El discurso de Angostura emitido por El Libertador Simón Bolívar en el marco de la apertura del 2do Congreso Constituyente Patriótico el 15 de febrero de 1819 fue una bitácora política cuya grandeza se extiende a lo largo de 200 años en tanto su vigencia se mantiene como línea de acción del bolivarianismo y como fuente de inspiración para los pueblos latinoamericanos y del mundo. especialmente en defensa de los derechos humanos.

En sintonía con las grandes metas de las últimas resoluciones de Naciones Unidas, especialmente en lo referido a los derechos humanos, el derecho al conocimiento y de allí el derecho a la historia y su comprensión, Bolívar visionó en una frase de su discurso una realidad actual: "Por el engaño se nos ha dominado más que por la fuerza; y por el vicio se nos ha degradado más bien que por la superstición. La esclavitud es la hija de las tinieblas; un pueblo ignorante es un instrumento ciego de su propia destrucción..."

Ese engaño que menciona Bolívar , ¿no es acaso el mismo de las campañas desarrolladas por el tinglado de agencias de noticias al servicio de las políticas agresivas de Estados Unidos contra Venezuela, Siria, Iran, Nicaragua, Turquía, Palestina y otros pueblos del mundo que han decidido liberarse de las imposiciones de los ejes injerencistas norteamericanos y europeos?

La actuales circunstancias de los pueblos del Medio Oriente y Asía pueden sorprender en tanto Simón Bolívar en 1819 las analiza a la luz de su postulado por hacer leyes para la paz antes que para la guerra: "...El libro de los Apóstoles, la moral de Jesús, la obra divina que nos ha enviado la Providencia para mejorar a los hombres, tan sublime, tan santa, es un diluvio de fuego en Constantinopla, y el Asia entera ardería en vivas llamas, si este libro de paz se le impusiese repentinamente por Código de religión, de leyes y de costumbres".

Y el racismo que era y es una doctrina fundamentada por el colonialismo y el neocolonialismo recibió en sus palabras escritas para aquel Congreso de Angostura de 1819 una buena dosis de lo que hoy deben aprender o comprender los mandatarios norteamericanos y europeos cuando dijo abiertamente: "Tengamos presente que nuestro pueblo no es el europeo, ni el americano del Norte, que más bien es un compuesto de Africa y de América, que una emanación de la Europa; pues que hasta la España misma deja de ser europea por su sangre africana, por sus instituciones y por su carácter. Es imposible asignar con propiedad a qué familia humana pertenecemos. La mayor parte del indígena se ha aniquilado, el europeo se ha mezclado con el americano y con el africano, y éste se ha mezclado con el indio y con el europeo".

No hay distinción entre lo que señala la Resolución 20-30 sobre la Sostenibilidad como mandato para los estados miembros de Naciones Unidas en 2015 y lo que señaló Bolívar como fundamento de los derechos del hombre a la igualdad: "(...)Mi opinión es, legisladores, que el principio fundamental de nuestro sistema depende inmediata y exclusivamente de la igualdad establecida y practicada en Venezuela. Que los hombres nacen todos con derechos iguales a los bienes de la sociedad, (...)"

Bolívar es un autor universal, no solo para Venezuela, que ha seguido sus pasos en los tiempos contemporáneos, o para América Latina cuyos pueblos se baten en luchas emancipatorias, sino para el mundo que todavía deben conocer la obra del más grande de los estadistas latinoamericanos cuando dijo: "El sistema de gobierno más perfecto es aquel que produce mayor suma de felicidad posible, mayor suma de seguridad social y mayor suma de estabilidad política" Fueron palabras de Bolívar en el discurso ante el Congreso de Angostura en 1819 que se mantienen lapidarias para la lucha por la defensa de los derechos humanos.

Aldemaro Barrios R.

Caracas, República Bolivariana de Venezuela

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