Andrés Bello, un cerebro fugado

Señalar algunas deficiencias de un personaje tan connotado en positivo como el que protagoniza nuestra entrega de hoy, es verdaderamente una lucha que de partida luce perdida.

Sin embargo, no he visto escritores ni historiadores ni poetas con pensamiento socialista que encomien su extraordinaria labor como científico multifacético, cuestión que me parece coherente con el pensamiento socialista. En cambio, Rafael Caldera le dedicó una de sus obras de juventud mediana, obra muy aplaudida y premiada * por gente de la derecha cristiana y los “socialdemócratas” , por no llamarlos puntofijistas, habida cuenta de que este término fue acuñado indeleblemente durante la nueva y actual República Bolivariana, mejor y más acertadamente conocida como República Chavista.

Otro detalle muy académico que nos perfila mejor a los beneficiarios de la obra bellista es que su imagen adorna todos los paraninfos de las universidades del país mientras la de nuestro admirado D. Simón Rodríguez en esos mismos escenarios mucho ha brillado por su ausencia. Hasta donde sé, existe el “Grupo Escolar Simón Rodríguez”, situado en territorio parroquial de pobres, hacia el llamado “sur de Valencia, hacia donde durante casi 500 años han corrido gravitacionalmente las aguas antes límpidas y hoy por hoy bien inmundas.

Y decimos más sobre este acreditado personaje de la derecha nacional y mundial: Su Gramática sobre la todavía incipiente lengua española o castellana contribuyó a marginar más lejos las lenguas aborígenes latinoamericanas.

Y agregamos: Andrés Bello no acompañó a Bolívar ni a nuestros verdaderos héroes y próceres en las guerras de Independencia, ignoramos si por instinto de conservación que es una cualidad muy humana cuando tenemos cerebros tan privilegiados como el que indudablemente tuvo este insigne jurista, filólogo y gramaticólogo, o por su latente y tendenciosa admiración a la aristocracia mantuana de marras.

Conste que no cuestionamos su extraordinaria obra para la América Hispana, porque lo que estamos tratando es que su aporte en nuestra independencia fue muy opaca en favor del pueblo libertador que sí acompañó a nuestros héroes dieciochescos. Apenas conocemos alguito de un famoso viaje a Londres en búsqueda de ayuda para la Primera República de cariz derechista. En consecuencia, pensamos que su procerato podrá seguir impresionando y cautivando a los descendientes de la plutocracia y hoy burguesa, lo que en nada negaría su "proprio marte" en relación a su gigantesca productividad en favor de Chile, país que sigue siendo adversario del pensamiento socialista.

06/11/2014



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Manuel C. Martínez


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