El FBI, el asesinato de Maduro y el juicio de los adormilados

Hace solo un mes (o menos) Nicolás Maduro invitó al FBI a Venezuela para que sirviera de “investigador imparcial” del atentado, bautizado con el eufemismo de homicidio en grado de frustración, un poco para estar a la par de Chávez que lo mataron en grado fulminante

Hay en las “explicaciones”, en las pruebas y evidencias materiales, un componente de engaño altísimo, digamos que se trata de la doble intención de querer mostrar un hecho y disimular otro, el cual es (este último) el verdadero sentido de las cosas; en nuestro caso, de las acciones. ¿Qué persigue Maduro con una investigación científica imparcial e internacional sobre el atentado? Parece que la verdadera intención es hacer que la opinión internacional voltee la cara hacia un hecho que el mundo entero relativamente ignoró por completo, quizá por lo caricaturesco de sus detalles. No importa si ese atentado fue real o no, lo que llama la atención es que en ese momento de la visita del presidente a la ONU, ya el asunto estaba casi cancelado. Por eso ahora nos importa el porqué de ese insistente interés para que el mundo desvíe su atención hacia el atentado, frustrado, ya pasado, con presos y todo, con autores intelectuales, financistas y de más.

La visita de Maduro a la ONU  significó un paquete completo: 1.- declarar que Maduro, presidente de Venezuela, estaba dispuesto a reunirse con Trump y a “estrecharle la mano”; dos, declarar la necesidad de que se investigara el atentado, debido a que lo señala el estigma del fraude político; y tres, meter al FBI de cabeza en nuestro país (curiosamente después de alardear tanto de patriotismo, defensa de la soberanía, y  a pesar de la vociferada objetividad y eficiencia de los investigadores del SEBIN y el CICPC). Hay que hacer notar el hecho que en ese momento, en Nueva York, Maduro estuvo obnubilado, inflado su ego, de tantas adulaciones y falsas emociones….

El 11 de este mes (Octubre) Maduro declara que Estados Unidos ordenó a Colombia asesinarlo, “Han dado la orden desde la Casa Blanca de matar a Maduro y le han dado la tarea a la oligarquía bogotana ¡Ni un pelo me van tocar! porque a mí me protege Dios y el pueblo de Venezuela” Como lo dice Eva Golinger, este señor, junto a Trump, es un ser disfuncional (definitivamente) ¿Cómo se entiende esto? Hasta dónde yo sé, los trabajos de inteligencia política y policial llevan su tiempo. En menos de un mes no pudo descubrirse otra conspiración, esta vez internacional (¡ni a Bolívar!), contra Maduro, como para que ahora, otra vez, el sueño de hace ratico, de dialogar con Trump (el viejo camarada Trump), se convierta ahora, de nuevo, en la pesadilla de siempre, ¡Oootra vez!... ¡debe ser mentira!

Los más cándidos, los que le creen todo al gobierno (por ejemplo: el asignado a Toby, el asignado a Rafael Ramírez, el otro que dice que Maduro no le paga por escribir) dirán “Y pensar que Maduro invitó al FBI a venir a Venezuela…¡Uf! menos mal que todo quedó así, que nadie insistió mucho en eso,  porque si no… ¡vienen y  lo matan!” (¡Uf!, decimos nosotros)

Los adormilados deberían preguntarse esto ¿Cuál es el interés de Maduro por reunirse y dialogar con un gobierno que lo quiere matar? ¿No les parece esto raro? De seguro que alguien muy suspicaz dirá “¡Qué tonto este escribidor! ¡Ni pendejo que viene ahora!”… que ahora ¡ni de vaina el presidente que se reúne con Trump! Pero no pasarán treinta días o menos para que Maduro, con la dignidad que lo caracteriza, solicite (de forma casual, como quién no quiso) otra entrevista con el “camarada asesino ” Donald Trump. Ya se reunieron con un senador, ya están sintiendo el bulto…

Maduro y su “petit comité”, y sus “leales”, necesitan ser reconocidos por el imperio como representantes legítimos de su pueblo (¡como gobierno pues!), y para eso no escatimarán en venderlo todo, su país y su alma al diablo. Cuando decimos que se trata del gobierno en pequeñito (o sea, de los orgullosos sancionados) es, porque en el gobierno en sentido amplio, todo lo demás –que no sean ellos- es sacrificable ¡Qué eso para para Maduro! La lealtad, según la interpreta Diosdado Cabello de Chávez, es con el gobierno y con Maduro, con más nadie y con más nada. El pueblo no existe, se ha sublimado en Maduro; las ideas y los principios también, se han transfigurados en Maduro (lo que de ser cierto sería una desgracia para todos, peor que  el Apocalipsis; el más terrible de los desengaños). Afortunadamente no es cierto, se trata de gente “disfuncional” viviendo su crisis, deseando cosas imposibles, confundiendo la lealtad con el chantaje y la extorsión.

Lo terrible de este flirteo de Maduro con Trump es que se lleva por el medio a la revolución y al país. Maduro cree que todo se trata de explicarle y mostrarle “pruebas” a Trump de que la oposición lo quiso matar, y que ya están “abriendo la economía” al control de los privados; que ya los empresarios hablan maravillas del plan de descentralización del país, el cual será partido en seis pedazos, para su fácil consumo (falsificando a Chávez, cediendo a los lobos capitalistas, disfrazados de inocentes ovejitas, la riqueza que nos pertenece a todos como sociedad, para que ¡Ooootra vez se roben todo!... Y así vendrá oootro plan de rerectificación y bonanza, con el mismo relleno dentro, pero con otro nombre más largo y más rimbombante).

Pero no es así, Maduro entrega la revolución y Trump quiere más, pide tener con él coincidencias absolutas, elecciones donde no intervenga ni compita él; que su “camarada Maduro” entregue el poder a un gobierno “democrático”, totalmente dócil y menos ambicioso… por eso decimos, ¡Adormilados!, ¡bienaventurados seáis, porque vosotros os quedareis dormidos!,  y la realidad los acobijará…, pero decimos también, ¡Viva Chávez! ¡Fuera Maduro del gobierno ahora, porque más tarde es tarde! Es preferible que luchemos ahora unidos por el socialismo, enfrentando a esta derecha endógena,  a que nos cojan luego, dormidos y divididos,  el mismo imperio y todas las derechas (la derecha de izquierda y la derecha de derecha).



Esta nota ha sido leída aproximadamente 1873 veces.



Marcos Luna

Dibujante, ex militante de izquierda, ahora chavista

 marcosluna1818@gmail.com

Visite el perfil de Marcos Luna para ver el listado de todos sus artículos en Aporrea.


Noticias Recientes:

Comparte en las redes sociales


Síguenos en Facebook y Twitter



Marcos Luna

Marcos Luna

Más artículos de este autor