" …mis últimos votos son por la felicidad de la patria. Si mi muerte contribuye a que cesen los partidos y se consolide la unión, yo bajare tranquilo al sepulcro". (subrayado mío)
Simón Bolívar
Bolívar, así como Chávez, consciente como estaba que su paso por este plano terrenal tendría consecuencias que lo harían inmortal, conservo para su último aliento de vida, la oportunidad para trazarle a su pueblo, de manera clara, firme, plena como la luna llena, irrevocable, absoluta, total, el rumbo que en los siglos por venir debía tomar su amada patria, para de esta forma evitar que todo aquello por lo que luchó no quedara en vano. Esta, su última frase lanzada su lecho de muerte, es su obra maestra, pues resume a su mínima expresión todo su extenso pensamiento político. La última proclama del Libertador no requiere ni permite interpretaciones, ella es su mayor legado. No existen dudas que para Bolívar la eliminación de los partidos políticos, es una condición que permitiría la unión de todos los venezolanos y lograr a través de la unión hacernos invencibles, no solo de los enemigos internos y externos sino también de nosotros mismos y nuestros propios errores.
Bolívar es la mente política más lucida que ha dado la humanidad. ¿Alguien tiene alguna duda de eso? El humanismo intrínseco en el Bolivarianismo como ideología política, la hace por mucho ser más adelantada que cualquier otra ideología, incluyendo (principalmente) al muy pregonado y para nada practicado Socialismo de Marx, para quien por cierto, Bolívar no fue más que un "canalla, brutal y miserable".
Es bien sabido que con la identificación de las contradicciones dentro del proceso de cambios de la sociedad venezolana, se permite en la medida que se superen, avanzar en la resolución de los problemas que históricamente le aquejan. La fundación del PSUV es contrario al pensamiento del Padre Libertador y es por mucho, la principal contradicción que el proceso de cambios sociales llamado Revolución Bolivariana, carga como un grillete atado con una cadena a una bola de acero.
Con la aprobación de la Constitución en el año de 1999, la sociedad venezolana dio un salto cualitativo y cuantitativo al asumir con absoluta madures política, la refundación de la república basada en los ideales Bolivarianos, se rescataría la patria que feneció por culpa de la "partidocracia" de AD y COPEI y sus cúpulas podridas. Venezuela, al igual que la gran mayoría de países "democráticos", padecía de un bipartidismo clásico, el mismo que en el cual de manera inexorable, caen todas las democracias cuando están en su etapa decadente. Con la Revolución Bolivariana, se desarrollaría una nueva forma de hacer política nunca antes vista en el mundo, que sirvió (durante un corto tiempo) de ejemplo a toda la humanidad que buscaba al igual que ahora, una alternativa a la democracia de los partidos políticos. Nacía en ese entonces la llamada Democracia Participativa y Protagónica.
De manera coherente con el pensamiento político de Bolívar, con esta nueva forma de conducir los destinos de un país nunca antes vista, la humanidad conocería una forma más avanzada y superior de organización política de la sociedad, cuya principal característica era que no requería de los partidos políticos. Seria pues a través de la organización de las bases sociales que de manera consiente se unirían coyunturalmente a un "Movimiento", cuyo fin seria meramente electoral. Así la sociedad Venezolana logro acceder al Poder y aun mas, refundar nuevamente la Patria. La fundación del Partido Socialista Unido de Venezuela en el año 2008, impulsado vehementemente por el propio Chávez, represento para la sociedad venezolana, un retroceso que la coloco en la misma posición en que se encontraba en el año 1999 antes de su refundación y un error histórico que de no ser corregido pudiera costarle 200 años más de luchas y desvaríos.
Recuerdo claramente que Chávez anunció su intención de fundar un partido político. Fue al llegar de un viaje que hizo a la hermana Cuba, realizado poco después de la victoria electoral de 2006. Lo recuerdo claramente, por que fue la primera vez que disentí con el políticamente, me resulto un golpe muy fuerte del cual nunca podré recuperarme, causado por ver como el comandante echaba por tierra el camino andado y entraba en franca contradicción con su propio discurso político, y lo peor, con la doctrina Bolivariana en la cual está fundada nuestra República. En ese instante inolvidable, me encontraba frente al televisor, viendo a través de Venezolana de Televisión la cobertura de un encuentro organizado por el Centro Internacional Miranda, en el cual participaban intelectuales del mundo entero que se encontraban en Venezuela, analizando el inédito proceso político de Venezuela, por ser único, novedoso y un verdadero ejemplo de una Revolución Pacífica y sin partidos políticos. Esa tesis se fortalecía pues se acababa de relegitimar a través de unas elecciones libres. Los asistentes a este evento, soñaban con replicar este ejemplo en sus lugares de origen, para encauzar a las fuerzas sociales que como todos sabemos, sienten un rechazo casi natural por los partidos y "los políticos". Fue algo muy evidente que ese anuncio causo una verdadera conmoción para todos los participantes de dicho evento, tanto que algunos manifestaron de manera inmediata no estar de acuerdo con esa decisión. Uno de ellos fue Juan Carlos Monedero, a quien entrevistaron apenas realizado este anuncio.
