El Problema de la Constituyente

El problema de la constituyente es que se convoca en medio de una de las peores crisis económicas padecidas en Venezuela, en la cual la gente lo que espera son respuestas concretas a las problemáticas que se padecen.

En lugar de atender esta demanda, el Gobierno arroja al país hacia un debate nacional bastante fuera de lugar, fundamentado su discurso en tres afirmaciones erróneas.

La primera es que es necesaria una Constituyente para resolver los problemas del país.

La segunda es que la Constituyente va a resolver todos los problemas del país.

La tercera es que la Constituyente es la "única vía" para que garantizar la Paz en Venezuela.

Que desde el Gobierno se afirme que se necesita una Constituyente para resolver los problemas de Venezuela es, cuando menos, una enorme demostración de irresponsabilidad. Teniendo presente que estamos hablando de un Gobierno que lleva 4 años en el poder, que ha gobernado desde su inicio (en el 2013) a través de Poderes Habilitantes, que tiene en vigencia un Decreto de "Emergencia Económica" después de haberlo extendido 7 veces! Que ha nombrado en cadena nacional sopotocientas "Comisiones Presidenciales", "Consejos Presidenciales", Gabinetes de esto y aquello, que ha lanzado varias Leyes de "Precios Justos", que lanzó una mal llamada "Agenda Económica Bolivariana" y un Plan de "15 Motores", además de haber designado al General "Caraota" y demás altos oficiales militares a ocuparse de cada rubro alimentario y haber asignado cadena tras cadena recursos millonarios para alimentos y medicinas con un resultado final lamentable de un Pueblo que hoy por hoy vive una gravísima crisis económica sin que aparecieran nunca ni los alimentos ni las medicinas ni los recursos millonarios entregados en cada uno de estos anuncios, mientras los altos funcionarios civiles y militares responsables de este mega-fracaso económico viven rodeados de lujos y son premiados con rotaciones en cargos ministeriales y demás cargos del alto gobierno.

Si después de todo lo que ha anunciado el Gobierno dice ahora, que lo que necesita es una Constituyente, déjeme decirle con mucho respeto al Sr. Presidente que lo que le hace falta no es una Constituyente, sino mecanismos de funcionamiento que garanticen la eficiencia y transparencia en el manejo de los recursos del Estado, cosa que en estos momentos no existe dado que el manejo de los recursos públicos actualmente es un misterio que solo conoce el Alto Gobierno civil y militar (sobre todo militar) mientras el pueblo cada día sufre más y más los embates de un verdadero desastre económico totalmente distinto a la bonanza vivenciada durante el Gobierno del Comandante Chávez, bonanza que se vivió pese que este tuvo una cotización del petróleo similar e incluso muchas veces inferior a la que ha tenido el gobierno actual. -Para cualquier duda al respecto revisar los históricos de la cotización del precio del petróleo venezolano y se verá que el famoso petróleo de más de 100 dólares tan mencionado por el actual Gobierno llegó fue en los últimos años del mandato de Chávez, quien de hecho, en sus primeros 4 años como Presidente tuvo una cotización inferior a la que ha tenido el actual Gobierno en sus 4 años transcurridos-.

No se niega que existan factores externos e internos que han buscado perjudicar la economía venezolana para desestabilizar al país, pero el gobierno ha contado con recursos suficientes como para haber defendido nuestra Patria de manera eficaz, no estamos hablando de la Chile de Allende cuya economía se fundamentó en el cobre o de la Cuba de Fidel que solo producía caña de azúcar: hablamos de Venezuela, un país con las reservas petroleas más grandes del mundo, con reservas también de gas natural, y minerales como oro, hierro, coltán y torium, además de enormes extensiones de tierra fértil y un enorme potencial humano. Nada justifica que nuestro Pueblo esté padeciendo condiciones de vida tan duras en estos momentos.

Pero si decir que se necesita una Constituyente para resolver los problemas del país es una demostración de irresponsabilidad, afirmar que con la Constituyente todo se va a resolver es un absurdo que incluso pone en riesgo el capital político que todavía le queda al Gobierno. Entiéndase bien: al Gobierno, no así al Proceso.

