¡Actor material del atentado el 25 de septiembre de 1828!

Es importante conocer, de la historia, algo o mucho sobre la vida particular de sus protagonistas, por ello la ocurrencia de contar someramente de la existencia de quien fuera el jefe del grupo de hombres que entraron al Palacio de Gobierno de Bogotá a la media noche del 25 de septiembre de 1828 con el propósito de asesinar a nuestro paisano venezolano, formidable guerrero, virtuoso magistrado, lúcido pensador y prestigioso escritor, nuestro Simón Bolívar, aquel formidable ser humano que le diera la libertad, entre otros países, a nuestra República Bolivariana de Venezuela y por ésto nuestro gran Libertador.- Bien, pasemos a contar sucintamente la vida de aquel personaje que pretendió ser el asesino material de Simón Bolívar.

PEDRO CARUJO nace en Barcelona, Estado Anzoátegui, Venezuela a finales del año 1801 y muere en Valencia, Estado Carabobo, Venezuela, el 31 de enero de 1836; próximo a cumplir 35 años de edad. Militar y periodista, hijo del español canario José Carujo, oficial militar realista y de Juana Hernández, venezolana. Carujo recibe una buena enseñanza y por ello habla y escribe también los idiomas, inglés y francés. Al nacer en un hogar dividido en torno a la causa realista y la republicana, tiene que decidir a cual unirse y escoge, seguramente influenciado por su madre, la causa independentista y solicita se le acepte en el ejército patriota, siendo inmediatamente asignado al Batallón Orinoco con acuartelamiento en la Ciudad de Angostura, actual Ciudad Bolívar, Estado Bolívar, Venezuela, en 1819 a los 18 años de edad. En 1821, participa bajo las órdenes del General José Francisco Bermúdez, en las campañas de Caracas y Santa Lucía. Con el grado de capitán, se distingue en 1823 en la toma de Maracaibo, resultando herido en el combate, por lo que se traslada a Nueva Granada, actual Colombia. En Bogotá, aprovecha el tiempo para hacer cursos de matemáticas y geometría bajo la conducción del fraile franciscano Tomás Sánchez Mora, formando parte además de los círculos intelectuales agrupados en diversas sociedades literarias. En el mismo año de 1828 Carujo es seleccionado por el propio Simón Bolívar para que presida la recién fundada Escuela Militar enclavada en Bogotá. El General Vicepresidente de la Gran Colombia, viendo lo diligente de este venezolano, Carujo, lo invita a que vaya a su despacho para tener una conversación a solas con él, esta reunión se realiza por más de una (1) hora y desde aquel momento son amigos inseparables y es unos meses después que se produce el atentado contra la vida del Libertador; medianoche del 25 de septiembre de 1828. Como consecuencia de este atentado Carujo es condenado a muerte, pero salvada su vida por un indulto concedido por el Consejo de Ministros. Encarcelado Carujo en la cárcel de Bogotá y luego en el Castillo de Bocachica, Cartagena, en marzo de 1829 lo trasladan a la Fortaleza de El Vigía de Puerto Cabello, de donde se fuga el 2 de agosto de 1829; pero en pocos días es recapturado y entonces se le colocan grillos en sus pies.

En prisión escribe al General José Antonio Páez, además consigue se publique algunas de sus cartas en El Fanal, periódico editado en Valencia propiedad del venezolano Tomás Lander. Deportado a Curazao en los primeros días de junio de 1830, lo consigue cuando el General Páez decreta una amnistía general y ello logra darle la libertad y regresar a territorio venezolano. Radicado en Maracaibo, organiza un cuerpo miliciano de 1.000 hombres, con el cual pasa la frontera e incursiona al sobre Río Hacha, localidad que se había rebelado contra el gobierno del General Rafael Urdaneta. Posteriormente, convertido en el vocero de un grupo de militares y de hacendados reunidos alrededor del general Santiago Mariño, Carujo combate desde las columnas del periódico El Republicano la candidatura presidencial del doctor José María Vargas a quien acusa en 1834 de haber sido realista y antipatriota. En 1835, Carujo es uno de los oficiales que encabezan la Revolución de las Reformas, dirigida por el General Santiago Mariño, siendo el encargado de apresar al presidente Vargas en su casa; cosa que hace el 8 de julio de 1835. Es en la casa del Doctor Vargas donde son pronunciadas las muy comentadas frases:-"Doctor Vargas, el mundo es de los valientes" a lo que contesta éste: "El mundo es del hombre justo" Carujo al frente del Batallón Anzoátegui, es fue uno de los efectivos de mayor coraje y combate en esa guerra civil, venciendo en Cariaco el 20 de septiembre de 1835 y en Carúpano el 5 de octubre de ese mismo año 35, en esta última derrota al General Francisco Esteban Gómez. Más adelante Carujo es trasladado al centro del país, específicamente a Puerto Cabello. En esa zona dispersa en El Pino, cerca de San Esteban, el 27 de octubre de ese mismo año 35 al Coronel Andrés Torellas, enseguida es el comandante de una de las 3 Brigadas que intentan tomar a Valencia el 28 de octubre; siendo éstas derrotadas, preso y encerrado en Castillo de Puerto Cabello, logra escapar y reinicia las incursiones hacia Tucacas, Aroa y San Felipe. A pesar de que ya la rebelión había sido sofocada en el resto del país, Carujo mantuvo desde la plaza de Puerto Cabello actividades de guerrillas en la zona del litoral carabobeño. Finalmente, el 25 de diciembre del mismo año 36 es herido y capturado en la Batalla de Paso Real, cerca de Puerto Cabello, siendo juzgado y sentenciado a muerte el 27 de enero de 1836, pero la sentencia no se cumple pues fallece en la cárcel de Valencia ese 31, a causa de sus heridas.



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José M. Ameliach N.


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