En el INIA se gastaron cientos de millones de bolívares, en la construcción de laboratorios inservibles

¡Denuncia para la nueva Presidenta del Consejo Moral Republicano, Luisa Ortega Díaz!

Quién suscribe, junto a compañeros de TRABUCO, capítulo Aragua, considera propicia la ocasión para hacer una denuncia, a propósito del nuevo nombramiento de la Fiscal General de la República como Presidenta del Consejo Moral Republicano (CMR), entre cuyas funciones están las de prevenir, investigar y sancionar los hechos que atenten contra la ética pública y la moral administrativa, entendiendo éstas como los principios de honestidad, equidad, decoro, lealtad, vocación de servicio, disciplina, eficacia, responsabilidad, transparencia y pulcritud; así como el incumplimiento de la obligación que tienen los funcionarios públicos y obreros de los organismos públicos, de actuar dando preeminencia a los intereses del Estado por encima de los intereses de naturaleza particular. 

El caso que nos atañe es referente a un contrato firmado entre la República Bolivariana de Venezuela y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), según Contrato de Préstamo No 1359/OC-VE, que establece como ente ejecutor al Instituto de Investigaciones Agrícolas (INIA), dependencia adscrita al Ministerio del Poder Popular para la Agricultura y Tierras (MPPAT), en el cual se establece que este proyecto esta bajo la supervisión directa del Presidente del INIA y del Gerente de Programa de Tecnología Agropecuaria (PTA); los titulares para ese entonces están ya fuera de la Institución. Presuntamente se planificaron cientos de millones de bolívares y nos preguntamos: ¿su ejecución actual justifica este gasto? ¿A que obedece la demora en la ejecución y entrega de la obra?  

Existen documentaciones técnicas en las cuales se señala lo inapropiado de estos laboratorios, a los cuales para poder ejecutarse la mudanza deben hacerse remodelaciones, nuevamente preguntamos: ¿Lo ejecutado hasta el momento aguantaría una evaluación técnica?  

El contrato firmado por la República, estipula la construcción de un conglomerado de laboratorios en los cuales funcionaría lo que desde el 2003 llamado Sanidad Animal (SA). En efecto se ejecutó esta construcción, en el Campo Experimental del INIA-CENIAP, ubicado en los terrenos adyacentes de las Facultades de Veterinaria y Agronomía de la UCV, en la ciudad de Maracay, estado Aragua. 

Los laboratorios que actualmente están ubicados en el sector Las Delicias, contigua a la urbanización El Toro de Maracay, entre cuales están: Patología Porcina, Patología Aviar, Arbovirus, Virología General, Rabia,  Microbiología de Peces y Crustáceos, Control de Productos, Bacteriología General y Enfermedades Vesiculares, deberían de acuerdo al contrato firmado con el BID, hace rato haberse mudado a las nuevas instalaciones, hecho que no ha ocurrido y que bajo las condiciones actuales de la construcción no puede ocurrir. Presuntamente por ello el Estado venezolano está cancelando multas monetarias por no cumplir con lo estipulado en este contrato con el BID. 

El grave problema es que las edificaciones que se hicieron no cumplen con los mínimos requisitos técnicos y de bioseguridad requeridos, para llevar a cabo el traslado de estos laboratorios (equipos, reactivos, personal, animales de experimentación, etc.), considerando que son sede de diagnóstico e investigación de importantes patologías y zoonosis animales. Estas nuevas construcciones fueron hechas haciendo caso omiso a las reuniones sostenidas con el personal técnico de SA.  

Para ilustrar a nuestros incondicionales lectores de Aporrea, podemos señalar entre muchas cosas que se omitieron, las siguientes: 

*Construcción de un horno crematorio, indispensable para el procesamiento de cadáveres y otros residuos. 

*Tanque de almacenamiento de agua, que garantiza la disposición permanente del vital liquido. 

*Planta de aguas servidas y residuales, para evitar la contaminación del medio ambiente. 

*Adecuación del sistema eléctrico como única garantía para la preservación de materiales biológicos (cepas de virus, colonias bacterianas, células, entre otros), además de la conservación de vacunas en proceso de control de calidad. 

*Área con las condiciones para la disposición de desechos de alta peligrosidad que generan los laboratorios. 

*Galpones experimentales con dimensiones y niveles de Bioseguridad requeridos para el desarrollo de actividades de investigación, diagnóstico y control de biológicos, cuya disponibilidad es obligatoria para la ejecución de las tareas específicas, y la consecución de resultados confiables. 

Podemos continuar señalando omisiones que no se ejecutaron en tan importante obra, que van contra el erario público, y apoyan la impunidad, por todo lo mencionado, siguiendo las directrices del compañero Presidente, reiteramos una vez más distinguida Presidenta del CMR, que se investigue este contrato con el BID, y se castigue si hay hechos dolosos, ¡CAIGA QUIÉN CAIGA! 

elchilenodearagua@yahoo.com 



Esta nota ha sido leída aproximadamente 3840 veces.



Miguel Ángel Maregatti


Visite el perfil de Miguel Angel Maregatti para ver el listado de todos sus artículos en Aporrea.


Noticias Recientes: