificio utilizado como hospital de niños, miró a cada uno de ellos en sus camas, cogió a uno, lo llevó al balcón y lo lanzó desde un tercer piso al pavimento sin mediar palabra alguna. Otra, Vera Wohland, que se desempeñaba como guardiana de campo, con inaudita fuerza brutal agitó un látigo contra un centenar de personas que se resistían a las cotidianas redadas. El látigo era instrumento y símbolo de brutal dominación. Ese feroz, cruel y dictatorial sistema político nazi fue el que ofreció construir la democracia. La sociedad alemana se cegó ante ese cambio y, cuando se vieron envueltos en ese infierno, ya era demasiado tarde. Varias generaciones quedaron marcadas por esa alienación.

En este caso, el pretendido imperio aleman de Hitler perdió la guerra y ganó las páginas más negras y abyectas para la Historia. La espantosa guerra mundial la ganaron el imperio yanqui en avanzada, así como las otras potencias europeas, y perdieron millones y millones de seres humanos conducidos como manadas a una absurda, inhumana e irracional guerra…..Que todas las guerras son inhumanas e irracionales.

Al término de la guerra, al final de la Conferencia de Yalta (febrero 1945) las potencias aliadas condenaron el nazismo en los términos siguientes: "Es irrevocable determinación nuestra destruir el militarismo y el nazismo alemanes, y crear la garantía de que Alemania no volverá a estar en condiciones de estorbar la paz mundial. Eliminar de una vez por todas el Estado Mayor general alemán, que demasiado a menudo a contribuido al renacimiento del militarismo alemán; a confiscar o destruir todo el material de guerra alemán; a liquidar o controlar la industria alemana que pueda utilizarse para la producción bélica; a infligir a todos los criminales de guerra el justo y pronto castigo; a obtener indemnización en especie por los daños causados por los alemanes; y hacer desaparecer de la faz de la tierra el partido nazi, las leyes, las organizaciones y las instituciones nazistas; a eliminar cualquier influencia militarista en las instituciones sociales, en la vida cultural y económica del pueblo alemán y tomar en común cualquier otra medida que pueda revelarse necesaria para el porvenir de la paz y de la seguridad en el mundo. Nosotros no tenemos el propósito de liquidar el pueblo alemán. Cuando el nazismo y el militarismo estén extirpados, sólo entonces habrá para el pueblo alemán la esperanza de una existencia digna y de un lugar en la comunidad de las naciones" (Cita tomada de Guido Aristarco. Disolución de la razón. . Traducción de Antonio Pascuali. Caracas, Ediciones de la Biblioteca. Universidad Central de Venezuela, 1969.) Esta última parte del texto de la declaración final de la Conferencia de Yalta, fue eliminado. Al menos no lo conseguí en Google que sí registra dicha conferencia.

Pocos años después, cuando todavía perduraba el olor de la sangre derramada en la 2da. Guerra Mundial, y tirada al cesto del olvido la declaración final de Yalta, los señores imperiales yanquis poderosamente armados (que ellos nunca dejaron el armamentismo) volvieron a la carga en Vietnam. Fueron millares las fotografías y grabaciones que mostraron al mundo el nivel de crueldad y de sadismo a los que llegan estos señores imperiales en su loco afán de dominio: miles y miles de bombas cayeron sobre la tierra vietnamita que era fértil en frutos y dádivas para la vida, convirtiéndola en desiertos; cayeron rocíos de napalm y otras sustancias químicas que desfloraban la piel y dejaban a los huesos desnudos o calcinados. El periodista estadounidense Seymour Hersh fue el primero en dar a conocer la matanza de My Lai en Vietnam, el 16 de marzo de 1968 como uno de los tantos ejemplos siniestros: Ese día, un contingente de soldados estadounidenses recibieron una orden errónea de que en My Lai estaban tropas del Frente Nacional de Liberación de Vietnam. Sin siquiera corroborar la información, masacraron a 504 pobladores campesinos, hombres, niños y mujeres embarazadas. A su regreso a Estados Unidos, uno de esos soldados estadounidenses, con odio profundo confesó impasible que lo hicieron para "vengar a sus compañeros". Ninguno de esos soldados se preguntaron porqué invadieron a Vietnam; cual era la "razón" de su presencia en un territorio que ni siquiera conocían, ni qué esperaban de esa invasión . Y era que el nazi-fascismo que había sido "condenado" en Yalta, no sólo no fue desaparecido, sino que se impuso como principio de lucha por el dominio y control imperial.

