El sorprendente señor Sacramento

*La oposición más dividida que una torta de pobre.

*Pompeo no es tan pendejo como lo ven aquí

*Maduro Diosdado en la lista negra de los gringos.

*La izquierda no se divide porque temen que los llamen traidores.

Tenía tiempo que no veía al señor Sacramento. Por lo tanto teníamos ese mismo tiempo en el cual no hablábamos de política. Él era. O es, mejor dicho, quien me pone al día, respecto al acontecer político de mi país. Ese día me lo encontré y de inmediato lo invité a tomarnos un cafecito. "Cómo está la familia, don Sacra", le dije como para abrir los fuegos. "Esa gente está como siempre, echando vaina", me respondió. Y hablando de vaina, don Sacra, porque no me pone al día sobre los acontecimientos. Usted sabe que me alejé un poco de la barahúnda cotidianidad para reflexionar. Fue lo que necesité para poner en "on" al viejo.

Arrancó diciéndome que él no comprendía lo que estaba pasando en el seno de la oposición venezolana. "Mira, mijo, esa gente está más perdida que el hijo de Lindbergh. Allí, después que Guaidó se erigió como el máximo jefe de la oposición, cunde la desorientación. No se sabe quién es quién. Pero todos, como borregos hacen lo que dice este señor. Él acabó con el viejo liderazgo de Ramos Allup, e implantó una "dictadura". Capriles quedó para cargarle el maletín, y mandó a la cola a María Corina, Nuevo Tiempo y Avanzada Progresista. El resto no cuenta".

"¿Quién manda, entonces, don Sacra?" "¿Guaidó es el mandamás?". "Ni siquiera él es quien manda. A él lo mandan, desde Washington D.C. Mire, joven, hace poco este señor que llaman Pompeo, dijo que él abogaba por la unidad de la oposición, pero que allí habían muchos gallos para una sola gallina. Más de 40 estaban anotados para ser el candidato presidencial, si llegara la ocasión. Esa silla, compañero, es sumamente amada. Es un imán. Atrae a toda viruta, por mala que sea. Todos quieren quitar a Maduro, para montarse ellos, o mejor dicho, el elegido por el Dios Pompeo. Que parece tonto, pero pendejo no es. Se reúne con el canciller ruso Lavrov, con el francés o el mexicano, o con quien sea, pero con los ojos puestos en Venezuela. Ese es su objetivo, por mandato de Trump. Lo cierto de todo es que Guaidó no mueve un dedo sin recibir una llamada de Pompeo. Así estamos en mi país, en tu país, en nuestro país".

"Don Sacra, y ¿qué pasa del otro lado?". Para mí no pasa nada nuevo. El mismo barco atravesando el rio. Maduro, defendiéndose como gato boca arriba. Pero, mantiene la unidad dentro las filas revolucionarias. Aunque, muchos piensan que la unidad se mantiene porque ningún grupo o partido quiere que se le tilde de traidor por la fracturan del PSUV o el Polo Patriótico. La derecha nacional e internacional no ha podido romper esa "piedra", a pesar de los intentos de sembrar cizaña entre Maduro y Diosdado. Por cierto, estos dos personajes son el dolor de cabeza para Trump y su pandilla. Ellos quisieran ver muertos a estos dos líderes, por eso lo mantienen en su lista negra. Añado, para terminar mi relato, que Maduro mandó a abrir la frontera. A mi modo de ver las cosas, se precipitó. Ese cierre tenía que haberlo llevado más lejos, pero una cosa piensa el burro y otra cosa quien lo arrea… Amanecerá y veremos".

Villahermosa, México, 10 de junio del 2019.



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Teófilo Santaella

Periodista, egresado de la UCV. Militar en situación de retiro. Ex prisionero de la Isla del Burro, en la década de los 60.

 teofilo_santaella@yahoo.com

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