"En qué parará la cosa, caballero, en qué parará, yo no sé, en qué parará, usted va a ver. Unos dicen que el café, otros dicen que el maíz…" Así comienza este popular merengue de Billo Frómeta, que viene al dedillo con la grave situación económica que hoy estamos viviendo las venezolanas y los venezolanos. Todos nos preguntamos: ¿En qué parará la cosa? ¿Esta cosa parará?...
Lo cierto del caso es que si la cosa sigue así, esta guerra económica puede llevarnos sin lugar a dudas a un estallido social de consecuencias impredecibles. Eso es lo que está propiciando la derecha nefasta nacional e internacional, al jugar con la paciencia y la resistencia de nuestro pueblo noble. Y la cosa se puede poner más fea, si no aceleramos las medidas y las leyes adecuadas para derrotar estos embates de la oligarquía en contra de los ciudadanos.
Ejemplo de estos desmanes, son los abusos cometidos por la empresa Super Líder en Aragua, que en las últimas semanas se ha dado a la tarea de condicionar las ventas de productos como la harina de maíz precocida, al consumo de más de 300 mil bolívares en los supermercados adscritos a esta cadena, incurriendo en los delitos de Alteración Fraudulenta de Precios (Art. 51), Usura (Art. 58), Vulneración a los Derechos Individuales (Art. 47), Desestabilización de la Economía (Art. 54) y violación del Margen Máximo de Ganancias (Art. 31) de acuerdo a lo establecido en la Ley Orgánica de Precios Justos. De ñapa están vendiendo las bolsas para empacar las compras, a mil bolívares cada una.
Es urgente que se tomen medidas… Algunas se han ido tomando pero no son suficientes… Nuestro llamado, como ciudadano de a pie, es entonces a los voceros de la Sundde en Aragua, para que se incrementen los operativos sancionatorios que den al traste con estos abusos. Es cierto que hay una guerra económica declarada de la oligarquía en contra del pueblo, y como en toda guerra hay vencedores y vencidos, se deben afinar las estrategias gubernamentales para que el pueblo resulte el vencedor y no el derrotado.