Pero esta vez, la ciega soberbia del ya impositivo imperio yanqui, después de asesinar a millares de vietnamitas y devolver a su propia tierra otros millares de cadáveres de jóvenes soldados en bolsas de negras de plástico, perdió la batalla, quedó vergonzosamente derrotado. En cambio, ganó el pueblo vietnamita heroico que resistió hasta límites inauditos, la descomunal y bestial agresión, para no perder su territorio, su nacionalidad.

La memoria regresa a la invasión de Irak, a la total destrucción de ese pueblo perpetuada con la complicidad de medios de comunicación de masas, infalibles instrumentos para la mentira y el crimen: Irak no tenía las armas químicas, tal como dijo el Pentágono para justificar el ataque. Pareciera que las neuronas bélicas borraron de la memoria yanqui el criminal uso de armas químicas y bacteriológicas en Vietnam. Ya conocemos el resultado. Le siguió Libia: el público asesinato de una jauría enloquecida sobre la presa como fue la muerte de Gadafi, la miserable frase "Vine, vi y murió"( repetición consciente de la frase latina imperial Vine, vi y vencí) que la Clinton ofreció al mundo entre risas, y la total destrucción del país más desarrollado de Africa, ya son páginas archiconocidas en el mundo. Perdieron los pueblos de Irak y de Libia que quedaron destruidos física y políticamente, pero los sempiternos imperios que no pierden sus arquetipos como tales, las grandes potencias que se aliaron para sacar provecho, no han podido disfrutar como esperaban el ansiado botín.

En Siria se aplicó el mismo guión: primero el método propagandístico nazi condenado en Yalta: Con el idéntico uso de los medios de comunicación de masas, se creó una matriz de opinión que permeó la mente de un sector de la sociedad que conformaba la Oposición (que, desde luego, siempre existe y debe existir en los sistemas democráticos, pero, por el resultado para su propio país, hoy no dudo en calificarla de apátrida): el Presidente electo democráticamente, Bashar Al-Asad se le calificó sistemáticamente de dictador. Se sembró no sólo el rechazo del bando opositor, sino que sembraron, también, un profundo odio, a punto de importar una guerra con un ejército criminal mercenario, el llamado "Estado Islámico" que ha destruido buena parte del país y causado la muerte de millares de hombres, mujeres y niños, y ha obligado a otros tantos millares a huir de la guerra en una emigración fatal. Esta matriz de opinión no sólo se asentó en el propio país, sino que se extendió en el mundo: una vecina mía de Turmero, que nunca había salido de los límites de su pueblo, y que por supuesto nunca había conocido a Siria sino actualmente, a través de noticieros sistemáticos de una pantalla de televisión, me aseguro enfáticamente que el Presidente de Siria era un atroz dictador y que había que derrocarlo para que el pueblo sirio retomara la democracia. Esta vecina, con toda seguridad, no conoce la monarquía absoluta Saudí, que es aliada de las potencias invasoras "para devolver la democracia" en Siria. Así se forjó el acero de la polarización en Siria! ¡Así se forja el acero de toda división social o política, cuando los señores imperiales le ponen el ojo a un país que quieren dominar, y cuando un sector de la sociedad se presta para el macabro juego, llegando a los límites de la locura, igual que la sociedad nazi alemana de Hitler. Esto hay que tenerlo muy claro en nuestras conciencias.

El "mundo civilizado" otra vez permanece mudo e impasible. Es el efecto adormecedor y alienante de los medios de comunicación de las grandes corporaciones mediáticas al servicio de los imperios.

