Pueblo - Constituyente – Democracia

Antes de iniciar queremos aclarar que, por razón metodológica, estas 3 categorías las asumiremos por separado para facilitar su comprensión y sobre todo para demostrar cómo Chávez, se sustentó siempre en: -su decir fue el hacer-, tal como lo planteó el apóstol revolucionario cubano José Martí "el mejor decir es el hacer", pero este hacer, fundamentado en una ideología y epistemología que lo conducía en su acción transformadora. Nuestro propósito no es verlas por separado como simples conceptos, sino como categorías entrelazadas que se complementan, siendo a su vez interdependientes una de la otra, pues las tres son aristas de una misma realidad. Hoy desarrollamos la categoría Pueblo, como una primera entrega a compartir para el debate…

PUEBLO

Queremos comenzar lo que la academia nos enseña como concepto. En primer lugar, nos explica su origen, su raíz lingüística, en este caso la palabra –pueblo- proviene del griego demos y del latín Pópulo/Populi –pueblo-. Ahora bien, la Academia se sigue fundamentando de los conceptos-definiciones que dictamina en el mundo hispanohablante la Real Academia Española, donde se destacan dos definiciones, como habitantes de un espacio o territorio particular (Ciudad – Villa- Lugar - Región o País), otros dos, lo denominan población de menor categoría o gente común y humilde de una población.

Sin embargo, queremos mencionarlo como categoría para el cambio revolucionario, el pueblo oprimido y explotado, la lucha de clases -aporte hecho por Carlos Marx, y de esta manera comprender los procesos de lucha y democratización de la sociedad que tienen lugar en el presente así como recuperar el sentido en que Marx se refiere a los oprimidos y explotados, para pensar y resignificar lo que es en la actualidad la comunidad y los debates en torno al carácter comunitario de los movimientos sociales o a la naturaleza de las comunidades movilizadas como ocurre actualmente en Latinoamérica del siglo XXI.

George Ciccarello-Maher, autor del libro: Nosotros Creamos a Chávez, hace unas reflexiones sobre el pueblo, planteando que la historia de los movimientos sociales y revolucionarios latinoamericanos muestran con mayor precisión lo que simboliza el pueblo: El pueblo ha estado tomando como estandarte la disputa, son aquellos "comunes y humildes", lo que representa en América Latina una instancia de lucha y resistencia.

Fidel Castro en 1953, planteaba como -Pueblo- "si de lucha se trata". Otro aporte en esta misma línea de reflexión la hace el filósofo Enrique Dussel sobre el potencial radical incrustado dentro del concepto pueblo, Dussel insiste en que:

El pueblo no es un concepto de unidad, sino que establece una frontera o fractura interna en la comunidad política, y se levanta, como opuesto a las élites, a las oligarquías, a las clases dirigentes de un sistema político.

Para Dussel, el pueblo latinoamericano:

Es una categoría tanto de ruptura como de lucha, un momento de combate en el cual los oprimidos dentro del orden político dominante y los excluidos de este intervienen para transformar el sistema.

En Latinoamérica los pobres y oprimidos que constituyen el pueblo, ha sido una historia pasada y presente desde abajo, impulsada por las luchas y auto-organización del mismo pueblo, -una lucha por el pueblo para el pueblo-.

… la autoconciencia del pueblo" (el pueblo para-sí) que le permite devenir actor colectivo y constructor de la historia futura…

En Venezuela, el punto de referencia central de luchas sobre lo que significa el pueblo ha sido el Himno Nacional "¡Gloria al bravo pueblo!" – "¡seguid el ejemplo que Caracas dio!" y conseguimos elementos más radicales, como frases: "¡muera la opresión!" y "¡abajo cadenas!", son más que letras, como lo diría nuestro maestro Simón Rodríguez –"ideas, ideas… primero que letras", han servido y sirven para movilizar las voluntades y el espíritu, necesarios para la transformación radical del sistema político.

En esa misma línea de construcción epistémica de lo que es pueblo, Miguel Mazzeo, en su obra: Introducción al Poder Popular. Nos aporta elementos para seguir enriqueciendo y dilucidando la categoría Pueblo como sujeto histórico revolucionario, plantando que:

El Sujeto es un devenir social y geopolítico, siempre conflictivo e inevitablemente colectivo, que se crea, se reconoce y busca ser reconocido, que se da rostro en un lugar, en un campo práctico y perceptivo, como proceso, también como constructo, es un existir con otros, un coexistir, es causa y producto de su historia.

