Traidores, mercenarios y terroristas

Algunos de mis maestros del IPC (Instituto Pedagógico de Caracas, hoy UPEL), nos reiteraban sobre la necesidad de la claridad y especificidad del lenguaje y más aún, en la especialidad en la cual me formé, es decir, Física y Matemática. Esto lo reitero dado que una gran mayoría de personas abusan del idioma sin tener conocimiento del mismo. Utilizan de manera ligera palabras como dictador, asesino, narco, bruto, tirano, ignorante…solo para descalificar a un semejante sin tener claro el significado del vocablo. Peor aún, no se toman la molestia de consultar la fuente que pudiera sacarlo de la duda.

Por eso escogí tres palabras que identifican este epígrafe, las cuales me permitirán desarrollar el escrito. Un traidor es un ser que traiciona, es decir que defrauda a otra, una persona que actúa de una manera contraria a la esperada, es decir, la traiciona. No sólo se traiciona a un amigo, se traiciona a la familia, al grupo étnico, a la religión y el peor, el traidor a la patria. En los primeros caso, la traición solo tiene consecuencia morales, pero la segunda puede tener secuela jurídica. Es por eso que en algunos estados se habla de "delitos de alta traición", dado que esta infracción puede dar origen a crímenes a mansalva, conspiraciones, sublevaciones, invasiones, evasión fiscal, hasta una intervención extrajera.

Un mercenario es un soldado o una persona que pelea a cambio de dinero o de un favor, sin ningún tipo de estimulación ideológica, solo lo motiva su ánimo de lucro. No necesariamente, es un combatiente, un mercenario puede realizar cualquier tipo de trabajo a cambio de una retribución o paga, generalmente económica. Es el caso de ciertos informadores, quienes realizan labores periodísticas sin importar la veracidad de la noticia a cambio de un estipendio. A estos se les llama mercenarios de la pluma. Hay también mercenarios de la cámara y del arte. El ejército mercenario más famoso es la Legión Extranjera, fundado en Francia en el 1830 e integrado por voluntarios de todos los países, además entre sus filas se destacaban aventureros, criminales y todo tipo de malvivientes. Otro ejemplo de mercenario al servicio de los imperios europeos fueron "los cipayos" constituido por tropas de la caballería del imperio Otomano que generalmente procedían del Magreb o de las colonias. Como tales combatientes estaban a la orden de los imperios europeos como el Reino Unido, Francia y Portugal, también se les conocía, en su forma despectiva, como "secuaces a sueldo". El peor mercenario es el "sicario", la persona que mata a otro por encargo, por lo que recibe dinero o una paga.

Un terrorista es la persona que practica el terrorismo es decir, actúa de una forma violenta de la lucha política, mediante la cual se persigue la destrucción del orden establecido o la creación de un clima de terror e inseguridad susceptible de intimidar a los adversarios o a la población en general. El objetivo del terrorismo es el despotismo por medio del terror para presionar a los gobiernos o la sociedad en general para imponer reclamos o proclamas. Así mismo, el fin del terrorismo es amedrentar, amenazar y asesinar a los habitantes de una localidad y se utiliza para sembrar miedo. No solo los terroristas esgrimen armas, bombas explosivas o incendiarias, actualmente, con las modernas tecnologías debo mencionar el terrorismo mediático, cuando se hace mal uso de la prensa difundiendo noticias falsas que mantiene a los usuarios de la mass media a la expectativa o en vilo. El terrorismo financiero, creado por la banca cuando inventa estados financieros ficticios para generar embargos o subidas o bajadas artificiosas de la bolsa; terrorismo alimentario, cuando los productores, los distribuidores y vendedores acaparan o aumentan los precios de los alimentos para crear desasosiego en la población; terrorismo sanitario, cuando los laboratorios lanzan campañas de supuestas epidemias para vender medicamentos para curar enfermedades o epidemias, muchas veces creadas por famosos laboratorios. Imposible dejar de la lado el terrorismo informático cuando los especialistas en procesamiento de datos, los hackers, son capaces de crear un caos en el funcionamiento de los sistemas de computadoras de una empresa, de una compañía, de la banca o del gobierno.