En estos momentos, cuando la paz mundial y la paz de nuestro país están amenazadas, es imperativo, es obligado, es necesario conocer cuáles son los diabólicos hilos que mueven estas amenazas: Desde finales del siglo XIX, todo el siglo XX y este que comienza, TODAS LAS GUERRAS Y CRISIS PROVOCADAS SON LUCHAS IMPERIALES POR LA DOMINACION TERRITORIAL Y EL CONTROL DE LOS RECURSOS NATURALES. SOBRE TODO, LA DOMINACIÒN DE PAISES QUE POSEEN GRANDES CANTIDADES DE MINERALES NCESARIOS PARA LA TECNOLOGÌA MODERNA Y MUY ESPECIALMENTE EL PETRÒLEO QUE ES LO QUE, LITERALMENTE, MUEVE AL PLANETA TIERRA. VENEZUELA, POSEEDORA DE ESOS IMPORTANTES RECURSOS, ESTÀ BAJO LA LUPA DE ESOS ANSIOSOS INTERESES IMPERIAES. SI NO ENTENDEMOS, SI NO LE DAMOS LA VITAL IMPORTANCIA A ESTA CIRCUNSTANCIA, SIEMPRE ESTAREMOS EXPUESTOS A SER VÌCTIMAS COMO LO HAN SIDO,

ACTUALMENTE, AFGANISTAN, IRAK, LIBIA Y SIRIA, Y A PERDER NUESTRA TERRITORIALIDAD COMO NACIÒN INDEPENDIENTE Y, EN CONSECUENCIAS, NUESTROS RECURSOS NATURALES, QUE SERÌAN ADMINISTRADOS DE ACUERDO A LOS INTERESES DE LAS POTENCIAS INVASORAS Y JAMÀS EN BENEFICIO DEL PUEBLO. HAY QUE TENERLO MUY CONSCIENTE PARA RECONOCER QUIÈNES SON LOS QUE SE PRESTAN PARA LA VENTA DE LA PATRIA POR INTERESES EGOISTAS CON LA FALASIA DE LUCHAR POR UN CAMBIO.

Desde luego, que estas luchas tienen fuertes bases de contenido idiológico y político, a través de la Historia, que, también, es importante desentrañar como algo crucial para nuestro diario acontecer, porque todo, absolutamente todo, nuestro modo de vivir, nuestra calidad de vida, hasta lo que comemos, están totalmente ligados a la política. Y muy especialmente la geopolítica que es el juego territorial y económico internacional, especialmente, en este mundo globalizado, movido por las grandes corporaciones capitalistas que pretenden (y en muchos casos lo hacen) dominar el Planeta. Corporaciones de industrias alimentarias, farmacéuticas, de bienes de consumo, etc, que han generado trágicas dependencias en los países subdesarrollados, con la complicidad de los Gobiernos de turno que no supieron o no quisieron impedir esa dependencia, (desarrollando sólidas industrias propias, prescindiendo de marcas registradas extranjeras) por lo que hoy estamos padeciendo en colas para comprar comida, o carencias de medicamentos. Un plan perfectamente concebido desde esas grandes corporaciones (que son las dueñas del mercado mundial de alimentos, fármacos, bienes de servicio, etc.) Se ha dicho mil veces, pero hay que repetirlo hasta el cansancio: plan aplicado al Gobierno "comunista" de Salvador Allende de Chile al inicio de los años 70. Parte de nuestra juventud desconoce la historia por intereses políticos, y porque en los años 80-90 se pretendió eliminar la Historia de los pensa de estudios.

Las luchas sociales son milenarias: imperialismos antiguos, feudalismo, monarquías absolutas y divinas, el aplastamiento de la clase campesina y obrera después de haber sido utilizada por la creciente clase burguesa, para derrocar la monarquía francesa y acceder al poder con la naciente república democrática-burguesas. Sistema polítíaico que, a partir de entonces, es práctica global, y los nuevos imperialismos se apoyan en dichos sistemas, pero siempre con la ideología y prácticas nazi-fascistas que, hoy día, ya ni se preocupan en ocultar.

Pero la Historia política reciente viene por aquí, más o menos: Después de milenios de injusticia social y ni qué decir, laboral, de abismos de diferencias entre quienes acumularon riquezas y poder, y de millones de esclavos, campesinos y trabajadores, que permitieron amasar fortunas a emperadores, reyes, príncipes, señores feudales, y finalmente, a una clase burguesa capitalista, (hoy día en la cúspide de acumulación de capitales con gigantescas corporaciones que generan ganancias fabulosas al 2 o 3 % de la población planetaria); después, repito, de esa realidad histórica, a finales del siglo XIX y comienzos del XX, cuando los obreros extremadamente explotados en los países industrializados comenzaron sus luchas de liberación social y económica, en un despertar de sus conciencias de clase, surgió la doctrina marxista, tras un largo estudio de pensadores preocupados por el problema. Ese "mal ejemplo" empezó a expandirse mundialmente y lo convirtieron en crimen para la sociedad. Se requiere de mucho espacio/tiempo y estudio para un análisis crítico de esta revolucíón. Pero lo inegable es que, a partir de ese acontecimiento histórico, socio-político y, desde luego, económico de la revolución bolchevique rusa, el mundo quedo dividido en dos bandos: el capitalista y el comunista o socialista. La propaganda de descrédito del comunismo se convirtió en un rechazo atávico, casi instintivo en el mundo capitalista. El comunismo se divulgó como una "amenaza", una "plaga" que había que erradicar para el "bien" de la Humanidad. Todas las luchas sociales y políticas en favor de la liberación de los pueblos, fueron condenadas de comunistas y combatidas a muerte. Desde ese atavismo anticomunista (aún cuando los pueblos han sufrido en carne propia el sistema capitalista) las grandes potencias, especialmente Estados Unidos, han sembrado de guerras atroces al mundo entero. Ya vimos el caso de Viet Nam, pero más cerca tenemos en Centroamérica invasiones bélicas anticomunistas: Cuba, Honduras, El Salvador, Guatemala, Haití, Gremada. La bota imperial estadounidense implantó la guerra a muerte a sus desprotegidos pobladores, con la complicidad de "cipayos" (soldados de la India invadida al servicio de la potencia invasora: Inglaterra) anticomunistas locales, para "salvar la democracia". Sí, para "salvar las democracias" del caos y la "anarquía comunista", se implantaron feroces dictaduras y se asesinaron miles y miles de patriotas.

Todo este recuento, en una breve visión histórica, es necesario para tratar de entender nuestra actualidad venezolana, amenazada de convertirse en una 2da. Siria: A partir de 1830, con la traición al Proyecto de Patria Grande de Bolívar, los Gobiernos que se sucedieron y controlaron el poder (que no el sentimiento patriota de los pueblos) no culminaron el difícil y heroico proceso de Independencia, sino que apoyaron la retoma absoluta del colonizador, en un matrimonio de traidores (Páez, en Venezuela y Santander en Colombia, los primeros) con las minorías oligarcas antibolivarianas, enraizadas desde la Colonia. Todos, literalmente, se entregaron a las nuevas potencias: Estados Unidos, Inglaterra, Francia y Alemania. Todos los Presidentes de esas malformadas democracias republicanas, fueron hilos manejados desde los intereses de esas potencias, y aquellos que sí querían salir de cerco neocolonial y alzaron su voz enérgica en favor de los pueblos, inmediatamente fueron derrocados o asesinados por la complicidad oligárquica-neocolonial. Con pocas excepciones, no hubo un verdadero desarrollo nacional. Los políticos, en su mayoría, se acostumbraron a las mieles del poder en provecho propio y entregaron a sus naciones a esa dependencia trágica, económica y tecnológica, ya mencionada, y, peor que peor, a la bélica. Muchos Gobiernos apátridas erigieron su poder en la falacia de una "democracia representativa". Gran parte de la población fue diezmada por guerras civiles estériles. Y cuando una voz se alzaba en defensa de los pueblos, era callada por las Oligarquías. Ya en 1847, sorprendentemente, se calificó a Ezequiel Zamora de "comunista" (un Comunismo apeas naciente en Europa) porque sí se alzó en defensa de los intereses del pueblo, y fue eliminado por sus propios partidarios que, después de aprovecharse de las luchas victoriosas de Zamora, lo asesinaron por temor a una verdadera revolución democrática. Años después, se eliminó políticamente a Cipriano Castro, por el simple hecho de enfrentar (en la medida de las posibilidades de la época) a los intereses extranjeros. Lo sustituye su compadre y Vice-Presidente traidor, Juan Vicente Gómez, que se alineó con la Burguesía y se convirtió en uno de los hombres más ricos del país, a cambio de entregar a Venezuela a las potencias imperiales, especialmente la materia prima más importante de todos los tiempos: el petróleo.

