La altísima polarización política que se ha desarrollado de manera exponencial en Venezuela, sobre todo desde el referéndum revocatorio del 2004, ha implicado el manejo de la realidad y los escenarios desde una fuerte versionalización de la verdad, con toda una narrativa hostil y en la cual los adversarios políticos se han convertido en enemigos, en donde las estrategias de acción política no es la coexistencia pacífica y pareciese que los extremistas buscan exterminar al contrario…

El permanente enfrentamiento político cuasi-bélico ha llegado a niveles que eran impensables, ya que las discusiones en la cotidianidad de las calles es un hecho rutinario en las colas, en las esquinas, en las puertas de los negocios…están las personas que todo lo critican, usan un lenguaje agresivo con una voluminosa carga de odio, en el que señalan que todo, absolutamente todo lo malo que pasa en el campo económico es "culpa del gobierno" y en los sectores más radicalizados de la derecha nacional, hay hasta un disfrute cuando dicen "esto es el infierno", ya basta…hay que sacar a Maduro ya!...

En esas narrativas de la cotidianidad de la polarización política, hay personas que consideran que los sectores económicos y el imperio se han confabulados para crear ésta crisis y guerra de precios, lo cual benefició electoralmente a la derecha nacional el 6-12-2015 (pero a partir de allí, han perdido tres elecciones consecutivas)… y son los culpables de lo que ocurre con la escases y la inflación inducida…y eso ha hecho que hay una especie de esperanza en que tarde o temprano, el gobierno va a ganar ésta terrible y despiadada guerra económica…

Eso le hace a uno recordar la famosa pregunta de V, Lenin, ¿Qué hacer? Rebélate! la pasividad no calmará tu hambre!..Eso significa que estamos en presencia de una situación muy crítica y peligrosa en el campo económico, que nos están acercando a un deterioro progresivo de nuestra calidad de vida y pisando terrenos despreciables de hambruna relativa que se quiere convertir en colectiva…producto de una alta disminución del consumo de alimentos…

Esas perspectivas sobre la realidad social, que se maneja en los extremos del criticismo y la resignación , tiene que despertar una sensibilidad y voluntad de organizar y fortalecer al poder popular para que se incorpore de una manera activa y decidida en luchar contra lo que hasta ahora han aparecido como unos sectores socio-económico muy poderosos que han marcado la pauta en ésta feroz batalla y han hecho lo que les ha dado la gana y han dominado e impuesto sus apetencias de destrucción y desolación, que no se quedarán tranquilos hasta derribar al chavismo del poder político…

Y entre esos están: el bloqueo comercial, económico y financiero, el bachaquerismo en todos sus niveles, los contrabandistas y acaparadores, la página dólar today, una burguesía parasitaria e importadora, la derecha en todas sus modalidades, las empresas de maletín que han obtenidos dólares y han estafado a la nación, los chupadores del efectivo, los saboteadores de los servicios públicos, la corrupción y en fin, todas y todos los que se han confabulados, para que las personas crean que la solución a nuestros problemas económicos, es irse del país o que llegue una intervención militar humanitaria…

Por lo tanto, el poder popular, los movimientos sociales, los entes gubernamentales revolucionarios y la solidaridad internacional de los pueblos hermanos, deben enfilar sus baterías en pasar a la ofensiva en ésta lamentable guerra económica, llena de bombas solo mata-gente con los escandalosos precios que cada vez están haciendo más inalcanzables adquirir productos, medicinas y repuestos…hay que darle una respuesta a una preocupante pregunta que la gente se hace en la calle: ¿hasta cuando?...

Ésta batalla es larga, dura y difícil…

Luchar hasta vencer!