Si algo queda claro en este momento es el desinterés y rechazo que esta Constituyente ha generado en el país, basta escuchar los comentarios en la calle para darse cuenta. Diversos aspectos se suman para ello, aspectos como la poca pertinencia del momento, el no haber sido aprobada por el Pueblo mediante referéndum consultivo tal como lo hizo Chávez, y el oscuro método electoral planteado que garantiza una victoria para la cúpula del partido de Gobierno y que quebranta el principio constitucional de la representación proporcional establecida en el artículo 63 de nuestra Constitución, son factores que se han conjugado para que la mayoría sienta poca afinidad con esta ANC.

Ni siquiera el Chavismo en pleno apoya la convocatoria a una Constituyente, porqué a estas alturas es claro que gran parte de la militancia del Proceso Revolucionario no se siente representada en este gobierno, y mucho menos en esta constituyente, y no por eso se identifican con lo derecha. Quienes si apoyan esta convocatoria son los sectores más pro-institucionales del Chavismo, se trata de compañeros y compañeras militantes, que por diversas razones políticas, ideológicas y hasta emotivas siguen cumpliendo fielmente todos los lineamientos que emanan del actual gobierno. A este sector del país que todavía se pliega al discurso oficial se le está generando la gran expectativa de que con la Constituyente todo cambiará para bien, de que se aprobará la constituyente y "todo se resolverá". La ANC es pues, vendida por el discurso oficial como la panacea social que arreglará todo, pero sin que nadie explique de manera clara como lo va hacer… ¿Qué va a pasar cuando se apruebe la Constituyente y no cambie nada en términos concretos? ¿Qué explicación le van a dar a quienes si creyeron en la convocatoria? ¿Es que acaso una vez se apruebe la constituyente aparecerán todos los campos venezolanos sembrados y cosechados? ¿Es que aparecerán al día siguiente los supermercados totalmente abastecidos y con precios accesibles para el bolsillo de la gente? ¿Es que a los pocos días iremos a las farmacias y encontraremos todas las medicinas que se necesiten? ¿Es que gracias a la Constituyente aprobada, mediante formidables redacciones de artículos ahora el sueldo de una persona si le alcanzará para vivir de manera digna? ¿Es que con las leyes de "precios justos" que apruebe la Constituyente se detendrá la inflación? ¿Si es así entonces por qué no han servido las dos Leyes de "Precios Justos" emitidas por el Presidente en el año 2014 y 2015? ¿Es que por vía Constituyente van a traer seres extraterrestres del espacio sideral que ahora si puedan hacer cumplir las leyes en nuestro país? ¿Esto es un problema de tomar más tiempo para debatir más y escribir más leyes o es un problema de que por fin alguien haga que las leyes se cumplan y de que el aparato del Estado trabaje de manera eficiente?

En cuanto a la insostenible afirmación de que la Constituyente es el "único camino" para la paz lo que hay que preguntarse es… ¿Cómo va a ser posible eso? Si el propio Gobierno asoma la necesidad de la búsqueda de Paz en nuestro país es porqué está consciente de que estamos viviendo un momento de alto nivel de conflictividad social y política. En un escenario como este, si lo que se desea es lograr la "Paz" la única manera es buscando mecanismos mediante los cuales todos los sectores sientan las garantías necesarias para participar, y obviamente la Constituyente no es ese mecanismo, la inexistente participación de candidatos opositores e incluso, Revolucionarios o Chavistas críticos al gobierno ha convertido la ANC en un espacio de encuentro de un solo sector, excluyendo la multiplicidad de sectores que componen en este momento el escenario político de Venezuela. Solo el chavismo pro-institucional se siente representado en esta Constituyente, y sin la participación de ningún otro sector la pretensión de que este sea un "camino para la Paz" desaparece de manera absoluta ¿Es que acaso el país en su totalidad se va a sentir representado en lo que decidan los altos representantes del PSUV auto elegidos en un proceso electoral que diseñaron a su medida? ¿Tiene sentido esto? ¿Tanto subestiman desde el Gobierno la inteligencia de nuestro Pueblo? Si esta Constituyente tuviese unas bases comiciales justas, transparentes y verdaderamente incluyentes, regidas por los preceptos Revolucionarios de la Democracia Participativa y Protagónica muy distinto sería el ambiente político nacional en estos momentos.

Para tener una idea de lo absurdo del método planteado es preciso conocer ejemplos concretos como el del Distrito Capital, que con una población de más de 2 millones y medio de habitantes elegirá 7 Constituyentistas, mientras que el estado Amazonas con solo 179 mil habitantes elegirá 8 Constituyentistas, lo mismo hicieron con todos los grandes centros poblados del país, con la impresentable excusa de que se eligen diputados por municipio y no por densidad poblacional. Un método como este a todas luces da la impresión de temor por parte del Gobierno al voto de las mayorías, pero además, un método como este es inconstitucional, toda vez que contraviene nuestra Constitución en su artículo 63, el cual establece de manera textual: "El sufragio es un derecho. Se ejercerá mediante votaciones libres, universales, directas y secretas. La ley garantizará el principio de la personalización del sufragio y la representación proporcional".

Conjuntamente con esta grave distorsión se estableció la denominada elección sectorial, a la cual insólitamente se abrieron las postulaciones sin que el CNE expusiera antes la metodología electoral en dicho renglón. Se trata de un formato de elección que aun todavía no ha sido explicado de manera clara y que de paso, no aparece contemplado en ninguna parte de nuestra constitución ni ley alguna, sin embargo se presenta al país después de haber perdido las elecciones parlamentarias con la increíble pretensión de que nadie piense que existe algo raro con semejantes mecanismos electorales.

Por si fuese poco todo lo anterior, y totalmente contrarios al Legado del Comandante Chávez -quien en 1999 sin tapujos y de manera directa estableció desde el inicio que la Constituyente tenía que ser no solo aprobada y elegida por el Pueblo, sino que además el trabajo resultante tenía que ser aprobado mediante referéndum para que pudiese entrar en vigencia- en la actual Constituyente los voceros gubernamentales rechazaron la convocatoria de un referéndum consultivo, pero además guabinean cuando se les pregunta sobre la convocatoria a un referéndum aprobatorio: ni uno solo de los voceros gubernamentales ha dicho de manera clara que lo que haga la ANC tendrá que ser aprobado por el Pueblo mediante referéndum, por el contrario dejan la puerta abierta a que la ANC haga lo que le de la gana sin consultarle a nadie, y el Presidente por su parte se limitó a realizar un "exhorto", lo que es igual a nada… ¿A cuál Poder para el Pueblo se refiere el gobierno con su eslogan para la Constituyente cuando el Pueblo aquí no está decidiendo nada?

¿Qué pensaríamos nosotros si aquí hubiese un gobierno de derecha y realizara algunas de estas acciones que algunos camaradas consideran adecuadas? ¿Qué pensaríamos si aquí hubiese un gobierno de derecha y cuando llegase la fecha establecida para unas elecciones el CNE cambiara las reglas para colocarlas a favor del gobierno de turno? ¿Qué le diríamos nosotros al país si aquí se llegase a montar un gobierno de derecha y lanzara una Constituyente sin que el Pueblo apruebe su convocatoria y afirmando que no es necesario tampoco que el Pueblo apruebe la nueva Constitución? ¿Será que quienes hoy aplauden esto lo harían también si fuese un gobierno de derecha? ¿En qué momento es que hemos comenzado a actuar como todo aquello a lo que habíamos jurado a erradicar?

No es posible exigirle al Pueblo que acepte la idea de entregar un cheque en blanco a 545 personas sean quienes sean, para que hagan lo que quieran con nuestro país, sin qué luego estén obligados de ninguna manera a solicitar la aprobación popular mediante referéndum. No es la primera vez que se nos pide un cheque en blanco, en estos 4 años el gobierno se ha cansado de solicitar el "apoyo" para medidas que una vez tras otra lejos de arreglar algo lo que le han traído ha sido más cargas al Pueblo. En agosto de 2016 en el acto de lanzamiento del Arco Minero, el presidente firmó acuerdos por 4500 millones de dólares los cuales afirmó, eran para "la felicidad del pueblo", pero el Pueblo no ha visto un centavo de ese dinero y nadie sabe a dónde han ido esos recursos. Igualmente en el 2016, cuando el gobierno anunció el aumento de la gasolina también se dijo que los recursos obtenidos irían para la inversión social "en vivienda, en educación, y en salud", además se dijo que se invertiría para producir repuestos de vehículos en nuestro país, y que se dejaría de importar lubricantes para vehículos, además de "garantizar" que el aumento de ninguna manera impulsaría una escalada inflacionaria. La realidad fue que a los pocos días del aumento de la gasolina los precios de los alimentos se dispararon, las fábricas de repuestos que anunciaron todavía brillan por su ausencia, y el litro de aceite más económico que se puede conseguir actualmente en la calle tiene un precio que pasa los 10 mil bolívares, todo esto son solo algunos ejemplos de lo que ha venido ocurriendo estos 4 años. Como se comprenderá, después de semejantes resultados, resulta bastante temerario venir a decirnos que estamos en la obligación de entregar otro cheque en blanco, cuando se trata nada más y nada menos que de algo tan delicado y trascedente como nuestra Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, la única en la historia de nuestro país que ha sido aprobada de manera total y directa por el Pueblo.