30 años de férrea dictadura fue el Gobierno de Gómez. Dictadura que la alta biurguesía glorificó porque Gómez pagó la deuda externa (¡Y cómo no hacerlo, si, por primera vez entraba a Venezuela un chorro de dinero producto del chorro de oro negro!) y "pacificó el país (A costa de miles de presos políticos, persecusión y muerte de hombres de izquierda) Pero, con toda esa riqueza y las grandes empresas petroleras y su avanzada tecnología, no hubo una verdadera transferencia tecnológica. Eso lo sabe cualquier niño de pecho: de Venezuela salía el petróleo, el hierro, el caucho, toda la materia prima que permitió un desarrollo industrial de las potencias, y aquí llegaban, en cambio, los autos (Ford, Chevrolet, etc.) los cauchos elaborados (Good year: ¡buen año para las corporaciones!), los vehículos de transporte, especialmente de petróleo (por lo que no se desarrolló sistemas ferroviarios y autopistas a todo lo largo y ancho del país, lo que sí hicieron las grandes potencias extractoras de petróleo, a costa del nuestro). Tampoco hubo una verdadera tecnología agraria y ganadera que autoabasteciera a la nación completa y fuera exportadora y no importadora por la facilidad que suministraba el petróleo. Sí nos llegó la tecnología en "marcas registradas" que son una dependencia. Es verdad que se creó la OPEP, pero tampoco se "sembró el ptróleo" y esta innegable realidad histórica produjo ¡cien años de desventaja tecnológica en relación con los países desarrollados! Ahora, señores de la Oposición, subir esa cuesta de cien años, producto de erradas políticas económicas colonialistas y neoliberales imposible de negar, es una tarea difícil y requiere de un consenso político patriótico y de amor y respeto por Venezuela.

A partir de la muerte de Juan Vicente Gómez, se sucedieron los gobiernos de "democracia representativa". A finales del Gobierno de Isaías Medina Angarita, se legalizó el Partido Comunista de Venezuela. Eso le costó la presidencia a Medina con el golpe cívico-militar. Luego, con el respaldo mayoritario de un pueblo sumido en la miseria, a pesar de las riquezas de su territorio, Rómulo Betancourt asume el Gobierno, pero se mantuvo el statu

quo. Teniendo en consideración que los hilos políticos siempre fueron manejados desde los intereses imperiales, y teniendo en consideración que la política de Betancourt no fue precisamente comunista, antes por el contrario, se opuso sistemáticamente a esa corriente política, vale la pena preguntarse por qué su Gobierno fue de tan poca duración. Otro golpe militar lo derroca y se impone por diez años la dictadura de Marcos Pérez Jiménez: autopistas, edificaciones, persecuciones políticas, especialmente a todo lo que le oliera a Comunismo, tal como lo requieren las derechas capitalistas (valga la redundancia) pero, una ciertas acciones nacionalistas como intento de recuperación de Guyana, un ejército fuerte, intento de desarrollo nuclear y, hecho innegable: la lucha de todos los partidos políticos, sobre todo los de izquierda, lo sacó del poder en 1958.

¡1958! ¡Todas las fuerzas políticas unidas con el pueblo! ¡Viva la Democracia! Se firma en New York el ¡Pacto de Punto Fijo! Lo firman Acción Democrática, COPEI y URD. Poco dura la cualisión: URD sale del Pacto por su sesgo hacia la izquierda, y, desde luego, las fuerzas políticas de izquierda, especialmente el Partido Comunista no fueron tomados en cuenta en el pacto y más bien fueron ferozmente perseguidos, encarcelados, desaparecidos y asesinados. El anticomunismo, el antiizquierdismo permite ("Disparen primero, averiguen después") que se instale el crimen como política de Estado.

