Somos "irreverentes en el discurso y leales en la acción". Somos patriotas, revolucionarios de izquierda, bolivarianos, socialistas; y nuestro amor por la patria no nos cabe en el pecho.
Somos aquellos bolivarianos que estamos dispuestos a "cambiar la comodidad por la miasma fétida del campamento, y los goces suavísimos de la familia por los azares de la guerra (…)", como dijo e hizo Fabricio Ojeda; y estamos plenamente dispuestos a entregarlo todo por nuestra revolución si es necesario, total, ¡la vida es una sola!
Creemos en el colectivo hecho un solo cuerpo orgánico, en el poder de las masas populares y soñamos con que algún día "…la vida se vuelva un cantar y nuestro combate una sola canción", como diría Alí Primera.
No jugamos con las necesidades y aspiraciones de nuestro pueblo, no lo engañamos. Aborrecemos la corrupción y el burocratismo institucional. Entendemos y comprendemos el histórico significado de la lucha de clases y por tanto jamás negociaremos con la burguesía.
Nuestro accionar político está obligado a transitar de manera irreversible por la senda del socialismo bolivariano del siglo XXI, y estamos plenamente convencidos que la Comuna productiva es la única esperanza de vida que tenemos los pueblos que aún luchamos por nuestra verdadera independencia.
Los auténticos chavistas hoy día estamos aferrados a librar la indeterminada lucha capaz de romper con las estructuras económicas dominantes mediante nuestras propias capacidades creadoras y potenciales liberadoras, siendo nuestro campo de batalla la Comuna y nuestro ejército los comuneros.
Hemos entendido que el proyecto político, económico y social que nos legó nuestro gran maestro Chávez quizás no lo veamos completamente realizado nosotros mismos, pero de igual modo lo seguiremos esculpiendo. Sabemos que es a largo plazo y que "el camino es duro y difícil, pero es el camino", como diría el comandante Carache.
También sabemos que "la fuerza del pueblo es ilimitada", como dijo Vo Nguyen Giap, por eso toda nuestra fe está depositada en el nuestro, aspirando a que algún día se despierte.
Nosotros los que sí somos verdaderos chavistas nunca abandonaremos la lucha por la causa de los pueblos, y jamás renunciaremos a nuestro sueño colectivo de hacer de Venezuela una república verdaderamente independiente y plenamente convertida en un país potencia.
¡Chávez, no te fallaremos!
