Mi comandante Inmortal Chávez diseñó un Socialismo Bolivariano Cristico posible; dio nuevos horizontes a la lucha de la izquierda en el mundo al enfocar el poder constituyente y el poder popular. Su contribución debemos pensarla bajo la óptica de la nueva geometría del poder, pues se propuso desarrollar en un inédito marco espacial y geográfico desde una novísima escala de valores políticos, sociales, culturales, religiosos; al revalorar la gestión social y cimentar la sustentabilidad de una Revolución CRISTICA Humanística y Socialista con una Constitución, normas, leyes habilitantes y el Petróleo como acervo energético desde la óptica del ECOSOCIALISMO.
La actual coyuntura de los precios petroleros amerita un enfoque detenido de la geopolítica y diplomacia bolivariana. Sus postulados y conceptos como soberanía; la autodeterminación e integridad territorial, fueron repensados en el proceso constituyente que vivió el país a finales de los años noventa. Si el 27 de febrero de 1989 fue la revuelta popular contra el modelo capitalista salvaje, el proceso constituyente de 1999 marca la ruptura epistemológica, en la esfera jurídico-política, contra el neoliberalismo, contraria al capital y por lo tanto una argumentación Socialista Cristica. Los economistas “críticos” y los apologetas del neoliberalismo, detractores del modelo de transición Socialista Cristica, ubicados en la academia y la maquinaria mediática, no se percatan de que en el proceso Bolivariano emergió un cambio de paradigma económico, un nuevo concepto de la reproducción de la riqueza, donde el petróleo es concebido no sólo como materia prima, sino como acervo energético y sustrato fundamental del modelo productivo Socialista Cristico, con la gestión del Inmortal Hugo Chávez al cambiar el sistema de regalías y direccionar los ingresos del fisco nacional, se convirtió en términos absolutos en inversión social: proyectos de Educación, Salud, Vivienda, obras de infraestructura, atención a grupos sociales en situación de pobreza……………….
Los desafíos de hoy son consolidar la Revolución Bolivariana Socialista Cristica; cimentar un desarrollo territorial equilibrado; responder a la demanda interna de recursos energéticos; alimentarios; manufactureros y vías de comunicación hasta los objetivos históricos como son la independencia y la soberanía. La Celac toma como premisa la defensa de la soberanía; el énfasis en la autonomía de los Estados para crear su sistema político propio con los signos de la aparición concreta de un espacio regional, para consolidar y proyectar una identidad Latinoamericana y la complementariedad geoestratégica. En el caso de la Unasur al focalizar los recursos naturales (cuencas hidrográficas), las fuentes energéticas (petróleo, gas, carbón, agua y el pulmón vegetal de la MADRE TIERRA), se muestra a la altura de su máxima responsabilidad: Defender con políticas y legislaciones la disponibilidad para la humanidad de los recursos Naturales. Muy temprano por fortuna, el país asumió el desafío de expresar autonomía, enalteciendo el principio filosófico de la identidad como sistema político, pero también de la aplicación en política exterior del otro principio, también filosófico, de la diferencia. Se tomó distancia respecto del unilateralismo y la subordinación respecto a cualquier centro de poder, sea económico, militar, financiero y mediático. Avanzamos en una nueva concepción de la configuración del MUNDO que hemos denominado multicéntrico y pluripolar. Lo expresado en el Plan de la Patria (2013-2019) canaliza y encauza la política exterior ejecutada por nuestro país, para crear un marco que denominamos la plataforma de la diplomacia Bolivariana Cristica, la cual dibuja la base para emprender la transformación de la nueva Venezuela socialista. Se ha logrado visualizar el legado del Presidente Inmortal Hugo Chávez al impulsar el posicionamiento de Venezuela en la nueva geopolítica internacional.
Hay una gran amenaza en el tablero: Estados Unidos y su pretendida destrucción del Estado Social de Derecho; la fragmentación del Estado-Nación; el control de las reservas petroleras; la concentración del reequipamiento militar en pocos países; la generación de teatros de operaciones; el estímulo de microguerras para paralizar países, desaparecer otros y crear un nuevo mapa regional. Con las medidas diplomáticas del presidente Obrero Maduro que invocan la reciprocidad, el balance, supervisión del acceso al país, se rompieron los viejos prejuicios, se sacudió el aparato retórico del lenguaje diplomático. Con disposiciones ajustadas al derecho internacional, introduce Maduro una nueva lógica. El imperialismo continuará su "labor" de conspiración y distorsión a gran escala de Venezuela. Fallaron con acusaciones de Narco-Estado y sucumben con el cuento de los Derechos Humanos.
En la actual época de Guerra Terrorista Económica e intentos de violaciones de la soberanía del neo-imperialismo, el pensamiento crítico en el Socialismo Cristico tiene que enfocar la explicación sobre la fisionomía de nuestras economías, enfocar la producción nacional, frenar la importación, condenar la reproducción de la súper-explotación y la expansión de capitales privados; frenar la especulación y el lucro desmedido; disgregar la alienación; el consumismo y en definitiva la derrota de vestigios del "Paisaje de Pobreza" y la marginalidad hoy convertida en "bachaqueo". Mi Comandante Hugo Chávez, proclamó un pensamiento crítico en Socialismo, el contra-discurso, recordemos su "Alo Presidente teórico". Pasar de lo urgente a lo prioritario es encontrar diariamente nuestro diagnostico.
¡INDEPENDENCIA Y PATRIA BOLIVARIANA SOCIALISTA CRISTICA!
¡NO OLVIDEMOS QUE LA MENTIRA ES LA FALTA DE HONRADEZ MAS COMUN EN ESTE MUNDO TERRENAL!
¡NO TE INQUIETES PUEBLO VENEZOLANO PORQUE NUESTRO AMADO SENOR HEOVA TE FORTALECE, TE AYUDA Y TE SOSTIENE EN SU CORAZON DE AMOR PURO!
