“No hay soledad más triste y afligida que la de un hombre sin amigos, sin los cuales el mundo es desierto; el que es incapaz de amistad, más tiene de bestia que de hombre”. Francis Bacon. Nota que dedico con satisfacción inmensa al presidente saliente de los EE UU, el peor de la historia republicana en el neo imperio hitleriano siglo XXI.
Los manifestantes en gringolandia no son precisamente amigos de Trump, (a quien ya hay que ir olvidando sin dejar de dar a conocer sus salvajadas). Se trata de seguidores de las politiquerías trumpistas, activadas en cuatro años de desgracias ideológicas para la derecha, que en este 2021 está más maltrecha que nunca, especialmente la estadounidense.
Estos “demócratas” gringos y los venezolanos que aman a ese su amo, según las cuatro letras finales de ambas denominaciones, parecen tener conectado un “respirador de ideas lerdas” entre el cerebro y el lugar donde la espalda pierde su nombre. Los actuales trumpistas han tenido antecesores en Venezuela con parecida conducta política estrafalaria y declaraciones inoportunas nada edificantes.
Nos bastaría recordar a la verborrea insustancial pero hasta cierto punto atrayente que le hizo ser dos veces electo presidente de la república, Carlos Andrés Pérez, un sirviente efectivo de EE UU. En conversación telefónica con Carlos Ortega también adeísta y presidente de la CTV Confederación de Trabajadores de Venezuela, dominada por el sindicalerismo blanco, le manifestó desde Nueva York, donde finalmente enfermó y murió, que se necesitaban entre 100 mil y 200 mil muertos en Venezuela para salir de Chávez.
Sería cuestión de decirle a Mario Silva, Pérez Pirela, Carvajalino, Fidel Madroñero o Tania Díaz, que busquen y nos pongan en repetición esa grabación, para que la Venezuela siglo XXI se dé cuenta que el tachirense Pérez Rodríguez, hombre de la misma calaña que Donald Trump, cuando ahora afirmó que los 200 mil muertos en los USA por la pandemia, es una calamidad que no le distrae de los propósitos capitalistas exitosos de su gestión.
¿Usted se atreverá a darle respaldo a semejantes individuos y sus insensibles bestialidades políticas? Recuerde que, de los cinco años de esa gente a cargo de la Asamblea Nacional, no aprobaron ni media Ley de beneficio a los sectores populares. Hoy en el degredo y la angustia de ex diputados, además de reconocidos ladrones se tornan peligrosos traidores a la patria, a sabiendas que serán castigados legalmente tarde que temprano. By by despreciables trumpistas.
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