A partir de ese momento todo cambió, el nombre del proceso político venezolano ya no sería la Democracia Participativa y Protagónica tal como está establecido en nuestra Constitución Bolivariana y se pasó a llamar el Socialismo del Siglo XXI. Fueron impuestos por Chávez, los llamados "5 motores constituyentes de la Revolución Bolivariana hacia el Socialismo del Siglo XXI", siendo que el comandante nunca menciono su intención de prender dichos motores en la campaña para las presidenciales recién realizada. Las contradicciones a lo interno (y externo) del proceso, comenzaron a hacerse cada vez más evidentes y comunes. Como un ejemplo de la magnitud del cambio y la deriva del pensamiento político del comandante Chávez por esos días, transcribo e incorporo a este escrito, un extracto de un artículo de aporrea que es una foto del momento político de ese momento, lleno de incertidumbre e imprecisiones, que fue escrito por Maripilli Hernández en el año 2006, y publicado por Aporrea poco antes de las elecciones presidenciales de ese año y del anuncio de la creación del PSUV.
Escribió Mari Pili:
"EL SOCIALISMO DEL SIGLO XXI NO ES MARXISTA
No sé cuántas veces tendrá Chávez que repetir lo mismo. Lo está diciendo desde el año 2003. Lo ha dicho claramente en varias alocuciones, discursos y programas de televisión "este no es un proyecto marxista, yo tengo muchos amigos marxistas, pero este no es un proyecto marxista" (Aló Presidente, 2-10-2005). Pero incluso, se lo ha declarado a los periodistas en entrevistas y ruedas de prensa. "Yo no soy comunista, no tendría ningún empacho en decirlo. Si yo tuviera un proyecto marxista para Venezuela lo hubiese dicho desde el primer día en que salí a la palestra política. Así que no soy marxista, tengo aproximaciones al pensamiento socialista y progresista, pero no soy marxista" (Entrevista hecha por Lucía Newman, corresponsal de CNN, 18 de Agosto de 2004).
Por si acaso, lo volvió a repetir en la rueda de prensa ofrecida en Miraflores, el día que lo acreditaron como Presidente Electo. Pero claro, esto no es publicitado por los medios de comunicación, porque muchos de ellos funcionan como agencias de campaña sucia del antichavismo, y necesitan producir temor en la gente, por tanto, cualquier cosa que pueda disminuir o disipar ese miedo es censurada o simplemente obviada.
SOCIALISMO BOLIVARIANO
Teniendo claro que socialismo no es sinónimo de marxismo y que además Chávez ha aclarado hasta la obstinación que él no es marxista ni tiene un proyecto marxista para Venezuela, vale recordar que la primera vez que el Presidente calificó a la revolución venezolana como socialista (25-2-2005), estaba dando un discurso extraordinario (por cierto, de los mejores que le he escuchado en mi vida) en el cual, documentos en mano, desentrañaba en su condición de profesor de historia de Venezuela, el pensamiento del Libertador en temas sociales.
Chávez tomó los decretos de Simón Bolívar después de la independencia sobre educación, propiedad de la tierra, salud y uso de los bienes comunes, y leyéndolos desentrañaba lo que el Padre de la Patria nos heredó como proyecto de nación. Ciertamente, tal y como concluyó Chávez en ese discurso, Bolívar era un socialista.
Por tanto, para definir el Socialismo del Siglo XXI no hay que buscar en el pensamiento europeo, sino en el latinoamericano y, más específicamente, en el bolivariano."
www.aporrea.org/ideologia/a28332.html
Para esos días de la puesta en escena del PSUV, el Movimiento V República, con el cual Chávez acababa de ganar nuevamente unas elecciones, fue la fórmula inédita que la población venezolana compro del comandante Chávez. Este mantenía una coherencia con el discurso y la realidad política del momento histórico. Tengo la absoluta certeza que la decisión del comandante de fundar un partido y disolver el Movimiento de Masas llamado Quinta República, se debió a las diferencias que surgieran con Luis Miquilena a quien le llamaba cariñosamente "su padre", asi como a los consejos de Fidel Castro quien lo adopto como a un "hijo" y a quien también llamo "su Padre". No debemos mitificar la figura del Comandante, debemos recordar que nuestro amado Chávez también fue un ser humano y cometió errores, algunos muy difíciles de entender.
