Si se subsidia excesivamente el precio de la gasolina, se regala, entonces se continuará con el despilfarro y el contrabando, ante "el diferencial de precios" que se crea entre "el precio internacional real" y "el precio preferencial subsidiado real que se paga (precio justo o acordado)".
Si "este diferencial de precios tiende a cero", entonces se acabará de verdad con "el contrabando de combustible", ya que no habrá ganancia o "precio preferencial de la gasolina" que lo financie y sea "la fuente de las ganancias del contrabando".
Este subsidio al precio de la gasolina debería trasladarse a los sueldos de los trabajadores, pensiones, ayudas de apoyo a las familias en situación de riesgo "hogares de la patria", lo podrían llamar "el bono de transporte para el pueblo", que puede tener varias escalas, ante un análisis del consumo del pueblo.
El precio de los pasajes, de los servicios de transporte, debería cubrir todos los costos del precio internacional de la gasolina, en tal sentido el transportista que trabaja, podrá cubrir automáticamente los costos de la gasolina y la ganancia justa para mantenimiento de las unidades y por el trabajo o servicio prestado, sin ningún precio preferencial, solo trabajando y cobrando el precio justo o acordado del servicio de transporte y los subsidios del pasaje estudiantil y de la tercera edad.
A la hora de comercializar la gasolina, en toda la cadena de comercialización se deberían implementar precios internacionales, e incluso a la hora de pagar, el pueblo, el transportista deberían pagar el precio internacional, si el sueldo alcanza para pagar la gasolina y los costos de los servicios de transporte, entonces "ya no se necesitan precios preferenciales que sustentan el contrabando de gasolina", este es el principio de sincerar los precios, eliminar los diferenciales de precios internacionales, protegiendo al pueblo con subsidio directo, bono de transporte. Los "precios preferenciales" en la cadena de comercialización son la causa de todos los males, porque crean diferenciales de precios internacionales en la frontera y la ganancia para el delito del contrabando.
Se fomentará el ahorro de la familia venezolana que se arropará hasta donde le llegue la cobija, incluso al ahorrar el bono de transporte, optando por transporte público en vez del carro propio, tendrá recursos para cubrir otras necesidades.
En tal sentido se sugiere evaluar varios escenarios de bonos de transporte estandarizados y su impacto en los sueldos y costos de los servicios de transporte público, teniendo presente los beneficios sociales del pasaje estudiantil, para la tercera edad y hogares de la patria. Si no se hace ahora, después podría ser muy tarde.
Ing. Angel Vivas.
@vivas_j