El pasado miércoles 19 de noviembre de 2014, trabajadores y trabajadoras del Ministerio del Poder Popular para las Relaciones Interiores, Justicia y Paz, junto con la Viceministra del Sistema de Investigación Penal, Marìa Wandolay Martínez, se dirigieron a las oficinas del Banco Bicentenario en San Bernardino, donde hicieron su aporte del día de salario al Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV).

Una vez que la Viceministra declaró, el compañero Raùl Martìnez, de Venezolana de Televisiòn, me tomaron algunas declaraciones, en las cuales, destacaba los niveles de organización y  voluntad de la militancia del Partido Socialista Unido de Venezuela para apoyar financieramente al partido. De igual manera señalaba que en mis 34 años de feliz existencia, no recordaba una organización política de estas características financiado por sus propios militantes y simpatizantes. Siendo este un ejercicio de democracia participativa y revolución, tal y como lo establece el artículo 67 de nuestra Constituciòn, que al respecto, señala lo siguiente: “Todos los ciudadanos y ciudadanas tienen el derecho de asociarse con fines políticos, mediante métodos democráticos de organización, funcionamiento y dirección. Sus organismos de dirección y sus candidatos o candidatas a cargos de elección popular serán seleccionados o seleccionadas en elecciones internas con la participación de sus integrantes. No se permitirá el financiamiento de las asociaciones con fines políticos con fondos provenientes del Estado.

La ley regulará lo concerniente al financiamiento y a las contribuciones privadas de las organizaciones con fines políticos, y los mecanismos de control que aseguren la pulcritud en el origen y manejo de las mismas...”

Además de ello, contrastaba este ejercicio, y esta forma de cómo los simpatizantes y militantes del PSUV financian y sostienen los gastos del partido, versus la forma como los partidos de la derecha obtienen los fondos de sus actividades, en la mayoría de los casos producto de las actividades provenientes del narcotráfico, y otros dineros mal habidos de la USAID, de la NED, del paramilitarismo. Esta contribución del día de salario por la Revolución se da a las puertas de unos comicios y de una necesaria relegitimación desde la base, de sus cuadros y autoridades, amèn de que se cumplen 20 meses de la juramentación el 19 de abril de 2013 ante la Asamblea Nacional, de Nicolàs Maduro como Presidente de la Repùblica Bolivariana de Venezuela, luego de las elecciones sobrevenidas presidenciales el 14 de abril de 2013.

Ya para el momento en que escribo estas líneas, ejercí mi derecho al voto en mi centro nucleado donde me correspondía sufragar. Hoy, 23 de noviembre, se inicia un período de elección por la base de 3.988 jefes de los círculos de lucha populares, y la semana del 29 y 30 de noviembre y 5 y 6 de diciembre, se elegirán  a13.682 jefes de UBCH, 136.820 jefes de patrulla y 155.475 cuadros chavistas que deben formar el primer anillo no solo para ganar las parlamentarias del año que viene, sino de vanguardia, de hacer y defender nuestra revolución.

Este proceso de hoy será muy importante. Sin duda generará como otros anteriores, insatisfacciones y algunas escaramuzas y peleas. Pero se hacen en un momento bastante oportuno y con el tiempo suficiente para restañar las posibles fracturas o heridas que pueda generar, de cara a unos comicios parlamentarios, donde se jugará, en buena medida, el destino de la Revolución Bolivariana, que hoy lidera Nicolás Maduro Moros.

También se dará en el marco de nuevas amenazas, acechanzas, y peligros en contra de la Revolución Bolivariana. Donde la derecha nacional e internacional pretende generar, nuevamente todo un clima de inestabilidad y desestabilización en aras de derrocar el Gobierno Bolivariano de Nicolás Maduro, que en medio de sus aciertos y desaciertos, representa la continuidad de la obra y del legado de Hugo Chávez. También en un período de “vacas flacas”, ante la caída de los precios petroleros, producto de que los Estados Unidos está inundando el mercado con los hidrocarburos de esquistos (rocas), que obtenidos a través de la técnica del “fracking” y “super fracking” (fractura y super fractura, respectivamente), además de contribuir a la caída de los precios petroleros que afecte a países como Rusia, Irán y Venezuela, porque consideran que pueden vivir perfectamente con un barril de petróleo en 40 dólares, generan unos pasivos ambientales, que realzan la importancia del 5to objetivo histórico de nuestro Plan de la Patria, que no es más que preservar la vida en nuestro planeta y salvar a la especie humana.

Entiendo también, como parte de unas rémoras culturales e ideológicas que aún no hemos superado, que miembros de los poderes constituidos (gobernadores, alcaldes, diputados, etc) enviarán sus “kinos” y tratarán de someter y escamotear la voluntad genuina de las bases del partido. Hoy se pondrá a prueba el nivel de conciencia de la militancia psuvista, de la militancia chavista, y en donde si se habla de derrotados, que sean las imposiciones, el sectarismo, los “kinos”, y de esos intentos de secuestro y farsa de un proceso de consulta a las bases. Es parte de los riesgos que a veces hay que correr, pero que no debemos evadir, es parte del debate y de la batalla que tenemos que seguir dando.

Sin embargo, mi llamado es a nuestros simpatizantes y militantes del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) a participar, a expresar su voluntad y a votar por aquellos cuadros del partido que además de ser garantía de triunfo en lo electoral, sean garantía de movilización y despliegue en caso de que la Revolución llegare a estar en peligro, en esencia, vote por el que realmente le dicte su conciencia, vote por el que le dé la gana usted, sin presiones, sin coacciones. Como lo ha dicho el compañero Diosdado Cabello, 1er Vicepresidente del PSUV, Presidente de la Asamblea Nacional, y cuadro importante del Alto Mando Político y Militar de la Revolución. No solo requerimos un Partido que gane elecciones, no solo un partido que sea una verdadera maquinaria electoral, sino un partido que junto al pueblo, contribuya a hacer una Revolución Socialista.

Por último, que coincidencia también que, para el momento en que escribo estas líneas y ejercí mi derecho a sufragar, el compañero, camarada, hermano, amigo, hijo de Chàvez y garante de su legado, el Presidente Obrero, Nicolás Maduro Moros, quien cumple 52 años de edad. Maduro en estos tiempos ha mostrado temple, coraje y mucha determinación para salir adelante. Por eso, pido que Dios y Chávez derramen sus bendiciones sobre él en este día que se da en el marco de una batalla por la humanidad, que tiemple el acero y la mano, y que no claudique por más amenazas, por más dificultades, por más agresiones que nos toque afrontar. De mi parte, a pesar de las críticas que pueda hacerte, no te dejaré solo, porque sé que con Chávez y Maduro, nosotros como pueblo, estaremos más seguros y en Revolución.

¡Bolívar y Chávez Viven, y sus luchas, y la Patria que nos legaron siguen!
¡Hasta la Victoria  Siempre!
¡Independencia y Patria Socialista!
¡Viviremos y Venceremos!