Toda este resumen histórico, (dicho tan simple,, tan sin carácter "científico", puesto que no soy ni historiadora ni especialista) es la pura verdad. Y lo siento mucho por aquellos seres queridos, familiares y amigos, con hondas raíces en la 4ta. República. Verdad que no quieren ni siquiera pensar y menos reconocer, en su mayoría, por un desconocimiento de la Historia, pero, sobre todo, por un anticomunismo atávico, irracional, que rechaza, instintivramente, hasta la palabra SOCIALISTA, por "miedo a perder su status", aunque han sido víctima del Sistema Capitalista, que los ha mantenido en el subdesarrollo secular.

DE ESE MIEDO ATÀVICO, IRRACIONAL, SE NUTRE EL FASCISMO Y LO APROVECHAN LAS GRANDES POTENCIAS IMPERIALES A PARTIR DEL SIGLO XX, PARA DOMINAR Y LITERALMEN TE, ROBAR LAS MATERIAS PRIMAS, ESPECIALMENTE, EL PETRÒLEO.

Ya se constató en la Italia Fascista de Musolini y en la Alemania nazi-fascista de Hitler: el racismo, el odio feroz al otro, la iólontolerancia, la criminalidad absolutamente irracional, que induce a matar inmisericordemente a otro, quemarlo vivo, perder todo sentimiento humano hasta el líimite de la locura total, la deshumanización, la práctica de la destrucción como valor de toda acción política, la guerra, la muerte, y, sobre todo, aniquilar todo vestigio de Comunismo (que el principio y lema fundamental del naz-fascismo) como el enemigo declarado. Y, lo peor de lo peor, inculcar en los niños esos terribles y funestos valores. Práctica que condujo a empujar el activismo callejero en los jóvenes. Ejemplos que siguieron en Francia con la Sección Juvenil fascista: los "Camelots du roi", y en España, las Juventudes de Acción Popular de Ramón Ruiz Alonso, con formación fascista casi paramilitar. Estas no son cosas de juego político. Son realidades sumamente peligrosas que conducen a ciertas sociedades a guerras autodestructoras.

De allí nuestra gran preocupación. Y dugo nuestra, porque estoy absolutamente segura que la gran mayoría de nuestro pueblo la comparte. Históricamente, somos de naturaleza libertaria. El mundo caribe pervive en nosotros. Guaicaipuro, el Negro Miguel, Miranda, Simón Bolívar están enraizados en nuestro inconsciente colectivo. Esta mezcla insoluble de indio, negro y blanco rechaza instintivamente el racismo. La inmensa mayoría de los venezolanos nos vacilamos las diferencias de clases. A partir de Ezequiel Zamora, el mantuanismo quedó para la Historia o en la mente de una minoría desconocedora de esas tres raíces, o una clase media alienada por la transculturación. Por eso nos preocupa, repito, las manifestaciones evidentemente nazi-fascista que irrumpieron de pronto en Venezuela. Es muy importante analizar a profundidad este fenómeno. No hay ninguna diferencia entre una Fraule Hanna alemana que arrojó a un recién nacido desde un balcón, y una Lilian Tintori, una María Corina Machado, o una madre que ríe ante el féretro de su hijo de 17 años, que muere porque ella lo impulsó a manipular artefactos explosivos, para "sacar a Maduro del poder". No hay ninguna diferencia entre los hornos crematorios nazis a esa jauría de jóvenes enloquecidos que quemaron vivo al joven Orlando Figuera, sólo por el color de su piel y su franela roja que les olía a chavismo. No hay ninguna diferencia entre las arengas cargadas de odio de un Enrique Capriles, o un Ramos Allup, a las de un Hitler, ni los incendios y destrucciones de edificios en la Alemania pro-nazi, con las hordas destructoras que conducen Fredy Guevara, Guerra, y todos esos diputados de la Oposición que destruyen todo por donde pasan sus guarimbas terroristas. No hay ninguna diferencia entre una crueldad desatada por el odio contra los judíos, los comunistas, gitanos y homosexuales de la Alemania nazi, que la crueldad y el odio desatado por la Oposición de la Mesa de la Unidad contra el chavismo. No hay ninguna diferencia entre los símbolos de las hordas nazis, que los símbolos que están utilizando los jóvenes terroristas venezolanos: escudo protector templario, (esos jóvenes ni siquiera conocen quienes fueron los templarios), látigos, teas disfraces estrafalarios, banderas negras. No hay ninguna diferencia entre la ferocidad y la violencia nazi-fascista insensible a la muerte y la destrucción, que la ferocidad y violencia que exhiben impúdicamente los líderes opositores y sus hordas irracionales. La única diferencia que observo es que los fascistas y los nazistas se cegaron en su nacionalismo dictatorial, brutal, irracional, pero, a pesar de esa irracionalidad, nacionalismo. EN CAMBIO, LA OPOSICIÒN VENEZOLANA, REPITIENDO ESA MISMA NATURALEZA POLÌTICCA NAZI, LEJOS DE SER NACIONALISTAS, QUIEREN ENTREGAR EL PAÌS A LOS INTERESES IMPERIALES Y ESPERAN LLEGAR AL PODER SOBRE LAS RUINAS DE LA PATRIA, SIN LA MÀS MINIMA VERGUENZA. QUIEREN CONVERTIR A VENEZUELA EN UNA 2DA.SIRIA. PERO, POR SIPUESTO, ¡NO LO VAN A LOGRAR!

