La paz en Colombia

LA PAZ EN COLOMBIA

Esta oportunidad tan buscada por la FARC-EP por entablar un dialogo para la paz con el gobierno Colombiano nos muestra la cara del verdadero pueblo colombiano, vilipendiado y calumniado desde siempre por la clase dirigente de ese país arrodillada a los intereses del Imperio y sus aliados, nunca como hoy, la oportunidad para que se conozca la verdad suprema de la llamada guerrilla colombiana tan calumniada, tan injustamente vilipendiada, en la lucha por la defensa del pueblo y de la nación colombiana, aunque el gobierno piense que con esta maniobra, entretiene, no solo al pueblo Colombiano que clama por la paz, sino al resto de los países de nuestraamerica, mientras continúan los planes que secretamente tienen con el Imperio y sus aliados europeos.

Suspicaces como somos, sobre todo en estos momentos críticos en que transitamos y transita la humanidad, la posibilidad de que Colombia llegue a una situación de paz en su territorio seria poco más o menos como un milagro, tendría que refundarse Colombia sin la clase dirigente, y sin todos los males que esa clase engendro, la narcoguerrilla y el trafico de drogas, la mafia, es hija de esa clase que ha mandado durante casi desde el mismo instante de la fundación de esa nación, aliada con el Imperio y con las causas más sanguinarias y asesinas en la historia de la humanidad.

Como venezolanos y revolucionarios amamos la paz, y aplaudimos la búsqueda de esa paz tan elusiva para ese país, pero realmente es una posibilidad muy remota que esa nación logre una paz duradera en sus actuales circunstancias sin primero recuperar su libertad de la esclavitud y del yugo extranjero a la que fue vendida.

Siempre nos hemos preguntado hasta donde llegara el engaño y la conchupancia del gobierno Colombiano con el enemigo más acérrimo que tienen nuestros pueblos, la clase dirigente y a la cabeza un presidente preparado y culto que pertenece a la godarria Colombiana, retorcido y perverso, arte y parte en la venta que se hizo de ese país a los EEUU de Norteamérica, inventando un sinfín de peligros a cual más imaginativo para abrir la entrada a Suramérica del Imperio y sus aliados y con ellos la guerra, el narcotráfico, el terrorismo, la violencia, los mercenarios, la CIA, el Mozad, la contrainteligencia Inglesa y un sinfín de males, acrecentados sin duda en estos últimos tiempos.

El haber entregado a EEUU el territorio colombiano por la clase dirigente narco político que gobierna ese país, en un convenio secreto firmado por la alta dirigencia colombiana, abre las puerta a la invasión a Suramérica, la unión miserable de Colombia a los EEUU, la comunidad europea, Israel, etc., el creer que se pueden imponer reglas caprichosas a los pueblos considerados débiles, utilizando peones de la peor condición pensando que el resto de los pueblos no se darán cuenta, es una ficción imbecil.

Con la firma del tratado infame firmado con los EEUU de Norteamérica, se entrego la soberanía de Colombia y se abrieron todas las posibilidades de guerra y de invasión militar a Suramérica. En sus cláusulas están contemplados actos de traición y sedición de consecuencias muy funestas, el gobierno de Colombia asume una actitud beligerante y activa ante toda Suramérica.

Engañada y atrapada esa nación en una ficción que le costara muy caro, no solo en daños internos y fracasos políticos, sino en un hundimiento completo como pueblo y como nación que se coloca en un plan de luchar por su esclavitud como si se tratara de su libertad; nada más fácil que permitir a otros el ocuparse de los asuntos propios, nada es más cobarde, nada más denigrante, nada es más peligroso y de consecuencias más funestas; se empuja a todo un pueblo atado de pies y manos, perseguido y sitiado a ser un extranjero y un enajenado de su propia patria.

Se busca con la excusa de un peligro inventado y sostenido, mantener un estado de sitio, de guerra de miedo para que, mientras tanto se venda el país al postor más miserable y su peor enemigo. Nada de esto es gratis, es a cambio de unos mendrugos mientras el postor se lleva la sangre y la savia de la nación entregada por el precio más vil: el entregar la soberanía y la dignidad.

¿Qué queda de esto? Desolación, muerte, ruina, carencia y lo peor de todo: la ruina moral que implica la perdida de los valores que sustentan y nutren la pertenencia a un suelo, el amor por lo propio y la tenencia de una cultura y un lazo de unión que da sentido de ubicación y relación con los otros pueblos.

A esto es a lo que se tienen que enfrentar los camaradas de la FARC quienes son el verdadero pueblo colombiano en armas desde hace más de 50 años, camino emboscado y plagado de traiciones e hipocresías ¡ojo avizor! con el presidente Colombiano quien tiene su propia agenda llena de oscuros propósitos; que el creador los acompañe, ya tienen parte del camino andado con la oportunidad y el acompañamiento de Cuba y de La Republica Bolivariana de Venezuela, en esa tribuna abierta para darle a conocer al mundo entero la verdad del pueblo colombiano en su lucha por la libertad y en defensa de los más pobres, de la mano de Fidel, de la inteligencia, sensatez, y verdad para derrotar a los detractores de la causa de la Libertad de Colombia, para derrotar a la conspiración, y sobre todo para derrotar al Imperio que se prepara para dar el zarpazo final.

¡Guerrillero, guerrillero, guerrillero adelante adelante! ¡Presente por todos los caídos!

Confiamos en el Líder.

anazaicon@yahoo.com


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Ana Bordas


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