Nos dice también, que:

El Sujeto, para ponerse, crearse, reconocer y ser reconocido debe hablar en voz alta porque desde el silencio será imposible que se escuche su interpelación. No puede haber "posición" sin poder. La lucha por el reconocimiento así lo exige. El sujeto debe librar una lucha sin cuartel, es necesario de desprenderse de todas las mentiras y todas las máscaras.

Los oprimidos y explotados, para convertirse en sujeto histórico, no tiene más alternativa que crear las condiciones sociales, económicas, políticas, ideológicas y culturales que hagan posible esa conversión, hay que demostrarle a la otra conciencia que se es autoconciencia. Entonces, para el polo oprimido de la relación, el poder deviene necesario para hacer efectiva la realización a través del camino de la liberación trazado por los de abajo. El sujeto popular es para nosotros la forma, el sostén y propósito del proyecto emancipador.

Ahora bien, desarrollaremos la noción Pueblo asumida por el comandante Chávez: -Yo ya no soy yo. Yo soy un Pueblo-. -Chávez somos millones… A medida que avanzaba en su organización castrense para la insurrección militar (1982 – 1992), sus objetivos, en un principio, estaban limitados al ámbito castrense, pero fue avanzando en su concepción cívico-militar, se configuraba con mayor fuerza y con objetivos políticos trazados dentro de una estrategia insurreccional. Para Chávez, El PUEBLO fue siempre el sujeto revolucionario, para llevar a cabo la transformación demandada históricamente, como lo demuestran los documentos del Movimiento Bolivariano Revolucionario 200 (MBR-200), los cuales le dedicaremos los rastros que plasman la filosofía, las propuestas, los argumentos, y las estrategias a realizar, para iniciar un profundo proceso de cambios y transformaciones en la revolución nacionalista bolivariana y prontamente también socialista.

Para ello, nos fundamentamos en los documentos discutidos en su momento por el Movimiento Bolivariano para su posible ejecución si se tomaba el poder, como movimiento militar insurgente.

En el documento: PROGRAMA GENERAL Para el Nacimiento de una Nueva Venezuela. MBR-200, septiembre de 1991 encontramos líneas programáticas en la que resalta la participación del PUEBLO, se sustentaba en una auténtica recuperación de la soberanía nacional y democratización de la sociedad venezolana, basada en la participación real, en la toma de decisiones, conducción y administración del Estado. Al respecto plantean:

En el contenido sobre Poder Ejecutivo, plasman aportes dirigidos en el ejercicio del PUEBLO hecho gobierno como:

-. El Ejercicio de la soberanía nacional, le será devuelto a las comunidades organizadas a lo largo y ancho del país, para romper con el estilo ejecutivista y mesiánico del presidente.

-. Las comunidades organizadas en ejercicio de esa soberanía elegirán sus propias autoridades, elaborarán y jerarquizarán sus planes de desarrollo y bienestar, administrarán y controlarán sus presupuestos bajo un esquema realmente descentralizado que se instrumente a todos los niveles o instancias administrativas u organizativas que se crearen.

-. La represión será superada mediante la conciencia del ciudadano haciéndose participe y responsable del nuevo Estado, con objetivos claros y valederos que le permitirán satisfacer sus propias necesidades.

En la sección II dedicado a la -Materia Económica-, se recogen planteamientos que van dirigidos a la participación del pueblo, siendo:

-. Se reafirmará el papel del Estado, pero no como fin, sino como instrumento para promover la participación de la sociedad civil a través de sus organizaciones de base.

-. Se propenderá a profundizar las formas de propiedad colectivas y el establecimiento del control social del aparato productivo.

-. Se estimulará y dará impulso a las formas autogestionarias sociales… Esta forma de participación se considera como el factor clave y alternativo a los criterios de privatización y estatización.

En la sección IV -Consejo de Estado-, trazan lo siguiente:

-. Las formas comunitarias cooperativistas y hasta socialistas de producción serán especialmente tomadas en cuenta, pues por esas vías podremos en parte resolver el problema de las fuentes de trabajo, acrecentándose la fuerza soberana de nuestra nación, en la medida que se vayan haciendo autosuficiente en los renglones básicos que satisfagan las necesidades primarias de la población referidas a alimentación, vestido, vivienda, salud, educación, seguridad social y laboral, expansión espiritual y sano ambiente familiar y vecinal.