Este heroico pueblo, sabio, con su conciencia libertaria hoy más fuerte que nunca, con una Constitución anti-imperial, (y que será reblindada en la próxima Asamblea Nacional Constituyente) que desde hace 18 años ha resistido los más terribles ataques contra su paz y su estabilidad económica, no lo va a permitir. ¡No va a permitir la desintegración de Venezuela como país/Nación!

En el balance inicial: ¿Quién gana? ¿Quién pierde? Estoy absolutamente segura que perderán las fuerzas imperiales que sostienen la Corporademocracia Liberal que está en franca caída a pesar de su OTAN, y perderá la Oposición venezolana envalentonada por el soporte de las fuerzas extranjeras imperiales que la utiliza para apoderarse de nuestros recursos mineros. Pero, sobre todo, esa Mesa de la Unidad que ha violado todos los derechos humanos, (crímenes de odio, utilización de niños para general violencia y dañar su formación futura, destrcción del medio ambiente, el derecho a la libre circulación, y el degradante ataque a la Guardia Nacional y la Policía Bolivariana con excrementos, caso único en la historia política del mundo) perderán el respeto del pueblo soberano venezolano y de todas las naciones que también se respetan.

Para concluir, con todo mi amor, quiero dedicarle estas palabras al joven salvajemente incendiado:

Orlando: una gran congoja llenó mi corazón, cuando supe que

Recién, tu valiosa juventud se extinguía, después de terribles días de martirio. Sólo porque

Libre tu alma de instintos animales, y tu espíritu henchido de ilusiones,

Atravesaste un día aciago, el espacio infernal de una jauría, cargada de odio reptiliano.

Nunca supieron tus verdes años y tu inocencia

De dónde procedía tan cruel veneno que oscurece el alma, ni el

Odio tan larvario que destruye.

Feliz andabas, y desprevenido, sin pensamiento alguno que advirtiera,

Ignorando el ruido ponzoñoso, de irracionales voces que

Gritaban enardecidas, al ver tu cuerpo de ébano, orgullo de mi pueblo, y

Una franela del último color de la bandera

de la Patria que hoy llora tu partida.

Esas bestias que incendiaron tu escultural cuerpo, nunca tendrán la paz

en sus almas tenebrosas. Ni su descendencia conocerá tu

Risa, ni tu inocencia, ni tus sueños.

Andarán en la vida, ciegos, con su odio a cuestas,

envilecidos en su propia carroña. Y caminarán sin rumbo alguno,

en su espacio infernal que a nada lleva. Y vomitarán hiel cuando en el cielo te vean,

de la mano amorosa de Hugo Rafael Chávez Frías.



Esta nota ha sido leída aproximadamente 1537 veces.



Noticias Recientes:

Comparte en las redes sociales


Síguenos en Facebook y Twitter