—¿Qué es eso de DDHH en la ONU?
Que he visto al chofer bailar en una sola pata de contento porque Venezuela entró a eso de DDHH.
¿A qué se refieren con esa cosa?
—Yo supongo que eso es parte de la Misión Carapacho.
—Ya va, usted torció el camino compa.
Primero, dígame qué es eso de la Misión Carapacho y luego me explica ¿qué relación tiene que ver eso con lo que yo le estoy preguntando?
—La Misión Carapacho es la misión que han aplicado los chavistas en estos seis o siete años de infamia que tienen en el poder.
Entiéndase que la Misión carapacho es dejarnos en el hueso, en el puro carapacho.
Usted no ha visto que la gente llega al mercado y pide me das dos carapachos o se lo venden bien caro por kilo.
—Lo he visto.
—Bueno, en estos siete años de gobierno revolucionario hemos quedado en el carapacho, en el hueso pelao.
Esa es la Misión Carapacho, matarlo a uno de hambre.
Pellejo y hueso, más ná.
—Esa sé la entiendo.
¿Y qué tiene que ver la Misión Carapacho con los DDHH?
Porque yo no sé a qué se refieren con eso de DDHH.
—Yo tampoco lo tengo muy claro porque que facurto del tema no soy.
Pero por el contexto estoy seguro de que eso de DDHH debe ser algo así como Derechos a las Hambres o Derechos a pasar Hambres.
Digámoslo de esta manera Derechos a la Hambrazón.
Porque hasta donde me recuerdo cuando hay dos letras repetidas es porque es en plural la cosa.
—Así está un poco más clara la guarandinga.
Y deben de ir los tiros por ahí.
Porque aquí lo que hay es hambre pareja; un pancito, un campesino ya está en 20 mil sober-anos.
Y con el nuevo aumento no lo veo a menos de 80 mil para abrir el mes de noviembre.
Un pan de jamón no debe bajar del millón, se lo irá a comer la mamá de Tarzán.
Y cómo habrá entrado Venezuela a eso de los Derechos a las Hambres en la ONU.
—Debe ser algún reconocimiento por el éxito que ha tenido la Misión Carapacho.
—Tiene que ser.
No se le ve otra razón.
Poner a pasar hambre a un país es una tarea que debe recompensarse.
—Un ejemplo del éxito de la Misión Carapacho tiene a la pobre maestra, Dios la tenga en su gloria, que murió de desnutrición en el Zulia.
—Así me enteré. ¡Dios bendito!
Cómo estarán los alumnos.
—Yo imagino que por eso le han dado el reconocimiento a este gobierno hampocrático de ingresar a los Derechos al Hambre en la ONU.
Bien lo tiene merecido.
Por allí están los chavistas que se les salen las babas de emocionados porque los metieron ahí.
Con cualquier reconocimiento se derriten, la propia mantequilla en paila caliente.
—Ya aclarado ese asunto de lo que es los DDHH.
Vamos a dejarlo hasta aquí, le parece.
—Sí, estoy de acuerdo.
No hay que gastar mucha saliva porque más adelante puede hacer falta.
Ya que la masa no está pa’ bollo.
Qué la pase bien en lo que pueda.
Nos vemos lueguito.
Y le dijo: Por ahora, apriete.
