"La tercera ley de Newton establece que siempre que un objeto ejerce una fuerza sobre un segundo objeto, este ejerce una fuerza de igual magnitud y dirección pero en sentido opuesto sobre el primero, las cuales están situadas sobre la misma recta". Un ejemplo muy sencillo seria cuando se ejerce una fuerza sobre una determinada área en un plano, esta área ejercerá una fuerza igual pero de sentido contrario. Por lo que ambas, están en un equilibrio dinámico. No obstante, en el caso extremo si una de estas fuerzas sobrepasa a la otra se pierde el equilibrio y se produciría otro fenómeno, el cual se debe estudiar en toda su minuciosidad.
También en el campo social, esta ley se puede aplicar, sobretodo en los eventos que ocurren en la vida cotidiana de la humanidad, sin temor a equivocación; en donde el accionar de cualquier ser humano puede generar una reacción impredecible. Por ejemplo, con el devenir del tiempo en las sociedades acontecen anormalidades que pueden afectar al ser más inteligente que habita la tierra, dejando huellas imborrables que pueden signar su destino. Son acontecimientos que pueden llenarlo de ira y de sed de venganza; cuando el protagonista de un hecho punible no recibe la penalización debida. En este sentido, hay una causa que produce un efecto y, por consiguiente se obtiene una consecuencia.
Dentro de este contexto, la aplicación de esta ley se reafirma en la sociedad de cualquier nación, cuando el mismo recibe algún estimulo placentero que sea de su agrado, el gobernante de turno recibe una acción igual pero de sentido contrario. Si el pueblo recibe algo de calidad, lo recibe bien y, si además disfruta de una salud envidiable y; de una prosperidad material tangible, el dador que en este caso sería el gobierno de turno, debería recibir lo bueno de su gente en compensación con tan loable gesto, lo cual permite mantener ese equilibrio dinámico social. Dicho de otro modo; cuando se da algo, esa acción de dar produce una reacción igual pero inversa, la de recibir. De aquí surge aquel lema que dice "dando es como se recibe". En esta perspectiva, surge la siguiente interrogante, ¿Se puede aplicar el enunciado de la Tercera Ley de Sir Isaac Newton a la actualidad venezolana?
Las anteriores concepciones permitirán esclarecer el tema que se abordara en esta oportunidad; la forma como el gobierno nacional ha enfrentado en los últimos días las sostenidas y novedosas formas de expresiones populares, la cual pudiera dar una percepción aproximada de su aplicación en la turbulencia social que estremece a un pobre pueblo rico. Así, por ejemplo; en primer lugar, el accionante, un sector de la población que ha manifestado su descontento con marchas hacia las diferentes dependencias del gobierno para hacer llegar sus querellas, debido al proceder por parte de las autoridades nacionales en el manejo de la crisis por la cual atraviesa la patria, situación que ha llevado a un sostenido crecimiento del desempleo y la pobreza, que ha multiplicado la legión de desocupados, y, que lejos de adoptar políticas tangibles que permitan revertir esta lamentable postura han profundizado la exclusión. En segundo lugar, el reaccionante; el gobierno nacional, quien ha tratado de apaciguar esta dificultad con planes de asistencia social como un instrumento para tratar de controlar el descontento y desarticular las diferentes protestas que se suscitan a todo lo largo y ancho del territorio nacional. Además, esta reacción se ha caracterizado por una represión descabellada según la parte accionante. No obstante, la opinión del sector reaccionante; es solo la respuesta para detener el quebrantamiento del orden público, de cualquier forma llámese como se llame a estas particularidades, las mismas han ocasionado incuantificables heridos de gravedad y muchas personas han perdido la vida. Hay que mencionar, además que Vladimir Villegas afirma la imperiosa necesidad de "… hacer un esfuerzo para que se preserve el derecho a la vida". (https://www.aporrea.org/ddhh/n309208.html). Habría que decir también, que se han hecho numerosas denuncias de presuntas torturas y tratos indignantes para los privados de libertad. Todas estas observaciones se relacionan también con otras hipotéticas medidas coercitivas empleadas, tales como la persecución penal de los principales protagonistas de estas expresiones populares, como un instrumento de controlar ilícitamente esta acción política. El mismo Villegas Poljak sostiene que "Realmente un hecho como este no es aceptable, no es tolerable". Se pudiera decir, que es la criminalización judicial de las protestas sociales que están legítimamente enmarcadas en el artículo 68 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, legado que dejo el presidente Hugo Rafael Chávez Frías y, que a capa y espada defiende la Fiscal General de la Republica Dra. Luisa Ortega Díaz. Así pues, estas son las respuestas que reciben por manifestar su descontento a las actuales políticas ejercidas por el gobierno nacional.
En consecuencia, cientos de manifestantes en protestas legítimas han soportado y seguirán soportando esta reacción por parte del gobierno nacional, según lo han expresado públicamente los actores de estas manifestaciones populares y, han dado a entender que solamente dejaran de ejercer tales acciones hasta que se establezca el hilo constitucional. A su vez, el agente reaccionante tampoco se quedará pasivo y continuara con la meta de poner el orden dentro del desorden para administrar la crisis de acuerdo a su criterio. En esta dirección se ha especulado, que han realizado inversiones en la compra de material para uso exclusivo de la FAN. Dicho de otra forma, en esta fase histórica que vive la sociedad venezolana se pudiera afirmar que la reacción sobrepasa a la acción, quedando en evidencia que la tercera Ley de Sir Isaac Newton no se cumple en el caso analizado. Entonces, surgen nuevamente las siguientes interrogantes, ¿Cuál será el desenlace de este evento? ¿Se mantendrá el enfrentamiento entre los protestantes y las autoridades? ¿Buscaran una solución pacífica y consensuada los diferentes actores políticos?
Solo el tiempo tendrá respuestas a estas interrogantes, pero de lo que si se debe estar consciente es que el mismo no se detiene y la crisis por la que atraviesa la patria del Libertador Simón Bolívar se acrecienta a pasos agigantados lo que pudiera devenir en hechos que lamentar que seguirían bañando con sangre inocente el suelo patrio más de lo que ya está. Se deben hacer esfuerzos mancomunados para que estos hechos se subsanen y jamás vuelvan a repetirse en suelo patrio. Venezuela es de todos, no es de ningún sector o partido político en particular. ¡No se les olvide!
"Ganamos justicia más rápidamente si hacemos justicia a la parte contraria".
Mahatma Gandhi
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