La paciencia tiene límites

Qué ocurre con los precios acordados

Cerca de cinco semanas cumple el acuerdo sobre precios acordados entre empresarios y gobierno que incluyó cuatro rubros, y no se sabe absolutamente nada, hice gala del tiempo esperando alguna respuesta y decisión, no obtuve información por las vías consultadas, no hay respuesta, ni el Ministro de Economía y Finanzas, o algún vocero autorizado. Mientras esto ocurría los precios continúan la escala ascendente, mientras el poder adquisitivo va en picada acelerada.

Como sabemos no hay ninguna justificación económica valida por vía de costos o demanda, por ello, se entiende el ataque a la economía es despiadado, eso igualmente lo sabemos, el asunto está entonces al parecer en manos de la Sundee, preguntamos. Podría decirse que sus actuaciones lejos de producir algún efecto, miramos con estupor como por ejemplo la carne y el pollo, productos de charcutería, de limpieza del hogar y personal, los cachitos, pastelitos, el café servido, en polvo, la leche que ahora la llaman "bebida láctea", chucherías, artículos para la escuela, uniformes, cigarrillos, pasta de dientes, medicamentos, etc, etc, siguen aumentando y el tiempo pasa y se dirigen hacia la temporada navideña cual tren en desbandada

Todo ello, aunado al bloqueo económico y financiero impuesto por EEUU y aliados en todo el mundo, supone que estamos en presencia de la peor decisión que hay en la economía que es "No tomar ninguna decisión", podemos imaginar, no tenemos información dada que nos permita evaluar profesional y científicamente lo que nos permite imaginar que está pasando.

Se me ocurren en ese ejercicio dos situaciones si se quiere contradictorias, pero así es la imaginación cuando no hay comunicación, ni decisiones puntuales, por una parte, una especie de miedo, y la otra falta de precisiones sobre la toma de decisiones y si esto es de esta manera, estamos ante una situación realmente que nos conlleva a pensar además la falta de conocimiento en el manejo acertado de las decisiones a tomar.

En verdad les digo que me duele mucho escribir esto, soy un firme defensor de la Revolución Bolivariana, chavista, antiimperialista, para que no me vengan a decir lo contrario, el caso es que en mi discurso como economista siempre he tratado de ir más allá de lo estrictamente académico y con profundo contenido didáctico, por ello, la critica mal entendida es distorsionada a priori, me disculpan que hable en primera persona, he estado objetado en VTV, mi programa de radio en Radio del Sur lo dedico a descifrar lo económico desde todos los ángulos, mi propuesta ante toda esta circunstancia sigue siendo la congelación de precios a fecha determinada, por rubros y con el estudio correspondiente de los costos y parto de lo siguiente: los que nos tienen es una guerra y debemos responder en circunstancias de guerra, no es posible que a estas alturas continuemos barajando como combatirla y en mi concepto es con la congelación de precios. Por supuesto para ello se requiere voluntad revolucionaria y la determinación en el ejercicio de dos cosas muy importantes una, la constitución en la ANC de una comisión de peritos que de manera perentoria realice los estudios de costos por actividad económica, estudiando en primer lugar los precios internacionales de las materias primas, productos terminados y partes y piezas, sin esta información no se puede evaluar la cadena de costos, lo otro es el seguimiento preciso de cada uno de los importadores, inclusive los del Estado.

Espero contribuir a la búsqueda de salidas rápidas que contribuyan a terminar esta compleja situación.



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Rafael Febles

Economista. Msc. Seguridad Social. U.C.V.. Militante revolucionario. Locutor. Articulista Correo del Orinoco. Poeta y escritor de la revolución bolivariana

 rafaelfebles@yahoo.com      @rafael_febles

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