En el día de hoy, la historia se repite, estamos como dije antes (salvando las diferencias) en la misma posición que 1999 y gozamos de un Bipartidismo, propio de una robusta democracia decadente. Por un lado esta un partido impulsado de manera descarada y utilizando todas ventajas que da detentar el poder sin ningún control y por el otro, otro partido más parecido a un saco de gatos, que en vez de hacer oposición, sabotea esperando su turno en la caja de bateo para hacer lo mismo. En ambos casos, no se respeta a la militancia, a la cual nadie consulta para nada en la toma de decisiones, rebajándolos a simples números que utilizan a su antojo, ni siquiera para la escogencia de sus candidatos, en contra de lo establecido en la propia Constitución y del más elemental sentido común, ellos solo reciben y deben cumplir sin chistar so éna de ser señalados "líneas que bajan desde Caracas".
Ahora bien la razón de este articulo y su llamativo título, es para hacerles un llamado de atención a quien o quienes desde la cúpula (podrida) del PSUV, decidieron sacarles un carnet a sus "militantes", tal como lo hicieron los partidos cuartorepublicanos, siendo que tienen todo el derecho de hacer con su partido lo que les dé la gana ( con sus militantes no aunque ellos se dejen), pero no tienen ningún derecho de utilizar la figura del Libertador Simón Bolívar, el verdadero Padre de esta Patria llamada Venezuela. Es detestable y debería ser un delito en este país Bolivariano, hacer uso politiquero y partidista de la figura de Bolívar, a quienes estos señores, en una explosión de sabiduría típica de la "viveza criolla", la misma que utilizan para robarse el dinero del pueblo, tomaron la muy lamentable e infeliz decisión, para colocar a Bolívar en ese carnet, lo cual resulta un verdadera falta de respeto al Libertador, un insulto a su sagrada memoria y una afrenta a quienes lo amamos y honramos con el debido respeto.
Por eso rechazo con la mayor de las indignaciones y exijo de la manera más enérgica, que esa ignominia realizada a su legado sea corregida, aún a sabiendas que este llamado a la reflexión a quienes se tomaron a la ligera semejante desatino político, hagan como están acostumbrados caso omiso a las críticas, constructivas que les hacen.
Es una tarea ineludible de la actual Asamblea Nacional Constituyente, legislar para evitar que cualquier partido político quiera hacer uso de la figura y obra de nuestro padre libertador, toda vez que cada vez que utilizan la figura del libertador para los fines politiqueros de un "partido", lo que hacen es ofender de la peor manera, la memoria del padre libertador.
Por ser Bolivariano por convicción, no milito ni creo en la figura de los partidos políticos. Está comprobado hasta la saciedad que esa figura solo derivará en una estructura piramidal con decisiones inconsultas, clientelar, corrupta y divisionista de la sociedad como un todo. Sin embargo, consiente del momento histórico del papel que en la juega el PSUV en la diatriba política, siempre he estado a la vanguardia de las batallas que juntos hemos dado tanto, en las calles como en la urnas electorales y seguro estoy de haber hecho más por ese partido, que muchos de sus "militantes" y dirigentes. Incontables horas de trabajo voluntario y sin ningún reconocimiento y de incontables luchas muchas veces a solas rodeado de opositores, me permiten hacer esta afirmación y mantenerme con mi conciencia tranquila con mi patria, al saberme que le fui útil en el momento que más lo requirió de mí. El rechazo a estas estructuras es bien sabido por todos los pueblos del mundo, por eso saludo el intento de corregir ese "entuerto", con la creación del Movimiento Somos Venezuela, al cual comenzaré a seguir con la esperanza que retome el curso original y Bolivariano de la Revolución, a pesar que desde ya observo algunas desviaciones que espero sean corregidas en el futuro inmediato.
A través de este escrito no pretendo más que contribuir con humildad, con la búsqueda de la felicidad de la patria, haciendo práctico el pensamiento bolivariano como única forma posible que tenemos para conseguirla, manteniendo una conducta recta coherente con el legado histórico del padre Libertador, permitiéndole así al tiempo hacer los prodigios consecuentes, conseguir la anhelada unión de todos los venezolanos y hacernos invencibles cuando más lo necesitamos y al fin dejar que el alma de nuestro padre Libertador, que aun deambula en pena, pueda como merece definitivamente descansar en paz.
Abg.
Egresado de la Universidad Bolivariana de Venezuela