Indudablemente que la
situación de PDVAL, así como el caso de las Bolsas de valores viene
a reforzar la ola de ataques que a nivel mundial se ha levantado en
contra de la Revolución bolivariana, los dos ataques certeros de haber
resultado hubieran tenido consecuencias imposible de predecir por lo
grave, sobre todo en cuanto a la confianza y credibilidad que el pueblo
tiene en sus instituciones pero sobre todo, a la revolución Bolivariana.
Las cartas estaban
echadas y la mesa servida para los mas infames planes en donde entraron
en conchupancia nuestra ultraderecha endógena: Fedecamaras y su grupo
junto a las transnacionales : Cargill, Kellogs, Polar, Alfonso Rivas
etc. y los funcionarios disfrazados de rojo rojito aliados con el
Imperio
para desestabilizar a la Republica Bolivariana de Venezuela, en donde
de nuevo se vio la complicidad de la ultraderecha endógena enquistada
en todos los estamentos del estado especialmente en PDVSA, solo así
se puede explicar que estos planes hallan llegado tan lejos, se impone
con URGENCIA y no nos cansamos de decirlo, una revisión y remoción
sin ningún tipo de miramientos de aquellos cuyas actuaciones
dejen alguna duda en cuanto a su compromiso con la patria y con la
Revolución,
hay un dicho de Cayo Julio Cesar: “La mujer del Cesar no solo debe
parecer honesta, sino serlo”, estos sujetos no solo basta con removerlos
de sus cargos, sino que deben ser sometidos al escarnio publico para
que el pueblo sepa de una vez por todas quienes son sus verdugos y no
aparezcan después en un “carguito” debido a algún compadrazgo
o amiguismo con aquellos que se encuentran disfrazados en las alturas
del poder, este acto de corrupción grave debe ser enfrentado con
decisión
y coraje y hasta las últimas consecuencias, “aquí no hay vacas
sagradas…”
aquí no hay intocables a los que no se les pueda aplicar la ley, este
es el momento y el pueblo precisa y requiere de su gobierno y del
Comandante
presidente medidas y acciones contundentes ante una situación de
corrupción
al mejor estilo de la cuarta republica, este acto de robo a la nación
no debe ser minimizado pues se trata de la comida del pueblo y en esta
coyuntura en donde miles de seres humanos se mueren de hambre cada día
nos llena de dolor y pena que se pierda tanta comida, y mientras los
funcionarios responsables se tapan los unos a los otros, se pierda la
oportunidad para sanear de tanto sinverguenza, corrupto, y vendepatria
esta misión.
La pregunta es ¿Por qué no se escucho al pueblo ante sus constantes denuncias?, con esto no queremos hacer tela de juicio a este o a aquel funcionario, pero a 11 años
de Revolución y sin tiempo ya para más ensayo y error, no podemos dejar pasar ni minimizar las responsabilidades que le competen a cada quién, no podemos seguir con la misma metodología de sobrecargar a este o aquel funcionario con mayores responsabilidades que las que le corresponde, sobre todo en lo que se refiere a una de los mayores logros de nuestra Revolución que es alimentar a nuestro pueblo, la falta de conciencia ideológica como lo dijimos en nuestro anterior escrito, y de compromiso de algunos funcionarios, ministros, gobernadores y alcaldes conlleva a que nuestro pueblo no tenga conductas ejemplarizantes a seguir, y sino ¿ por que cuando se presento el desabastecimiento de los pdvalitos y los mercalitos en las regiones, los alcaldes y gobernadores no sonaron el timbre de alarma?, ¿Por qué se tuvieron que incrementar los precio de los alimentos de Mercal y pdval sin preocuparse el Ministro y sus encargados de averiguar en los países de origen el costo de los productos?... la idea de que solo el Comandante Presidente sea el único ejemplo a seguir y que con algunas excepciones algún que otro funcionario es lo que el pueblo observa y es por ello el peligro que se nos va a presentar en las próximas elecciones de no hacer los correctivos necesarios, aun hay tiempo, este pueblo, el de la Republica Bolivariana de Venezuela quiere castigo para los culpables, una acción ejemplarizante para todos los hambreadores del pueblo, porque si es cierto que al poner en la balanza los pro de esta gran misión y sus bondades, ya no es tiempo para minimizar las consecuencias, las perdidas en dinero, la corrupción, la traición, la comida que tanto es necesaria en el mundo entero y que por unos capitalistas disfrazados de rojo rojito, verdugos de su pueblo se perdieron lastimosamente y casi dan al traste con nuestro objetivo primordial, no podemos caer en lo mismo de las empresas capitalistas a la usanza de aquel icono de la oligarquía venezolana :”::Si es cierto que especulamos pero damos empleo”.
Confiamos en el Líder.