-. Todas las instituciones del Estado, incluyendo servicios y cultura, deberán ser sometidas a la discusión pública para que sea, en gran medida, la opinión social la determinante en el rumbo que tomarán esos entes, de tal modo que el estado administrador debe ir cediendo esas funciones a la propiedad social.

En 1993 en Yare, Chávez escribe un Mensaje Bolivariano titulado: El Comandante Chávez a la Nación. En este documento queremos destacar la hidalguía que Chávez asume al desmitificar lo que la derecha ha querido construir en crear el 04 de febrero como el "Mito Chávez", tratando de dejar al pueblo en un segundo orden, el comandante al contrario lo coloca en su justa dimensión –el sujeto revolucionario-, al respecto deja sus apreciaciones al señalar:

Estoy convencido que el pueblo venezolano nunca ha llegado a percibirme como tal. Las acciones de respaldo que hemos recibido de nuestros compatriotas, tienen su origen eminentemente racional, psicosocial. Pienso más bien, que algunos intelectuales del régimen y otros que, sin darse cuenta, le siguen el juego, han estado arrimando su brasa a un proceso para tratar de distorsionar la realidad colectiva en mito, como una forma de apagar la llama de rebeldía, que ahora lleva encendida el alma nacional.

Luego sentencia:

… en la sociedad venezolana de hoy radica el renacimiento de la esperanza en la mentalidad colectiva. El pueblo venezolano ha vuelto a descubrir que tiene derecho a soñar y más aún, que tiene la obligación de luchar por su sueño, regresa de esta manera a la mente nacional la idea de la utopía, es decir, de un país que comienza a existir en la imaginación del colectivo.

Y termina contundentemente al decir:

…y es precisamente aquí, donde la utopía se funde con el mito. Pero es un mito que no puede tener personificación concreta, sino que es expresión de la filosofía colectiva. Así que, en mi criterio, el único mito que está tomando forma en la psiquis del pueblo venezolano de fines del siglo XX es la prodigiosa invención de un país imaginario y posible; la creación de la utopía concreta que ya comenzó a motorizar las nuevas páginas de la historia venezolana.

Cierra citando una máxima camusiana: "yo me rebelo, luego nosotros somos".

En el pensamiento teórico y filosófico de Chávez recopilado en la obra: Habla el Comandante del historiador e investigador Agustín Muñoz (1998), existe una noción clara, precisa y profunda de quién es el que está llamado a hacer la revolución. Al respecto dice:

El pueblo es el que genera poder. Esto es un proceso que no se va a lograr en corto plazo, hay que luchar con ese poder que vigila, amenaza en todos lados. Es una lucha histórica que llevará meses, años, nadie puede decirlo. Pero ese es el camino, la llave del éxito, el pueblo. El pueblo es el combustible de la máquina de la historia. La estrategia que estamos definiendo es una línea estratégica de masas, si perdemos esta línea perdemos el norte.

Luego, en esa misma concepción afirma:

Sin la masa jamás hubiese sido posible derribar el imperio español". Y emplea una certeza de Simón Rodríguez: "La fuerza material está en la masa, la fuerza moral está en el movimiento". Chávez agrega a ello, lo siguiente: "Si no hay una fuerza organizada y en movimiento, en una dirección determinada por el colectivo, nada habremos hecho.

Un término que Chávez utiliza con obvia influencia marxista, es el de la ideología-movimiento. Al respecto plantea:

Creo que, sin una ideología, sin una inspiración doctrinaria, es como tener un cuerpo sin alma. La ideología es un sistema de ideas. Yo creo que uno de los elementos necesarios del sistema ideológico, es que debe ser capaz de motorizar, de mover fuerzas sociales, sino no hay ideología.

En esa noción pone énfasis en el carácter movilizador de conductas que ella debe tener: destaca el papel activo del sujeto social en la transformación de sus condiciones de vida, destacando:

Si ese grupo de ideas que tiene un campesino o ese pueblo o ese sector de la sociedad no mueve a ese hombre a la acción práctica, no motoriza un proceso de cambio y de transformación, no es ideología ni mucho menos revolucionaria.

Como pudimos ver, Chávez siempre exaltó al pueblo como el sujeto revolucionario histórico, actor a quien le corresponde a través del movimiento organizado, transformar su realidad, erigir el -Estado Comunal Socialista- COMUNA o nada…

Fuente - Libro: MÉTODO CHÁVEZ para la Emancipación Comunal



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Néstor Hugo Angulo Araque


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