El Estado venezolano actual y la doctrina política de Nicolás Maquiavelo

¿Qué es el Estado?

¿Cuál es el procedimiento que nos conduce a la conceptualización del Estado?

Para de allí  intentar establecer:

¿Qué es? 

¿Cómo es?    

¿Su función? 

¿Su  dirección y decisiones?

¿Coordinadas desde acciones y/o comunicaciones?

¿Administrada en cuanto a un especifico  sistema científico teórico-practico organizacional?

¿Sistematizado, instalado en  su estructuración?

¿Para la  efectiva y eficiente eficacia? 

Desde la perspectiva histórica, el concepto de Estado esbozado por  Nicolás Maquiavelo, Florencia, Italia 1469-1527,  en su obra “El Príncipe”, texto de fundamental importancia para el estudio de la ciencia política contemporáneas. Su administración añadiría yo. 

¿De cómo el Estado es un constructo, un medio, para el implantamiento y desarrollo de  un proyecto político, con legislaciones públicas, institucionalidad y organismos de poder público con  “programas constitucionales” dirigidos a todos lo mas diversos sectores de la nación, planificados para un sistema operacional “eficaz” de  administrativa organización nacional con  una perspectiva u enfoque de visión y misión para objetivos generales nacionales  e incluso internacionales, a veces factibles o no,  de estrategias y tácticas previstas al  desarrollado de cada tarea, acciones y/o comunicaciones, en flujo grama que recorre dialécticamente  los cronogramas de programas con proyectos y planes estipulados a través de los objetivos específicos.  

Y aún más, de Razones de Estado, como por ejemplo, la  súbita aceleración y aprobación de la  urgente y recién promulgada ley Orgánica de Educación, entre otras razones  recién emergentes 

Así, el  Plan de la Nación,  avanza supeditado al programa matriz rector nacional, “el espíritu de los pueblos” la Constitución  o contrato social del Estado amparado en una filosofía del derecho pertinente que responde a los principios ideológicos doctrinarios aceptados por la mayoría como sistema político de gobierno, en el juego legitimo de la soberanía que elige a los que seleccionan para el protagonismo, la participación y representatividad pluriétnicultural del pueblo,  legal amparado en la omnipotencia del Estado  de Derecho impuesto y  cada día ejecutado.

Así es administrado el programa curricular, en sus distintas modalidades, del gobierno por el Estado y sus diversos aparatos culturales de estadística actuariales e informática sectorial-regional, centralizadamente o no. La Administración de la Republica democrática transicional. 

Una teoría y método de gerencia  administrativa colegida nos gobierna en desarrollo de las tareas ciudadanas, donde la supervisión, la evaluación y el financiamiento son ¿sometidos al criterio del soberano pueblo? y/o en su defecto  a las organizaciones adversas a su ideología.

¿O sólo el Estado decide?

Así como

Una organización con sus públicos tanto internos como externos. 

El Estado funciona bajo el periscopio de la ideología-doctrina imperante como proyecto puntual esencial del programa  político de gobierno  que se hace del poder del Estado. “Para poder tener autoridad ejecutiva.”  Concretar hechos, lo expuesto en políticas. Eficiencia productiva. En oposición a lo contrario en su ideología otra organización, pero que no es Estado. 

Para la administración de toda clase de recursos, desde  la ideología política, guerras virus, clima, hasta los hechos diplomáticos-inversiones, financiamientos concretos de forma  efectiva, eficiente y eficaz  operando en la riqueza y distribución  a derecho humano consagrado en leyes para con su pueblo a  perpetuidad de sus territorios,  culturas, pueblo, instituciones, soberanía. Y  por supuesto del gobierno de turno. 

Requiriendo por ello la colaboración cooperativa de todos y cada uno en la medida de sus funciones y responsabilidades. Aunado al carácter voluntarioso de la moral que a veces esta presente.  

Por ello el Estado se erige, a través de la democracia  ejercida o  de la imposición  forzada, ambos  sistemas detentan  todo el poder político, relaciones superestructurales y estructuras por sobre todos lo demás. Es el postulado o lema de la organización, y recomienda medidas de éticas propias, es decir, políticas de Estado,   humanistas, cohercitivas, liberales, transicionales o libertarias en fin, el Estado de Derecho de un País, lo que no es otra cosa que administrar políticas públicas estatales devenidas de  doctrinas,   para y todos los sectores nacionales, entre ellos el educativo. 

Maquiavelo, crea la ciencia política dándole la explicación certera del “sujeto político,”  actual y,  una producción normativa teórica ajustadamente audaz  en dirección,  de estructura comunicacional y apasionado carácter de juicio al presente  futuro, “sobre todas las ideas entonces universales y acertadas sin reservas llegando a una concepción clarividente de la unidad del Estado1 

Maquiavelo apartó la ciencia política de la ética “moralina” tradicional, la estudio en armonía con los hechos diarios de la vida, inventa la ciencia política en el momento en que relaciona los hechos de los hombres con la existencia del Estado, acuerdos de socialización necesaria, como un ente o entidad aparte, como un organismo que se coloca por encima de la sociedad con sus propias relaciones y lógica. 

Estado, así significa ante todo autoridad, preeminencia,  poder político del príncipe,  -hoy día  del presidente o del grupo político dominante en la República-, “… que se ejerce sobre un determinado reagrupamiento de hombres y mujeres…”2   y, estos así lo permiten. 

El sujeto está por tanto netamente separado del objeto del comando, queda excluido, pero también significa extensión territorial, pueblo,  instituciones, organización, soberanía, administración, dominio, dirección en sentido objetivo del ámbito o población, en el que y sobre el que se ejerce una autoridad. 

En la obra El Príncipe, la idea de concepción del Estado se orienta en el sentido de ver unida políticamente a Italia, libre de subordinación, por ello es partidario del Estado Nacional Centralizado, libre de cualquier injerencia religiosa,  por considerar que es contraria a los intereses políticos. 

El maquiavelismo usado peyorativamente deja a un lado los ideales patriotas presentes, él se pronuncio a favor de la libertad general, proponiendo medidas encaminadas al bien público y de la libertad de discusión con el objeto de oír ambas partes ante de tomar una decisión, creía, que el pueblo tiene que ser independiente y fuerte, ya que no hay modo de hacerlo belicoso sin darle a la vez los medios de rebelarse de emanciparse. 

Tenía una elevada opinión de la virtud y el juicio de un pueblo incorruptible en comparación con la del Príncipe y de la interpretación desvirtuada que se la ha dado. 

“El Pueblo no es capaz de tener opiniones de largo alcance en materias intrincadas de política…”  decía, “pero en aquellas cuestiones que puede comprender, tales como la valoración de la personalidad de un magistrado,  es  más  prudente y acertado al tener un juicio  más sólido que el Príncipe,” es decir  que del Poder Ejecutivo.  

¿Es parte de su doctrina de Estado Docente? 

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arteawao2003@yahoo.es 

Notas.

1- Cordova, Arnaldo, Sociedad y Estado en el Mundo Moderno, Editorial Grijalbo, México D.F. pg. 72 

2-Maquiavelo, N.  Obras Políticas, Instituto  Cubano del Libro, La Habana 2002 
 

Bibliografía.

Nicolás Maquiavelo,  El Príncipe.

Márquez, Trino. El Estado en Venezuela. 



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Alejandro Álvarez Osuna


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