El factor tiempo es igualmente desechado del discurso gubernamental, y es un factor que no puede bajo ningún concepto perderse de vista. Veamos: el Gobierno del Presidente Nicolás Maduro tiene 4 años transcurridos, vamos por el quinto y se convoca a una constituyente. En el año 1999 la Constituyente convocada por el Comandante Chávez contó con 131 asambleístas, y duró varios meses realizando su trabajo. En esta oportunidad el número de asambleístas es muy superior al de entonces, más del triple, lo que hace prever un periodo de tiempo aun mayor para sus disertaciones. La Asamblea Nacional Constituyente difícilmente culmine su tarea en este mismo año, lo cual nos lleva al año 2018, año en el cual corresponden elecciones presidenciales.

Aquí el Gobierno tendrá dos opciones: o realiza elecciones presidenciales ese año, o mediante cualquier tipo de excusa las evade. Demás está decir que la segunda opción sería una locura, porqué por el camino que vamos si de aquí allá todavía no ha estallado formalmente una guerra civil ese podría ser el empujón que le haga falta, pero además, un anuncio de esta índole constituiría la esperada oportunidad al imperialismo estadounidense para justificar una intervención armada contra nuestro país. Cualquier escenario resultante de un desconocimiento para la realización de unas elecciones presidenciales traería como consecuencia un desenlace lamentable.

En la otra opción, que es la que debería cumplirse, se realizan elecciones presidenciales en el 2018, el resultado altamente previsible sería una derrota para el Gobierno, que no pudo garantizarle al Pueblo una buena calidad de vida y que, en sus últimos dos años, en lugar de dedicarse de manera eficiente a eso, prefirió sumergir al país en un debate jurídico nacional diciendo que para afrontar los problemas económicos del país necesitaba una Constituyente.

En el mejor de los casos, suponiendo que de la ANC surjan grandes ideas en lo económico (habrá que ver cuales si por lo que se ve estará compuesta por puras caras conocidas que hacen parte ya de la cúpula gubernamental) todavía existiría el problema del tiempo transcurrido de aquí hasta ese momento, en el que ya le quedarán tan solo meses al periodo constitucional de este Gobierno y por tanto, muy poco tiempo para poder poner en practica tan geniales ideas.

En un escenario como ese, con unas elecciones presidenciales que serían ganadas por la derecha (mas por descontento contra el Gobierno que por liderazgo de alguien) el paso siguiente para la derecha sería convocar otro proceso para derogar todo lo que se acabó de aprobar con la Constituyente, y como vendrían apuntalados por una victoria electoral no les costaría mucho. Con la notoria salvedad de que ellos jamás se hubieran atrevido a tocar la Constitución del 99, pero gracias a la idea de haber hecho una ANC ahora tendrán la excusa para hacerlo y, obviamente, no la van a dejar como la del 99 sino como la del 61. Todo gracias a una estrategia fuera de lugar de la cúpula de Gobierno, un grupo de personas que en su mayoría es evidente que ya no están pensando en la preservación y continuidad del Proceso Revolucionario, sino que solo están tratando de mantener sus cargos de poder por el mayor tiempo que les sea posible y lo que ocurra después les importa muy poco.