No quiero exagerar, pero si el lector lee con detenimiento las definiciones de traidores, mercenarios y terroristas advertirán que lamentablemente en Venezuela están operando toda una cáfila de malhechores que se identifican con alguno de estos adjetivos. Antiguamente los traidores actuaban subrepticiamente, escondido, avergonzado para que la gente no advirtiera sus apostasías. En Venezuela los traidores se retratan muy ufanos con nuestros enemigos, no de ahora, nuestros enemigos de siempre, los que robaron nuestras riquezas, los que nos impusieron formas de gobernar, los que impusieron tiranos, quienes tratan de arrebatarle a los venezolanos la soberanía política y económica, entre tantos males. No es nada decoroso retratarse con altos funcionarios del gobierno de EEUU, ni con los presidentes alfombras de centro y sur América, tampoco con el operador sumiso de EEUU en la Secretaria General de la OEA, entre muchos de los que adversan a la Revolución Bolivariana. Julio Borges, C. Radonski, Lilian Tintori, Freddy Guevara, Luis Florido, Guanipa, William Dávila… de vez en cuando se retratan, con su mejor sonrisa, con alguno de aquellos en Washington, Miami, Panamá, Brasil, Argentina, Colombia, Perú…como prueba fehaciente de la traición y de sus talantes de vendepatria.

Venezuela no solo es víctimas de una cáfila de vendepatria, actualmente estamos ante la presencia de un ejército mercenario entrenado, preparado y equipado por agentes extranjeros ubicados en Colombia y EEUU. Habría que ser muy ingenuo pensar que los mortales artilugios empleados por los vándalos que están aterrorizando diversas ciudades del país son comprados y pagados por ellos mismo, es decir de su bolsillo. Las máscaras antigases, los morteros, los fuegos pirotécnicos, el escudo, el casco, la comida, la droga, la gasolina, las botellas, el pago y otras armas utilizadas en la guerra de cuarta generación tiene un alto costo en el mercado y por lo tanto, les son entregados por un financista ubicado en EEUU. Actualmente algunas ciudades de Venezuela están siendo asoladas por ejércitos mercenarios, verdaderos cipayos tal como lo contempla la definición anterior, son secuaces a sueldo que no obedecen doctrina alguna, que destruyen y asesinan solo por la paga.

No creo que sea necesario ahondar mucho sobre el terrorismo. Venezuela está siendo atacada por todas las modalidades del terrorismo: el callejero mediante los disturbios violentos con bombas incendiarias y explosivos que generan secuestros, guarimbas, sicariatos, catástrofes y muertes; el terrorismo mediático que convierte a los usuarios de la mass media, consecuencia de sus desinformación y su campaña fascista, en seres racistas, dispuesto al linchamiento, a la quema de personas por la simple razón de ser o parecer chavista; el terrorismo financiero, negándole a Venezuela, por una información desvirtuada por las operadoras de riesgo, a tener acceso a los créditos de la banca internacional; terrorismo alimentario, al mantener las empresas acaparado los alimentos o al bajar su producción y mantener precios elevadísimo para matar de hambre a la población. De vez en cuando se deja escuchar la voz de algún médico mercenario acusando al gobierno del presidente MM de descuidar la atención de los niños. Cuando son los opositores lo que atacan los centros de salud donde se encuentra hospitalizados decenas de chicos y chicas. Sinceramente, no crea que exista alguna forma de terrorismo que no hayan utilizado los opositores contra nuestra sociedad, con sus traidores, sus mercenarios y sus terroristas para derrocar al gobierno del presiden MM.

Para completar, si a lo anterior le agrego la cantidad de ignorantes que desconocen hasta la fecha del nacimiento de Bolívar, de fanáticos que salen todos los días a marchar gritando a viva voz "libertad" y "Maduro dictador" y los estólidos que desconocen la raíz del problema, entonces nos damos cuenta en manos de quien está la oposición venezolana. Lee que algo queda.



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Enoc Sánchez


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