Construir un edificio sin ingenieros, reparar un carro sin mecánicos, hacer una revolución sin cuadros revolucionarios de peso absoluto son grandes errores que a la final se pagan y se pagan bien caros. Cuando el Comandante Chávez salió a la palestra pública y posteriormente se lanzó al ruedo político siendo electo como presidente el 6 de diciembre de 1998, los que al menos teníamos un mínimo de conciencia revolucionaria o nos considerábamos de izquierda para ese momento y hoy lo seguimos siendo, inmediatamente entendimos el mensaje que trasmitía el comandante en sus discursos y entrevistas en los medios de comunicación el cual era de mucho contenido social, nacionalista, integracionista y reivindicador de las causas más justas de los desposeídos de siempre, el que es verdaderamente revolucionario sabe de lo que estoy hablando, es por ello que cuando el comandante gana las elecciones del 98 y se le arrimaron muchos politiqueros de oficio, oportunistas, reformistas, supuestos revolucionarios sin ninguna claridad ideológica y política y que muchos de ellos todavía se siguen pavoneando por ahí, sin menoscabar la integridad y compromiso de algunos cuadros que también lo acompañaron en su lucha y que ante la izquierda nacional e internacional siguen siendo referencia política dada su claridad y convicción ideológica, no quiero hacer referencia a ninguno (a) en particular para no entrar en controversias personalistas ya que no es el objetivo de este artículo.
Las revoluciones no se decretan se construyen, y se construyen con verdaderos revolucionarios y ser revolucionario es una aptitud de vida, cuyo comportamiento debe estar apegado a los más sensibles sentimientos de humanismo acompañados de humildad, respeto, solidaridad y camaradería, aptitudes que distan del comportamiento de muchos de los y las que hoy se muestran como chavistas y peor aún como revolucionarios (as) cuya arrogancia, prepotencia y falta de convicción revolucionaria y que hoy deambulan y desfilan como cual pasarela fashion por las instituciones del Estado sin tener la menor idea del compromiso histórico que hoy representa el proyecto Bolivariano, Chavista y Revolucionario que hoy por hoy se trata de construir en la República Bolivariana de Venezuela (RVB), son los mismos personeros y personeras que han llevado esto al despeñadero que hoy vivimos. Ya es hora de convocar al trabajo comprometido y productivo a verdaderos revolucionarios de convicción y acción e ir desplazando a esos infiltrados, pico e plata y equivocados con mentalidad pequeña burguesa que no han hecho, no están haciendo y no harán nada para salvar esta nave en la cual estamos montados los venezolanos y venezolanas de todas las tendencias y que estamos esperando que se fortalezca y se consolide un liderazgo político que sea capaz de conectar y resolver las necesidades más sentidas del pueblo tales como: salud, alimentación, educación, vivienda, transporte, estabilidad laboral y recreación entre otras.
Es primordial empezar a convocar sujetos comprometidos ideológica y técnicamente que se conviertan en referente ético y moral para esta sociedad que tanto lo requiere y sean capaces de contribuir con este proyecto si queremos salvar algo que cada día se hunde más en la mezcolanza ideológica, política y social que hoy vivimos por ello es necesario retomar el rumbo originario de este proceso el COMANDANTE SUPREMO HUGO RAFAEL Chávez FRIAS bastante que nos habló, orientó y planteó para la construcción de este proyecto pues no inventemos el agua tibia solamente sigamos sus preceptos y enseñanzas así verdaderamente estaremos siguiendo con su LEGADO. Es necesario convocar científicos y técnicos claros ideológicamente hablando, ya que lo técnico se aprende pero la convicción y formación ideológica no se adquiere o se aprende de un día para otro eso es estudio es ciencia para cambiar los paradigmas, discusión, vivencias y voluntad para aportar políticamente en la suma de felicidad para este pueblo, entre otras. Ya para concluir es una apreciación muy personal hubo un error de cálculo al permitir y creer que todo aquel que se arrimó al comandante Chávez y ahora a MADURO, era revolucionario una revolución se construye con REVOLUCIONARIOS no hay de otra. Continuare siendo crítico y autocritico, aportando técnicamente desde mi trinchera de lucha que es mi trabajo y apoyando toda acción política que redunde en el bienestar emocional y material del pueblo.
INGENIERO DE PROFESIÓN, HUMANISTA E INTERNACIONALISTA POR VOCACIÓN Y REVOLUCIONARIO POR CONVICCIÓN.
pablo.vitola@gmail.com