"Los Andes" es una empresa del conjunto de industrias y compañías, abandonados por sus dueños. Por qué si fue nacionalizada nos inunda de aumentos. Litro de jugo pasó de Bs. 40 en Agosto a Bs. 70 en Septiembre. La Superintendencia de Precios podrá justificar el alza de 73 %, o el precio del yogurt "Los Andes" presentación 2 litros, que en Agosto era de Bs. 120 y en Septiembre Bs. 162, alza de 35 %.
Quienes en el gobierno revolucionario dan permisos, estarán siendo comprados "por debajo de cuerda" para desesperar a los usuarios, e incluir en la inflación a empresas nacionalizadas, a las que la oposición señala de administración ineficiente y carga económica al país.
En campaña contrarrevolucionaria dicen que fue abandonada la política de precios al alcance del pueblo, "porque eso era cuando Chávez y ahora con Maduro no es la misma vaina…". Razonamiento de la orquestada guerra económica, a tiempo que enjundian "la eficiencia de las empresas privadas…" Pero Raimundo y todo el mundo saben de la especulación, el acaparamiento, e incluso la usura de empresarios corruptos o corruptores, que, sin embargo, piden y piden dólares.
Y por qué la oposición no escandaliza con los aumentos en productos hechos por empresas del gobierno, ¿acaso es porque temen que el Ejecutivo ordene bajar los precios de Lácteos Los Andes?. Se debe responder a estos atropellos al costo de la vida, estrategia contrarrevolucionaria. Resulta difícil defender al pueblo de los precios injustos y especulatiivos, por mucho PDVAL, Bicentenarios, Mercales y similares que tengamos.
CRITICA ACIDA
EL otro PEREZ… ejemplos disimulócratas…
La situación del general Otto Pérez Molina, Presidente electo en Guatemala quien incurrió en corrupción personal y fue destituido por decisión del Poder Legislativo, me permitió hacer un parangón con el venezolano Carlos Andrés Pérez, también fuera de la primera magistratura por decisiones de la estudiada disimulocracia capitalista demócrata representativa. En ambos casos se trata del estilo de gobierno unido por el pitiyanquismo y la variada corruptela, el carlosandresismo venezolano y el perezmolinismo guatemalteco. A mi juicio analítico, medidas disimuladoras de ajuste, procurando el beneficio de intereses empresariales y obediencia a Washington. En nuestro caso hubo complicidad de la social democracia adeísta con el socialcristianismo copeyano, númen de la actual derecha fascista: Voluntad Popular y Primero Justicia.
En 2015 sufrimos además la presencia libre e influencia poderosa de la ultra derecha, encabezada por la María Corina de los "amos del valle", personaje generador de violencia genuflexa, que se retrata sin rubor con George Bush jr. and Company. Venden el cuento de la democracia representativa bipartidista que sí castiga Presidentes, ejemplificando con el venezolano CAP y el Pérez, de Centroamérica, buscando pretextos contra el Presidente obrero, chavista y bolivariano Nicolás Maduro, llamándolo dictador.
Afortunadamente el proceso nacional continua mostrando y demostrando mundialmente, la transparencia de sus acciones, la popularidad de la revolución venezolana inspirada en Simón Bolívar, y el moderno legado conceptual del gigante Hugo Chávez.
POLITIPORRAZO
43 de aquí… 43 de allá
Al cantante mexicano Fer del grupo Maná, se le ocurrió expresar durante un concierto una "burrada" política. Ondeando banderas venezolanas hizo propaganda a factores de oposición afirmando que pedía la liberación de Leopoldo López, encarcelado según Fer "injustamente…". López purgará casi 14 años por agitador, iniciando la anticonstitucional "salida", que en el 2014 ocasionó 43 muertes y 875 heridos. El agitador venezolano es aplaudido por la disimulocracia de Maná, que tímidamente lanzó una opinión de descontento en el caso de los 43 de sus paisanos mexicanos, estudiantes desaparecidos en Ayotzinapa en 2014.
La conducta del popular grupo musical azteca, reedita la campaña internacional contra el gobierno de Venezuela, vista en ocasión de la entrega del Oscar y otros escenarios, utilizando artistas para desprestigiar al socialismo venezolano. Quienes en el 2015 vuelven a ser derrotados en sus ideas políticas, apelan a guerra económica con desaparición de productos alimenticios, repuestos de toda índole, medicinas y artículos de higiene personal, ayudando a la inflación inducida y violencia terrorista.
Se victimizan disimulocráticamente mediante su poderosa influenciocracia mundial, sin convencer a los análisis políticos verdaderamente serios y de altura, hechos por quienes no creen dichos argumentos y resultan vencidos por la diplomacia sincera de Venezuela. Derrotados gracias al socialismo siglo XXI de la revolución bolivariana, chavista y obrera, indudable ejemplo de democracia soberana
