Escribo desde las manos de alguien que transcribe mis palabras, debido a que padezco una ceguera temporal que me impide hacerlo a cuenta propia, dejando en cuenta que todo cuanto expreso es de mi más absoluta responsabilidad.
Dejo asentado que la razón de mi ceguera, obedece a que para el momento de mi retiro justificado en enero 22 del presente año, de la empresa Pequiven, S.A., en el Complejo Petroquímico G/D José Antonio Anzoátegui, no se cumplieron en su totalidad los protocolos médicos adecuados para mi egreso a pesar de manifestar con anticipación mi necesidad de una carta aval a fin de someterme a un procedimiento de capsulotomía, necesario posteriormente a haber sido sometido a una intervención por cataratas. Dicha carta aval me fue negada por la entonces gerente médico de Pequiven en Jose, doctora Soroneida Mata.
A tales efectos, de mi situación actual, que requiere de atención urgente, están al tanto el nuevo presidente de Pequiven; Ingeniero Pedro Rafael Tellechea, el Gerente General en Jose Capitán Douglas Ávila y el nuevo gerente médico; Dr Larry Urbina.
En aras de la justicia, hago del conocimiento de todos los mencionados con quienes, a excepción de Urbina he conversado, que no estoy pidiéndoles un favor a título personal sino que salden un compromiso medico que se me adeuda por retaliación hacia mi persona que legalmente se encuentra previsto en los preceptos que en torno al tema de las responsabilidades "objetiva" y "subjetiva" consagran el Código Civil Venezolano, la LOTTT y la LOPCYMAT.
Expuesto lo anterior debo decir que desde el pasado mes de abril, asumí en conjunto a mi compañero Clarck Laurens una fuerte lucha en las redes sociales, cuyo propósito no era más que poner en evidencia a una serie de actos de corrupción que a mansalva desangraban a nuestra empresa con absoluto descaro dirigidos por el recién sustituido tren gerencial cubiertos con un asqueroso manto de impunidad. Nos atrevimos a confiar en las instituciones del Estado, siempre amparados en nuestra constitución y el marco legal que la precede. Nos atrevimos a denunciar y a exponer públicamente a los responsables tal y como lo hicimos ante María Eugenia Noroño para entonces presidenta de la Estatal, en asamblea de trabajadores en el comedor de Jose cuando estando presentes en el sitio, señale a Xiolymar Guzmán y a su cuerpo de gerentes de segunda línea como una partida de inmorales, responsables de la tragedia que vivía nuestra empresa en el complejo Jose. De ese hecho en particular fue testigo de excepción Pedro Rafael Tellechea, quien recientemente ha sido designado como nuevo presidente de la corporación.
De nuestras acciones se desprendieron resultados a posteriori que culminaron con la remoción de la señora Noroño como presidenta de la industria y avizorábamos con esperanza un horizonte promisorio con la designación del Almirante Salazar Coll. Sin embargo esas expectativas se esfumaron rápido, ante una creciente ola de actos corruptos, una vez este señor ratifica en sus cargos en pleno al tren gerencial en Jose. Acudimos ante la Fiscalía General de la República a denunciar los actos corruptos, con pruebas en la mano que avalaban, nuestras advertencias, en un claro ejercicio de nuestra obligación de denunciar, tal y como lo consagra nuestro Código Orgánico Procesal Penal, de este acto, como medida retaliativa fue despedido Clarck Laurens en el mes de noviembre. De allí en adelante precedieron otra serie de trámites, jurídicos y políticos; cinco veces contactamos al Presidente de la ANC Diosdado Cabello Rondón y cinco veces pusimos en sus manos, sendas carpetas contentivas de las pruebas y evidencias que avalaban nuestras denuncias.