De más está recordar que en sus primeros anuncios cuando el Presidente Maduro comenzó a convocar su Constituyente, esta fue vendida al país como una Constituyente "Comunal", que sería una expresión directa del "Poder Originario", basta solo con ver las listas de candidatos presentados por el PSUV para vislumbrar hacia dónde va realmente esta Constituyente, bastante lejos de ser una expresión directa de las Comunas y los Consejos Comunales. Ni que decir de aquellas y aquellos camaradas militantes, que durante años han realizado importantes aportes a la construcción del Proceso Revolucionario y que seguramente pudieran aportar muchísimo en una Constituyente, pero que habiéndose postulado difícilmente llegaran a obtener un curul en la ANC, porqué el método planteado no solo jugaba en contra de la derecha sino que también apunta en contra de cualquier Chavista de base que no sea parte de la cúpula de Gobierno -o trabaje directamente para esta-. Con el más simple análisis se puede notar que esta elección ha sido diseñada para que la maquinaria gubernamental del PSUV gane si o si, es ingenuo no darse cuenta.

Es hora de que dejemos de ver el país en términos de lo que hace o no hace la derecha y entendamos que existe un país que observa todo lo que hacemos y decimos. Convocar a un proceso constituyente, sin que el Pueblo lo apruebe, y cambiando las reglas electorales para colocarlas abiertamente a nuestro favor y creer que nadie va a pensar que hay algo raro es insultar la inteligencia del Pueblo.

Es absurda la pretensión gubernamental de sostener un discurso como que si todo en este país estuviera normal, cuando lo que estamos viviendo es todo lo contrario: el país vive una crisis económica brutal, con protestas callejeras con niveles de violencia que van en aumento, y sin embargo estamos en un país en el que no se están haciendo elecciones. Porqué las elecciones son cuando corresponden y de la manera que tienen que hacerse, no cuando a mí me de la gana y con reglas que yo me invento para ganar yo, tal como han hecho con esta ANC, pasando por alto unas elecciones para gobernadores que debieron haberse realizado hace rato y unas elecciones municipales que pese a tocar este año ni siquiera figuran en agenda, y que incluso algunos voceros gubernamentales ya comienzan a asomar que la realización de todo proceso electoral dependerá de lo que decida la Constituyente: Camaradas, esto es muy grave, no se puede patear las reglas establecidas cuando no me favorecen para luego acusar a los demás de que no respetan las reglas. Quien no respeta el ordenamiento jurídico del país no tiene moral para acusar a los demás cuando estos tampoco lo respeten, ni siquiera los adecos y copeyanos del 98 se atrevieron a hacer algo como eso sabiendo que Chávez los arrasaría en las elecciones, porqué estaban conscientes que si trataban de evitarlo el resultado podía ser un segundo estallido social.

El momento que vive nuestro país es sumamente delicado, invaluables son los daños al patrimonio público y más invaluable aún es la cantidad de fallecidos. Con un profundo malestar social a causa de las duras condiciones de vida que está enfrentando el Pueblo, y con sectores que intentan arrojar a Venezuela hacia una escalada de violencia que pudiera llegar a niveles incontrolables, lo que el país necesita es que el Gobierno se centre en dar respuestas a las demandas de la gente, no más habladera.

Es cierto que existen importantes cambios que pueden hacerse en términos de mejorar la Constitución y profundizar el Proceso Revolucionario, pero el asunto de fondo no es que tantos cambios puede hacerse en una Constituyente, sino la capacidad real que se tenga de sostener esos cambios, y este Gobierno no la tiene, y no la tiene hasta el punto que ni siquiera se atreve a plantear unas elecciones abiertas porqué calcula que posiblemente perdería. En este momento no existen las condiciones para un debate nacional de esta naturaleza, en lugar de estar tratando de forzar una Constituyente lo que deberíamos hacer es construir unas condiciones políticas mucho más favorables para eso, y eso pasa ineludiblemente por darle calidad de vida la gente, para eso es que se elige un Gobierno, el Gobierno tiene que escuchar lo que diga el Pueblo, lo demás es jugar con candela: Venezuela está al borde de un estallido social o una guerra civil, y solo una actitud responsable por parte de las dirigencias políticas pueden evitar un desenlace fatal, el rol del Gobierno en estos momentos es fundamental.


 



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Ronald Muñoz

Comunicador y escritor.

 el_iniciado@yahoo.com      @ronaldmcaracas

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