Éste domingo 8 de diciembre hay que salir todos y todas a votar, tenemos que estar conscientes de que se encuentra en juego los espacios políticos de las instituciones que están más cerca de la ciudadanía.
Las alcaldías y concejalías son cargos de elección popular que representan la instrumentación de las políticas municipales y su articulación con el poder popular, que en coordinación con el ejecutivo nacional y regional, pueden construir las condiciones reales y factibles de edificar en el horizonte a un Estado comunal y socialista.
Por lo tanto, la importancia de mantener políticamente esos espacios en manos de la revolución y obtener el triunfo en alcaldías claves que en éste momento son de la oposición, es una necesidad estratégicamente vital para evitar que éstos espacios controlados por el escualidismo sigan siendo trincheras políticas para la desestabilización y el golpismo.
Ésta situación revela que en las elecciones que presentan una alta abstención, por lo general obtiene la victoria el partido político que logra convocar a su militancia, conocidos como “el voto duro”, y es en éste punto en que considero importante derrotar a lo que yo califico como “la trilogía del mal interno”, es decir, tenemos que evitar que en la fuerzas revolucionarias se imponga un triunfalismo que haga pensar a las personas “no es necesario que yo vaya a votar, ya ganamos” ,esa expresión es peligrosísima, ya que es una oportunidad para que el adversario político te pueda ganar.
Los otras dos conductas políticas no deseadas es: “me da flojera ir a votar” Chávez no está presente y la no menos grave es la ausencia de una conciencia revolucionaria que te convierte hasta en un posible simpatizante del proceso revolucionario pero” me da igual quien gane”, es decir, la indiferencia