Nunca nos cansamos ni nos cansaremos, cuando de exigir justicia se trate. Fuimos víctimas de acoso, de persecución, de asedio y amenazas, de desmejoras y humillaciones, que en lo particular se hicieron insostenibles, obligándome a ampararme en el artículo 80 de la LOTTT para proteger mi integridad personal, mi estabilidad mental y mi moral, una vez que me entero se estaba fraguando un plan en mi contra para crearme un falso positivo con el fin de privarme de libertad. Como Delegado de Prevención fui testigo de excepción del acoso al cual sometieron a Clarck Laurens, la para entonces Gerente de Recursos Humanos en Jose, Facunda Antonia Orellana, su supervisor de Relaciones Laborales, Pablo Barroso y el Gerente de PCP Juan Carlos Ojeda. Del hecho reposa denuncia en el libro respectivo de los Delegados de Prevención sustentada en informe respectivo ante INPSASEL.
Infructuoso fue entrevistarnos con Salazar Coll, jamás atendió a nuestra petición de reunión, jamás accedió a darnos una entrevista y de allí asumimos hacer pública nuestra denuncia por las RRSS, de manera digna y honrosa, tal y como en efecto se llevó a cabo desde el mes de abril reciente pasado, con resultados de un evidente apoyo, de cientos de seguidores.
Al respecto agradecemos a esos cientos de seguidores que acompañaron nuestra lucha que aún no culmina, en su mayoría trabajadores honestos de los tres complejos. A todos les debemos eterno agradecimiento.
Nosotros seguimos solicitando justicia, creemos en el Sr Tellechea, muy a pesar que sabemos que los removidos no están completos y que los que aún persisten, se escudan detrás de la fachada de "amigo" para adular y permanecer en un cargo desde el cual no demuestran sino ineptitud, e incapacidad, reflejadas en el acoso a sus propios subalternos y el abuso de poder contra inocentes que solo se atrevieron a disentir de su opinión y por lo cual fueron privados de libertad y sometidos al escarnio, sin importar la destrucción moral de una familia.
Desde nuestra moral y con respeto siempre, reiteramos al nuevo presidente de Pequiven nuestro cordial propósito de diálogo. Nosotros no estamos pidiendo cargos ni consideraciones especiales, sólo queremos una reunión privada con su persona y que se nos haga justicia en términos honrosos para todos, en el entendido que estamos conscientes que los pasos hasta ahora dados parecieran acertados, para sacar adelante una industria estratégica del Estado que en tiempos de crisis requiere del concierto de todos.
Puedo decir que al menos el Sr. Tellechea al igual que el Gerente General en Jose Douglas Avila han tenido con nosotros la deferencia de responder a nuestros mensajes y llamadas inclusive han manifestado voluntad en primer lugar de dialogar con nosotros y en segundo lugar de coadyuvar en mi problema de salud, sin embargo desde la designación del Sr. Techellea como Presidente de la corporación hasta la fecha y tomando en consideración que el mismo ha realizado varias visitas al Complejo Jose ninguna de las dos peticiones se ha materializado.
Mi asunto medico es urgente y requiere de atención inmediata, así se lo he hecho saber a ambos en varias oportunidades, pues corro el riesgo de quedar ciego definitivamente y la solución, por demás sencilla, como procedimiento medico es bastante costosa y no cuento con los medios económicos para solventarla. De igual modo la no intervención rápida del caso podría originar, si es que no ha sucedido, secuelas irreversibles en mi vista, dado que según me explica la medico tratante con la cual pude verme hace un poco más de un mes, la severa opacidad de mis lentes intraoculares no le permite hacer un examen mas exhaustivo para determinar otros posibles daños, por lo cual la capsulotomía es un procedimiento inicial para un diagnostico posterior. Extendemos de manera sincera y cordial nuestra mano; me permito en este caso hablar también por Clarck al nuevo presidente de Pequiven de quien tenemos buenas referencias y conoce de nuestra lucha y esfuerzos en aras del adecentamiento definitivo de nuestra industria.
Sr. Tellechea estamos a su espera, personalmente tenemos paciencia sin embargo le reitero que el asunto medico que me afecta requiere urgencia. Auguro éxitos en su gestión y en mi nombre y el de Clarck Laurens aguardamos por usted para dar feliz término a esta situación que estoy seguro facilitara el dialogo con todos y promoverá justicia para todos.
@rojasjj72 / rojasjj72@gmail.com