La Educación en el Campo Venezolano

En Venezuela, y en gran parte de los países de América latina, la educación rural constituye un instrumento para repetir la sociedad urbana. La modernidad ha logrado establecerse, inclusive en el medio rural y es precisamente la educación el canal que ha permitido instalarla en las conciencias de los campesinos, el pensamiento y el estilo de vida de estos hombres y mujeres. El término "campesino" según el DRAE está definido como: "lo que es propio del campo o perteneciente a él. Dícese de la persona que vive y trabaja de ordinario en el campo". Este vocablo, sin embargo encierra una categoría que no deja de ser problemática. Se puede hablar de una verdadera heterogeneidad en cuanto a quienes conforman este sector de la sociedad venezolana. No es igual la identidad campesina de los que viven en las diversas zonas rurales del país. Es evidente que estas identidades han sufrido un proceso de erosión, pero también se observa una marcada resistencia a este proceso. Junto con la penetración cultural de la modernidad en el campo, principalmente por medio de las tecnologías de la información y comunicación (TIC´s), así como de la escuela, como se dijo anteriormente; existe además una fuerte cultura campesina que sirve de muro de contención a la completa asimilación.

Algunos de los elementos distintivos del hombre campesino son en primer lugar, la familia y el trabajo. Ambos factores se encuentran entrelazados: el trabajo se aprende en el contexto de las relaciones familiares, de forma que el trabajo pasa a ser un valor inculcado en la crianza y que incluye un conjunto de destrezas que entran por los sentidos y que llegan a formar un acervo de tipo espiritual. Un segundo elemento importante es la relación con el entorno natural. El campesino en su actividad productiva depende del ecosistema con sus factores bióticos y abióticos, con una marcada dependencia del clima y la tierra. En tercer lugar hay que mencionar el componente social tanto en el trabajo como en el resto de las prácticas cotidianas. La solidaridad entre los campesinos ha visto surgir estrategias autóctonas como las cayapas, mono vueltas y otras. Un último, el elemento religioso juega un papel importante en la cultura campesina, esto se manifiesta en diversas festividades y en la vida cotidiana. Encontramos expresiones verbales que remiten a Dios, la Virgen y los santos.

La educación campesina enfrenta retos que pueden se enfrentados con iniciativas que tomen en cuenta la antropología cultural del campesino. Elementos como el sentido del trabajo, de la familia, de las relaciones interpersonales y con la naturaleza, constituyen pistas en este empeño de lograr una auténtica educación campesina.

UPT "José Félix Ribas" Barinas

 

josersc1968@hotmail.com



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