Hablando claro

Engaño y muerte a los viejitos

Démosle gracias a Dios que más de tres millones de "viejitos" están cobrando su pensión de vejez. No es fácil llegar a la primera esquina, llegar a 60 y pasar hacia la otra vuelta. La gran mayoría por haber cumplido con sus 750 semanas echándole bola; otros que han salido sin haber movido una paja pero que se la merecen como venezolanos. Otros por el "amor mayor"; y unos cuantos que se bajaron de la mula hasta sin tener la edad y cobran su "pelotica". Con estos últimos unos mafiosos se lucraron, pero qué carajo, al fin y al cabo, todos se lo merecen.

Pero así como le han echado bola para llegar a los 60 trabajando duro, así de fácil le están arrancando media vida a los que dieron todo por nosotros. Cada mes es una tragedia, una desgracia, un despelote. Ya la vaina está llegando al llegadero. Los pensionados están siendo mal tratados, humillados, burlados. Les están dando con las patas y eso a la postre tendrá su castigo.

Cada día la cosa se torna más grave; grave no, gravísima. Se ha perdido el control, no hay organización. No hay quien ponga orden y asome una idea o una alternativa para solucionar este problema que se ha escapado de las manos. Da lástima, da tristeza, da arrechera ver cómo estos mayores sufren desde el día anterior a la fecha de pago a las puertas de un banco con hambre, pasando sueño, durmiendo en el suelo, sucios, con la esperanza de que a la hora de costumbre estén por lo menos cerca, pero se les irrespeta. No los consideran como seres humanos. Se les engaña; y lo peor, la muerte les ha llegado en la cola.

Engañados y burlados como inocentes creyeron que les decían la verdad. Este mes fue el colmo de los colmos. No se puede ser tan crueles, tan embusteros e irresponsables, para mentirles en la cara a más de tres millones de hombres y mujeres. No pudo ser peor la burla.

Hasta yo lo creí como un mismo bolsa. Leía y leía la noticia de que el martes 20 los bancos atenderían a los pensionados desde las 7 am., hasta las 6 pm., en operativo especial. ¡Qué canallada! Fue uno de los peores días. Se confiaron y esperaban que en ese lapso de tiempo tendrían su pago completo. No fue así. Fue una vulgar mentira.

Dirán que porqué carajo yo escribo tanta paja. Pues, quien tenga un corazón que no sea de piedra o que por las venas no le corra agua sino sangre, le arrecha ver cómo seres humanos humildes, necesitados, cansados, agotados se les engañe en su propia trompa.

Fue cuando menos trabajaron los bancos. No abrieron a las 7 sino a las 9 como una provocación. No cerraron a las 6 sino a las 3 y 30 como siempre. Desmayados, graves, tensión baja, muertos de hambre era lo que se veía. Cientos de señores durmiendo en las aceras y de allí muchos fueron a parar las patas a un hospital. Deshidratados, enfermos, hasta se habla de un muerto que no ha sido confirmado.

Como la experiencia del martes y miércoles fue horrorosa, entonces hay que buscar una alternativa. No pueden permanecer más de 3 millones de mayores en las puertas de los bancos en un solo día y además engañados y burlados. Entonces, a partir del próximo mes prográmese el pago de un lunes al viernes por el número de cédula de dos en dos. Así cobrarán aproximadamente 600 mil "viejitos" por día hasta que se haga costumbre.

Pido por el amor a Dios, no se siga engañando y "matando" a los pensionados. No los maltraten, respétenlos, considérenlos. Acuérdense que todos van para allá. Ojalá que lleguen a esa edad los engañadores y maltratadores de hoy y que no pasen por lo mismo. Dios le tendrá reservado su castigo.



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Pedro Alfonzo Rojas

Antiaco, columnista, premio regional de periodismo de opinión 2016, telegrafista, tipista, montador, diagramador, coordinador, gerente de producción, editor de noticias TV; y sobreviviente de las violaciones de derechos humanos y laborales en gobierno de AD.

 pedrorojas56@hotmail.eso

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