No voy a negar la alegría del triunfo obtenido, el 10 D y como lo he dicho en notas anteriores; lo que pasa es que sigue sin convencer para hacer creer que todo esta bien, porque sabemos que el ataque a la PATRIA no se acaba con este reguero de bambalinas: pero como creo en la disciplina comunista, prefiero arreglar las dificultades de la revolución, dentro de nuestras contradicciones; que permitir vuelvan los asesinos que comenzaron el siglo pasado está destrucción en la psiquis de la generación o sea, la traición que acecha disfrazada de mérito desclasado y aprovechando debilidades, retraernos, para destruir lo alcanzado.
Pero como soy irreverente y leal a mi convicción; no tengo otra opción que seguir LUCHANDO, aunque tenga que dormir con el pantalón puesto y la camisa en el espaldar de la cama, para correr con mi fusil al hombro cuando llegue el tum tum.
Llegamos a extremo de mantener las deformaciónes contaminadas de pasado, que arrastramos y no hemos tenido la fortaleza para darle conducción revolucionaria.
Tratamos de auto destruirnos, como si el enemigo histórico hubiése cambiado y ahora es por el poder que nos mantenemos en constante ataque, desde que empezamos la propuesta revolucionaria, guiados por el arañero; ahora resulta que entre hermanos tenemos que exterminarnos; jugamos al fusilaó con nuestros camaradas, como cuando niños y queremos como asesinos el juego parezca verdad; vencer a nuestro "enemigo" por encima de cualquier dolor; nos convertimos en jaque (así llaman en mi PUEBLO a los prepotentes) hicimos de la política una propagadora de egos, donde la superficialidad no deja que fluya un pensamiento distinto al que instauró el capitalismo y no se visualiza una propuesta comunitaria; todo lo aprobado es distante del sueño; emulamos practicas de la IV y "como sea" es una máxima promocionada por el liderazgo; distanciando el "como es" que es fundamento de la sindéresis revolucionaria.
Esta conducta se está patentizando como moda y no hay quien llame la atención al respecto, para que no sigamos por ese despeñadero de fantasía capitalista, imponiendo violencia de golpear para ganar ( como jalisco, que cuando pierde arrebata) y no para construir; lo hacemos con artilugio sin concientizar que la ventaja esta cuestionada; porque ganamos, sin importar como y cuando el "como sea" gane.
No se puede fantaciar con el falso triunfo; el honor del vencido se convierte triunfo, porque la razón en revolución se conquista con la verdad; no se impone con el poder, porque de ahi al fascismo hay solo un paso.
Establecer posiciones de combate, hace a los revolucionario dignos; llevar el legado de nuestros héroes como estandarte en cada batalla, porque PATRIA O MUERTE, VENCEREMOS Y HASTA LA VICTORIA SIEMPRE.
SIN PATRIA NO QUIERO VIDA.
HAZTE CONCIENCIA.
