"¿cuál es la diferencia, me pregunto yo, entre un país que encierra en la cárcel a unas cuantas personas de más y un país que deja en libertad a sus gánsteres?" JOHN LE CARRÉ.
No hay que hilar muy fino, para sospechar que la sociedad venezolana, está dañada, y poseída por la corrupción, el trafico de influencia, y la riqueza fácil, y que en estos últimos 2 años hiperinflacionarios ha vivido atenida a los escándalos, que cuando aparecen no duran más de tres días; como hemos visto con este nuevo escándalo donde se involucra desde USA al empresario venezolano presidente de Globovision, un personaje presuntamente con acceso al poder político dedicado a asaltar las arcas públicas, según la justicia norteamericana. Sin que el brazo de la Justicia venezolana le caiga encima. El país se sobresalta con la constatación de que la impunidad termina amparando a los capos de estas estructuras mafiosas.
Así eran las redes criminales construidas por la cosa nostra en el siglo XX, que edificaron los migrantes italianos llegados a territorio norteamericano, con el software de la mafia siciliana, y con una estructura estalinista que funcionaba como una familia a la cabeza de la cual estaba el páter famili, la cual giraba bajo el control de "il capo di tutti capi" con poder de decisión sobre vidas y negocios. Fueron poderosas e influyentes esas redes criminales que obligaron al Estado norteamericano a montar una estructura policial y judicial para desmantelarlos, y romper sus conexiones. Donde muchas de las veces con resultados fallidos en esa lucha contra esa delincuencia organizada: Al Capone, jefe mafioso de Chicago, le pegó los ganchos el Gobierno Federal no por sus actividades en los bajos fondos de las salas de juego, y el tráfico ilegal de bebidas, sino por otro tipo de delitos como la evasión de impuestos en sus negocios.
¿Existirá en la estructura jurisdiccional venezolana una jurisprudencia absolutoria para que el "este presunto capo criollo" salga libre del castigo penal señalado por la prensa internacional cometido en territorio imperial, al igual como le sucedió a Capone? ¿Será "Gorrin" el señalado por la justicia norteamericana el verdadero "capo" o un "testaferro" a la cabeza de esta trama de corrupción y legitimación de capitales, o será un eslabón más de la cadena de la alta corrupción que todavía se mantienen ocultas?
Se siente en el ambiente de la justicia venezolana la presunción de que en este país el brazo de la Justicia se ha quedado corto en todos aquellos casos que ha estremecido la institucionalidad del estado venezolano ejemplos sobran. Antonini Wilson, Odebrecht, plan Bolívar 2000, mercales y pdvales, arco minero, cadivi, etc. El expediente de Walid Makled (por colocar uno solo de la larga lista), ¿Por dónde andará el catire Ramírez? Perecen con el escándalo "Gorrin", la quiebra y saqueo de los activos de pdvsa, con todas sus implicaciones y protagonistas, teniendo como el hecho de mayores dimensiones en la historia de la presencia de la corrupción en Venezuela, con actores de distintos calibres en un sancocho cruzado de políticos y empresarios, unos con alta proyección en la vida nacional, y otros de oscuras proyección, y sin educación como unos ‘niches’ empresarios en El Tigre Anzoátegui contratistas de pdvsa con patios, y una flota de equipos, maquinarias, y equipos además de dólares como piedra que no se sabe como se multiplicaron esos panes, y que nadie investiga. Con una figuración internacional de propiedades en Miami, todos con la gracia no ocultada de las influencias gubernamentales, al alcance de los ojos de la opinión pública anzoatiguense cuando los ven desplazarse con escoltas civiles y militares, así manipulan a la inteligencia para asegurarse su impunidad. Son una "red sarnosa corrupta de cuidado diario".
¿Qué hacen en las listas de concejales 2018 aspirantes que en algún momento y por alguna razón han figurado en esas "redes sarnosas"?
Sabemos que en un organismo del estado venezolano hacen cola otras investigaciones; como la de la actual corrupción en las contrataciones en la faja petrolífera del Orinoco sobre el cadáver de pdvsa, donde participan los niches con sus lujosas camionetas que se exhiben por la ciudad sin una gota de barro en sus carrocerías, ahora. ¿Qué nos espera? ¿Qué pasará con el caso Gorrin? ¿Qué hay detrás del escándalo Pedro León en pdvsa? ¿Qué enlaces ha construido el bufete de los enanos, con estos casos nuevos con inmunidad, y que nadie investiga, que se han esmerado en colocar abogados en las alturas del poder político y financiero del Estado venezolano?
Veremos si el escándalo "Gorrin", desata un vendaval que abra la caja de pandora en el poder judicial. El destape dejaría ver casos putrefactos de corrupción que serian muy sonados a nivel internacional, que si no los engavetan, darían resultados sin desdén. Un vendaval sacudiría las estructuras del poder judicial, y el ministerio publico. El Fiscal General aparenta haber tomado el toro por los cachos imprimiéndole a la oficina el dinamismo, el celo, la responsabilidad que flaqueaban tiempos atrás, y cuya perspicacia de poeta se impone en corregir como lo ha hecho saber al tener el monopolio de la acción penal. Como ciudadano sigo preocupado por la marcha del reloj anticorrupción, y la violación de las leyes atacadas por la pereza. El Fiscal ha demostrado, una responsabilidad en apenas un año de haber asumido el cargo, ha hecho lo que en años, se dejó de hacer en el ministerio publico. Por algún lado debe comenzar la erradicación de estos capos criollos de la mafia. Si este estado de cosas no se corrige ya, entonces llegaremos a un muy peligroso punto de no retorno.
